Santiago de Compostela tiene una amplia oferta para comer bien a un buen precio, que es precisamente lo que reconoce el distintivo Bib Gourmand de la Guía Michelin: la relación calidad-precio, siempre dentro de la excelencia culinaria, en la que Santiago es líder de Galicia con un total de siete locales.
En la nueva Guía Michelin España y Portugal 2021, la capital gallega suma a un nuevo restaurante a su lista de Bib Gourmand: Mamá Peixe, una "taberna mariñeira" dedicada al pescado en el que destaca un su menú marinero, con platos tradicionales actualizados por tan solo 13 euros.
"Fue algo inesperado, porque no hemos hecho nada diferente desde que abrimos hace cinco años", explica a Quincemil el chef de Mamá Peixe, Guillermo Perez, tras un "momentazo" que supone todo un "impulso" después de este 2020 "tan extraño y complicado".
Mamá Peixe, capitaneado por Guillermo en cocinas y por su mujer, Ana Vidal, en sala, abrió hace cinco años en una pequeña casa antigua de la Rúa da Algalia de Arriba, convertida en "una taberna humilde, con un envoltorio que no busca ser vistoso".
Tras más de una década dedicándose a la hostelería y después de haber dirigido cocinas con más de diez personasen "restaurantes muy grandes y exigentes" en Mallorca, Guillermo se quería alejar de toda esa vorágine y tener "una vida ordenada y alejada".
Así, cuando ya había tenido su primer hijo y esperaba al segundo, lo tuvo claro. "Es ahora o nunca, o me vuelvo ahora o ya me quedo para siempre", detalla el chef, quien además quería que sus hijos naciesen en Galicia.
"En esta taberna tengo un horario fantástico: tengo más tiempo libre, puedo ir a ver jugar a mi hijo al fútbol al salir de trabajar y esto me permite cocinar de forma más sencilla y relajada", prosigue.
Más allá de esa búsqueda de una mayor calidad de vida y un regreso al hogar, la apuesta culinaria de Mamá Peixe estuvo clara desde el primer momento: un restaurante especializado en pescado, ya que no había ninguno dedicado a él en exclusiva.
"Queríamos eso, pescado entero, de pieza, sin trampa ni cartón y apostando por producto, producto y producto; vinimos a cubrir ese hueco, pude poner en práctica esa idea que tenía y tuvo una muy buena acogida en la ciudad", relata Guillermo.
Más allá de por algunos clásicos de su carta, Mamá Peixe se consolidó gracias al "menú mariñeiro", con un aperitivo, un primer plato, medio pescado, media carne y postre, acompañado por dos vinos -un tinto y un blanco- y a un "precio popular" de 13 euros.
"La acogida del menú fue una locura, algo bestial, y aún con el confinamiento fue sorprendente cómo la gente respondió igual: me atrevo a decir que, si no es el mejor menú de Santiago, es uno de los mejores", afirma Guillermo.
Más allá del menú, en la carta, que va cambiando a lo largo del año y de acuerdo con la disponibilidad de pescado, no pueden faltar el sashimi de sargo con aceite de miso, tomatitos y huevos de salmón o el pulpo dorado a la mugardesa con alioli de naranja, así como el arroz con bogavante.
Lo que tampoco ha cambiado con los años es la relación con los proveedores: Mamá Peixe trabaja con los mismos todos los días y le ofrecen "un producto bestial", algo fundamental para el restaurante. Aunque, eso sí, en Galicia "lo complicado es encontrar mal producto".
Guillermo recibe este Bib Gourmand con una mezcla de orgullo y sorpresa, toda vez que, cuando Mamá Peixe recibió la visita del crítico, "no sabían todavía si se iba a publicar la Guía Michelin este año".
"Mientras tengamos clientes no necesitamos nada más, ellos nunca nos han dado de lado y ese es el mayor reconocimiento que se puede tener", concluye Guillermo, quien celebra el "reconocimiento" a años de trabajo en Mamá Peixe.