La empanada gallega no necesita presentación y es un plato clásico que nunca defrauda. La clave de su éxito reside en parte en su versatilidad, ya que un mismo formato permite un gran combinación de ingredientes, desde lo más tradicional a las combinaciones más modernas. La Tienda de Lino, en la calle Novoa Santos 36-38 de A Coruña, realiza sus empanadas siguiendo una receta familiar de más de 25 años basada en "cariño y buen producto local". Estas empanadas no solo se pueden comprar en el local, sino que desde hace años las venden por Internet y las envían al resto de Galicia, de España y a los rincones más insospechados del planeta.
"La característica principal de nuestra empanada es que no usamos levadura, utilizamos las propias de la cerveza, y tiene que ser obligatoriamente Estrella Galicia, tanto por pasión coruñesa, como por su calidad excepcional", cuenta Javier González, gerente de La Tienda de Lino y de Ternura.
Las recetas de sus empanadas la complementan productos de calidad de la zona: mejillón de Lorbé, cebolla chata del entorno de Betanzos o merluza de Celeiro, "que para nosotros es la mejor del mundo", reconoce. Porque para ellos "tirar de producto local es una satisfacción y una manera de entender las cosas". Una filosofía que sus padres, Lino y Mari, instauraron hace 50 años cuando fundaron el negocio.
En ese sentido, González adelanta que este lunes logró cerrar por fin un acuerdo con Calvo durante la celebración del Galicia Fórum Gastronómico para trabajar con su atún. "Es una empresa gallega líder internacional, me voy muy feliz a casa", celebra.
Fusión de tradición y modernidad
La Tienda de Lino es uno de los pocos obradores en los que aún se hace todo el proceso de elaboración de la empanada, incluyendo la preparación de la cebolla. "El resultado de una buena empanada es la masa y la zaragallada, esa elaboración de verduras, y somos de los poquitos que quedamos haciendo todo el proceso", relata.
Ahora, además, se encuentran "un poco obsesionados" con el control de las grasas para lograr hacer empanadas que sean más ligeras y saludables.
"La calidad siempre ha estado presente en nuestra familia y eso es algo que marca el producto. Cariño y buen producto es lo mayoritario, pero también hay un trabajo que es importante y que es más técnico, de laboratorio, de valores nutricionales, porque para nosotros una buena empanada es aquella que te pide comer más y que no te bloquea", explica González.
Más allá de eso, en La Tienda de Lino siguen apostando por los sabores más clásicos: atún, bacalao, bacalao con pasas, carne, zamburiñas o pulpo. Pero, además, en los últimos tiempos están incluyendo otras combinaciones demandadas por el público más joven: como el pollo con curry. Y también otras que recuerdan más a "un plato cocinado", como la empanada de merluza en salsa de puerro o la de langostinos con setas.
"La empanada es un producto clásico en la gastronomía gallega y los sabores clásicos siempre funcionan, pero es un producto que lleva muy bien la innovación, y hay una parte del público a la que le gusta ese desarrollo más gastronómico dentro de la de la empanada", reflexiona.