Desde hace poco más de un año, la marca gallega de repostería artesana Pandejuevo ya es toda una referencia en el sector, y el secreto, según su joven fundador Diego Trillo, está en "na paciencia e en dar á xente o que quere con produtos o máis naturais posible". El producto principal son cookies de diferentes tipos elaboradas con maíz, calabaza, nueces, chocolate, mantequilla y hasta café en un obrador ubicado en Cee (A Coruña). Forman el equipo un total de cinco personas.

"A acollida foi bestial en e non esperábamos crecer tan rápido. Traballamos sempre con produtos de kilómetro cero, de feito a fariña de millo que usamos é de Carballo", explica Trillo, a la vez que destaca que el formato de etiquetado y envasado de las galletas ha conquistado a muchos clientes porque "serve como regalo ou detalle e pódese reciclar". Uno de los productos más especiales de los que disponen y que han sido todo un éxito estas Navidades son "as galletas de Nadal". "Elaboramos este doce na miña familia desde toda a vida. Na miña casa sempre regaláronse por Nadal e é unha forma de continuar a tradición", cuenta orgulloso el creador de Pandejuevo, que añade que en el puente de diciembre toda la familia se junta para cocinar estos dulces.

Receta "de las abuelas" y contraste de sabores

Trillo argumenta que el producto de toda la vida es el denominado "pandejuevo". "Chama a atención á xente que un mozo novo faga un produto que normalmente soen facer as avoas, porque nas casas estase perdendo a tradición", lamenta, mientras hace hincapié en que "leva moita elaboración e a paciencia e o tempo cada vez é menos". Esta elaboración, según trasladan también desde la marca repostera, "nace dunha tradición familiar ao calor dunha cociña chea de xente, fariña e manteiga", afirman.

Las cookies que elaboran se dividen en: de maíz con semillas de calabaza, girasol, nueces y chips de chocolate; las de brownie con caramelo y cacahuete salado, las de maíz con chocolate ruby y nueces (especialmente indicadas para intolerantes al gluten), las de café o las clásicas de mantequilla o mantequilla y chocolate. "Algunhas teñen sabores intensos e gústanos xogar co punto de sal e que sexan baixas en azúcar. Á xente lle alucina o contraste de sabores", reconoce Trillo.

Las galletas de Navidad se salen un poco de esta línea y cada una tiene una forma según el fruto seco con el que esté elaborada. De esta manera, las de forma de corazón saben a avellana, las de trébol a nuez y las lunas a almendra. A pesar de su amplia oferta de dulces, el principal y más demandado es el "pandejuevo de sempre", un bollo en el que desde el obrador detallan que "é importante unha fermentación lenta, un bo anís e usar moi boa manteiga". Para aquellos que no conocían este dulce, están a la venta desde hace unos días un formato más pequeño al habitual a modo de presentación.

Postres individuales y "gym y ñam"

En verano, los productos más demandados de Pandejuevo fueron postres en ración individual como tiramisú y tartas como carrot cake, red velvet, café e nueces, chocolate y avellanas, queso al horno o un cremoso de tres chocolates. "Este formato véndese moi ben para restauración e neste verán recibimos moitas ofertas de xente de fóra de Galicia que non puidemos atender de momento por temas de loxística, xa que ten que ser transporte en frío e é delicado", aclara Trillo.

En cuanto a los precios, los botes de galletas cuestan alrededor de 10 euros. De cara a 2022, Trillo explica que seguirán en la misma línea y que "os produtos novos saen de cando me levanto un día inspirado pola mañá", sobe lo que concreta que "soen saír a miúdo sen demasiado plantexamento". En este sentido, si no tienen mucho trabajo en el obrador deciden experimentar con diferentes ingredientes y someterlos a una fase de prueba, que si es superada eso se traduce en el lanzamiento al mercado de una nueva variedad de dulce.

Estas pruebas las realizan sobre todo en ocasiones como sus visitas periódicas a la sede de Inditex en Arteixo (A Coruña), donde centenares de empleados prueban las elaboraciones y dan su veredicto.

Asimismo, Pandejuevo colabora con un gimnasio de Cee (A Coruña), junto al que recomiendan "el gym y el ñam". "Pensamos que pódese comer un doce de vez en cando sempre que mantéñase unha vida activa", afirma Trillo, algo que él mismo aplica en su rutina diaria, dado que las horas que nos las pasa en el obrador elaborando dulces las ocupa entrenando por su salud mental y física.

Aunque la apertura se retrasó dado que el lanzamiento estaba programado para marzo de 2020, cuando se decretó el confinamiento, Trillo se muestra optimista con Pandejuevo y rememora que se crió en una cocina. "Aprendín pola tradición familiar e a base fundamental é miña nai, que ensinoume todo o que sei", expresa agradecido.