Cuando hablamos de peregrinaje lo primero que se nos viene a la cabeza es, sin atisbo de dudas, el Camino de Santiago: una ruta milenaria que desde hace siglos recorren cientos de personas con el objetivo de alcanzar el lugar sagrado en el que descansan los restos del Apóstol Santiago. No es de extrañar por tanto que la urbe compostelana conforme el tercer gran destino de peregrinación cristiana del mundo, sólo por detrás de las ciudades de Roma y Jerusalén.
Cabe destacar que más allá de las famosas rutas xacobeas, lo cierto es que existen otros itinerarios de igual interés que cruzan gran parte del país siguiendo su propia estela espiritual, como es el caso de la Vía Mariana, que une los santuarios marianos entre Braga y Muxía; o la Ruta Teresiana, la cual se perfila desde la cuna al sepulcro de Santa Teresa de Jesús.
No obstante, y volviendo al tema que nos atañe, merece la pena hacer hincapié en una de las variantes menos conocidas del Camino de Santiago: la EuroVelo 3, también llamada la Ruta de los Peregrinos o Pilgrims Route, en su versión original. Este itinerario ciclista de larga distancia ―el cual forma parte de la red EuroVelo― atraviesa siete países europeos desde la ciudad de Trondheim (Noruega), más de 5.600 kilómetros y hasta una veintena de etapas antes de alcanzar la capital gallega.
Se trata además de un recorrido de enorme belleza natural e interés patrimonial, pues en todo el trayecto se visitan hasta 21 lugares reconocidos por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad. En lo que respecta al tramo gallego, la EuroVelo 3 se adentra en los límites de Galicia a partir de la sección 17 de esta aventura, con en el pueblo lucense de Pedrafita do Cebreiro como puerta de entrada al mágico territorio gallego. Desde allí la senda continúa hacia Triacastela, Samos y Sarria antes de enfilar los últimos kilómetros con destino a la Catedral de Santiago y, más tarde, también al bautizado como cabo del fin del mundo.
Una singular ruta ciclista de larga distancia
Impulsada por la Federación Europea de Ciclistas, la conocida como EuroVelo conforma una red de rutas ciclistas de larga distancia que conectan el grueso del continente europeo. En la actualidad existen unos 17 itinerarios definidos en 42 países distintos que suman con sus recorridos alrededor de 90.000 kilómetros, siendo la EuroVelo 3 uno de sus sendas más transitadas. El punto de partida de la misma se encuentra en los límites de la ciudad de Trondheim, la tercera ciudad más poblada de Noruega, y avanza de norte a sur del continente a través de siete países entre los que se encuentran Suecia, Dinamarca, Alemania, Bélgica, Francia, España y la ya citada Noruega.
Esta Ruta del Peregrino permite a los amantes de la bicicleta viajar por Europa de forma sostenible y descubrir la enorme riqueza natural, cultural, patrimonial e incluso gastronómica que recorre este continente. De hecho, durante el recorrido se realizan paradas en hasta 21 lugares distinguidos por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad.
Los grabados rupestres de Tanum, en Suecia; los túmulos, piedras rúnicas y la iglesia de Jelling en Dinamarca; las ciudades alemanas de Hamburgo y Bremen; los campanarios de Namury Charleroi, o el sitio minero de Bois du Cazier en Bélgica; así como el palacio y parque de Fontainebleu o el centro histórico de Burdeos ya en territorios franceses son sólo algunas de estas paradas de interés internacional de la EuroVelo 3.
En las etapas por tierras españolas, la Ruta del Peregrino se adentra en la historia de los Monasterios de San Millán de Yuso y de Suso, el sitio arqueológico de Atapuerca, la Catedral de Burgos y hasta el propio Camino de Santiago Francés. Además, a lo largo del trayecto los viajeros también podrán disfrutar del encanto de algunas de las catedrales más importantes del mundo, desde la de Nidaros en Noruega hasta la de Santiago de Compostela, pasando por otras como las de Colonia, Aquisgrán o Notre Dame de París.
El tramo gallego de la EuroVelo 3
Una vez la EuroVelo 3 se adentra en territorio español, esta ruta cicloturista sigue de cerca el trazado del Camino de Santiago Francés a su paso por las regiones de Navarra, La Rioja, Castilla y León y Galicia. De hecho, antes de enfilar sus últimos kilómetros en la comunidad gallega, la Ruta del Peregrino atraviesa el frondoso Priniero Navarro y desciende hasta el río Ebro para después sumergirse en las extensas planicies agrícolas de la Tierra castellanoleonesa.
Como decíamos unas líneas más arriba, la puerta de entrada a Galicia se encuentra tras superar los montes de la comarca leonesa del Bierzo, justo al poner los pies en la localidad lucense de Pedrafita do Cebreiro. En el tramo gallego, la EuroVelo 3 se extiende a lo largo de cinco etapas o secciones (17, 18, 19, 20 y 21), estructuradas de tal manera que el principio y final de cada una está provisto con los servicios necesarios de alojamiento, comida y transporte.
Desde Pedrafita do Cebreiro la ruta ciclista asciende hasta lo más alto de la aldea de O Cebreiro, enmarcada a más de 1.300 metros de altitud entre dos grandes techos de Galicia, las sierras de O Courel y Os Ancares. Este pueblo de origen prerromano es famoso por sus pallozas de techo de paja de centeno, todo un símbolo de la arquitectura tradicional. En esta primera etapa por tierras meigas, el itinerario también se detiene en otros puntos emblemáticos como el pueblo de Triacastela, el majestuoso Monasterio de Samos y la encantadora villa de Sarria.
En la segunda etapa, la ruta continúa su camino hacia Compostela entre prados verdes y robledales en busca de las riberas del río Miño. Una vez salvado el curso fluvial, la villa de Portomarín se presenta al viajero como el curioso pueblo de Galicia que volvió a nacer tras ser devorado por el Miño. Ya en la frontera entre las provincias de Lugo y A Coruña, las localidades de Palas de Reis y Melide se suman las paradas de este segundo itinerario, este último municipio destacado por albergar el cruceiro más antiguo de Galicia.
La tercera etapa de la EuroVelo 3 por territorio gallego visita la localidad coruñesa de Arzúa, considerada la gran capital del queso en Galicia. Siguiendo el trazado de la llamada "Ruta del Holandés" a través de la vía comarcal AC-240, la senda visita los municipios de Touro y Boqueixón para más tarde alcanzar la Ciudad de la Cultura, la primera parada en la gran urbe compostelana y que culmina su recorrido a los pies de la Catedral de Santiago.
Es precisamente desde la Praza do Obradoiro desde donde arranca la cuarta etapa que va a permitir al viajero cruzar el río Tambre a la altura del pintoresco pueblo de A Ponte Maceira y descubrir el encanto de la villa de Negreira. Tras las huellas del Camino de Fisterra-Muxía, el sendero se detiene en la pequeña aldea de Olveiroa, un lugar que fue resucitado gracias a los peregrinos. Ya en su recta final, la última etapa de la Eurovelo 3 por tierras gallegas se adentra en los increíbles paisajes de la Costa da Morte, recalando en las villas de Cee y Corcubión antes de poner fin frente al mar a un viaje de más de 5.600 kilómetros en el Cabo Fisterra, el verdadero fin del mundo gallego.