La Comarca de Santiago es una zona poco conocida ya que los viajeros que llegan hasta ella se limitan a visitar Santiago de Compostela, ignorando los atractivos que ofrecen sus alrededores. Uno de los lugares que merecen la pena en la comarca es Brión, un municipio de 74,9 km cuadrados con más de 100 aldeas (lo que da idea de su ambiente rural) y numerosas opciones culturales y de ocio para recorrerlo. 

Las huellas de Rosalía en Brión

Si hay un personaje que haya dejado su impronta en Brión ese es Rosalía de Castro. La escritora y poetisa gallega vivió en la localidad temporalmente y su esencia aún permanece a lo largo de la Ruta Rosaliana, un recorrido que nos acerca la vida de Rosalía mediante un itinerario cultural que pasa por Santiago de Compostela, Ames, Brión, Padrón y Dodro. 

Aún resuenan en Brión sus campanas de Bastavales y los versos que la poetisa les dedicó en su obra “Cantares gallegos”: 

“Campanas de Bastavales, 
cando vos oio tocar,
mórrome de soidades”

La ruta nos lleva a admirar la arquitectura popular de Brión, con numerosas iglesias, cruceiros y fuentes, o puentes como el del río Tinto, pero también conduce a sus lugares más representativos, como el Castro Lupario, las Torres de Altamira, la Carballeira de Santa Minia o San Xiao de Bastavales. 

Las Torres de Altamira, en ruinas

Uno de los monumentos más visitados de Brión son sus famosas Torres de Altamira, construida en el s. IX donde antes había una acrópolis castrexa. En esta antigua fortaleza tuvieron lugar incontables enfrentamientos armados entre la iglesia y la nobleza, aunque el estado actual de las Torres se debe más a los constantes asedios irmandiños y a los ataques perpetrados por el arzobispado de Santiago en 1471. 

Las Torres de Altamira son, hoy, la sombra de lo que fueron, ya que tenían seis torres, un pazo y una capilla entre otras dependencias.

San Xiao de Bastavales y sus campanas 

En Brión hay un notable patrimonio arquitectónico formado por numerosas iglesias como la Capilla de Santa Minia y otras barrocas como San Salvador, Boullón, Os Ánxeles o San Fins. Sobre ellas destaca la iglesia de San Xiao de Bastavales, orientada hacia occidente para poder ver desde su portada principal las torres de la Catedral de Santiago. Otra teoría cuenta que su orientación, hacia el amanecer, responde a alguna leyenda vinculada al Castro Lupario, otro de los puntos de interés del municipio, del que se dice que fue hogar de la tribu prerromana de los Amaeos. Apenas queda nada del asentamiento original, del que sólo se llega a distinguir parte de los muros. 

Las campanas de Bastavales, instaladas en 1828, cuyo sonido deleitó a Rosalía, aún se puede escuchar de vez en cuando, sobre todo en determinadas festividades. En sus inmediaciones, además, encontramos la Capela do Carme, de estilo barroco, y el “Balcón da Amaía”, que funciona como espléndido mirador sobre el valle que la rodea.

La Carballeira de Santa Minia, un rincón mágico

Es uno de los lugares más queridos por los vecinos de Brión, por ser un antiguo centro de fiestas, celebraciones e incluso escenario de mítines políticos. La Carballeira de Santa Minia es un robledal formado por árboles centenarios, dedicado a la santa del mismo nombre, una mártir cuyos restos llegaron a Brión desde la catacumba romana de Santa Inés en 1848 y que dispone de capilla propia donde reposa su urna. 

Cada mes de septiembre tiene lugar en la carballeira la Romería de Santa Minia, en honor a la santa, en la que se celebran conciertos y otras actuaciones musicales y culturales. 

Otros lugares de interés en Brión: pazos, embalses y balnearios

Dentro del patrimonio arquitectónico de Brión también hay varios pazos, como el de Armesto o Armental, ambos habitados. Destaca el de Trasouteiro, del s. XIV, que alberga algunos objetos procedentes de las Torres de Altamira. 

El Encoro o Embalse de Barrié de la Maza fue el primer embalse de grandes dimensiones que se construyó en Galicia para producción de energía hidroeléctrica y también se encuentra en Brión, así como el Balneario do Tremo, con un manantial de aguas sulfurosas de las que se cree que curan dolencias de la piel. 

En Brión también se puede disfrutar de varias rutas de senderismo, muchas a las orillas del Sar o del Tambre, otras que llevan al Castro Lupario o que recorren las principales parroquias del municipio. Una de las más bonitas es la Ruta da Fervenza do Pozo Negro, de escasa dificultad, que conduce hasta un pequeño salto de agua de no más de 6 metros de altura, pero de gran belleza. 

Más información sobre estas rutas en Senderismo Brión. 

Emma Sexto

https://unmundoinfinito.com/