A Coruña gusta de buenos helados todo el año, pero especialmente en verano se hace más urgente probar los algunos de los sabores nuevos y llamativos que presentan las heladerías de la ciudad. Toda una variedad de locales para elegir el estilo y el sabor que más gustan. Más allá de los tradicionales chocolates, fresas, vainillas o limones, cada heladería tiene sus propios ases bajo el mostrador para sorprender a los clientes.
Stracciatella rosa en la Colón
La tradición heladera de A Coruña va unida a la heladería Colón. Treinta años refrigerando los paladares en la Marina y también se dan el lujo de innovar. Se desmarcan por "apostar por producto autóctono", afirma su gerente, Daniel Reboredo. Apunta que no caen en tendencias de marcas comerciales.
A los sabores clásicos añaden su variedad de sabores frutales como la piña o el yogur de maracuyá y melocotón. También tienen sabor a manzana asada, aunque no se oferta en la temporada de verano.
Destaca sobre todos los demás la stracciatella rosa. Esta colorida variedad de la stracciatella clásica se elabora con chocolate ruby o rosa. Esta variedad fue presentada al público en 2017 por la casa chocolate Barry Callebaut, con un reducido porcentaje de cacao. Sin duda, uno de los sabores perfecto para un paseo por el Parrote.
Tarta de Santiago y mantecado con bica en Lonxa
Junto a la Colón se encuentra Lonxa. La dependienta rechaza la idea de competencia. "Cada heladería de la Marina tiene su estilo y su clientela", comenta. En Lonxa cuentan con un cartel muy colorido y variado, combinado sabores de manera única en la ciudad. La stracciatella de coco o la combinación de pistacho con flor de sal son algunos de los exotismos más característicos del local. Esta temporada de verano también tienen productos con sabor a dulce de leche, licor café o chocolate de Costa de Marfil 65% cacao.
Sin embargo, los sabores más llamativos recuerdan a postres gallegos. El helado de tarta de Santiago y el de mantecado de bica son dos especialidades que merece la pena probar a lametazos y a cucharadas.
María Pita y sabores hindúes en Puerta Real
La heladería Artesana Puerta Real tiene una oferta de las más variadas y llamativas en su local en la calle Bailén. Que la carta en el exterior del local no engañe al cliente. Entrando por la puerta ya se pueden ver una buena ristra de sabores particulares y llamativos. Destaca el helado María Pita. El dulce con nombre ilustre lleva una base de queso filadelfia con un toque de ron, vainilla, fruta escarchada y sirope de chocolate.
De nombres locales a orígenes más exóticos. El helado de crema hindú es otro de los sabores llamativos de esta heladería de la calle Bailén. A una base de chocolate blanco le añaden especias como canela y ralladura de naranja. Algo más casero resulta el helado de tarta de la abuela, hecho de galleta Chiquilín y chocolate.
De la calle Bailén a Puerta Real. La heladería de la misma propiedad destaca sobre la competencia por los sabores adultos. Una variedad de sabores a bebidas alcohólicas esperan a los clientes que deseen probar de una manera diferente. Así ofrecen el helado de mojito, crema de orujo, caipirinha o caipiroska.
Tradición y queso con membrillo en la Ibi
El helado más tradicional muchas veces es el que más gusta al público. "Podríamos hacer helado de pulpo, pero lo que queremos es vender", bromea Gonzalo, el heladero de la Ibi. Otra de las heladerías clásicas de la ciudad no tiene apuestas tan locas o exóticas. Sin embargo, sí tienen su hueco para apostar por sabores que llaman a leer dos veces la etiqueta como el pistacho a la sal. Esta semana tienen a la venta el sabor a queso con membrillo.
Otra de las variedades que no destacan en otras heladerías y sí en la Ibi son las variedades de chocolate Ferrero, oreo y negro. En cuanto a sabores frutales, también resulta curioso el sabor a sandía. La Ibi también apuesta por helados veganos, que cada vez tienen más tirada. "Queremos que todos los clientes tengan al menos un par de sabores entre los que elegir".
El surtido vegano de The Bio Factory
Otra opción vegana es The Bio Factory en la calle Santa Catalina. Esta heladería gallega presenta una gran diversidad de sabores frutales, por separado y combinados. El limón con albahaca o el aguacate con cacahuete son algunas de las combinaciones más llamativas del local.
También tienen surtidos de helados de crema, elaborados con leche ecológica y sin gluten, entre los que destacan el de ron con pasas, vainilla bourbon y el de avellanas con chocolate blanco. Sea la heladería que sea, en A Coruña es muy fácil explorar sabores y descubrir nuevas delicias para el paladar.