El pulpo es uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía gallega. Cuenta con numerosas celebraciones durante el año en las que disfrutar de este manjar y con multitud de restaurantes que lo preparan de forma tradicional y que también innovan con nuevas recetas.
Lo más típico es comerlo á feira o a la gallega, pero este producto también permite experimentar y hacer una fusión con la cocina japonesa o transformarlo en platos de comida rápida de gran calidad. Hoy os traemos nueve formas de preparar y disfrutar del pulpo en Galicia.
Pulpo á feira
Una de las recetas más emblemáticas de la cocina gallega. Antes de cocinarlo, el pulpo debe ser congelado o mazado para ablandar el nervio. Una vez tenemos la materia prima hay que cocerlo, preferiblemente en una olla de cobre. Antes de introducir por completo el pulpo en la olla, hay que sacarlo e introducirlo tres veces durante unos pocos segundos. Esta técnica se conoce como "asustar" y sirve para que no pierda la piel durante la cocción. Una vez cocido se corta en rodajas y se da el toque final con aceite de oliva virgen extra y pimentón dulce. También puede acompañarse de cachelos recibiendo el nombre de pulpo a la gallega.
Pulpo a la plancha
Esta es una de las recetas más sencillas para preparar el pulpo. Se recomienda cocerlo previamente para que no se queme una vez lo pongamos en la plancha. Un chorro de aceite, un minuto por cada lado y un poco de sal gorda son suficientes para que el pulpo esté en el punto perfecto. A la hora de servirlo se le puede añadir un poco de pimentón para darle más sabor. Puedes cortarlo a la mitad o en rodajas a la hora de cocinarlo y acompañarlo de una crema de patata.
Pulpo a la brasa
El proceso es similar, cocerlo previamente pero aquí se recomienda no cortar las patas y cocinarlas enteras. Para cocinarlo hay que echar un chorro de aceite virgen extra y moverlo para que se dore por todas las partes. Poco tiempo y fuego vivo son las claves para que quede jugoso. Una vez lo veas dorado estará listo para servir con un chorrito de aceite.
Pulpo a la mugardesa
Esta receta procede de Mugardos, una localidad de Ferrolterra. El pulpo hay que cocerlo, cortarlo en rodajas y añadirlo en el último paso del proceso. El sabor diferencial se lo dará la salsa, que se hace rehogando ajo, cebolla, pimiento rojo y patatas en primera instancia, para luego añadir curry en polvo, licor y fumet de pescado.
Pulpo en tempura
Este delicioso plato que mezcla la cocina gallega y japonesa es muy sencillo de elaborar. Una vez tengamos la tempura lista, basta con pasar el pulpo, previamente cocido, por la mezcla. Después solo hay que freírlo en abundante aceite y servirlo. Un buen lugar para probar esta elaboración es la Taberna la Galera en A Coruña, que lo sirve acompañado de puré de patata y soja.
Empanada de pulpo
La mezcla perfecta entre dos platos que encantan a todos los gallegos. De esta elaboración se quedó prendada Clara Villalón de Cocinillas, que recomienda una receta influenciada por A Pulpeira de Melide de A Coruña. La clave para el relleno es usar los restos del pulpo o patas de pulpo que ya vienen cocidas. Luego realizaremos un sofrito con pimiento, cebolla y tomate frito, al que se puede añadir un toque más innovador con salsa chipotle o albahaca.
Hamburguesa de pulpo
Para preparar la hamburguesa tenemos que cocer el pulpo, picarlo, darle una forma similar a la hamburguesa y pasarlo por la plancha. Luego irá en la creatividad de cada uno los ingredientes que se le pueden añadir a la elaboración, pero una muy recomendable y conocida es la de Casa Alongos en Melide, que lleva aceite de oliva virgen extra, tomate, queso, cebolla caramelizada y aliño de pimentón de la Vera y ajada.
Pizza de pulpo
Para llevar a cabo esta elaboración es importante utilizar un buen queso de la tierra que complemente al pulpo. Un buen lugar para probar esta mezcla entre Italia y Galicia es la La Quadriglia en A Coruña, que elabora una pizza con queso de arzúa, pulpo, aceite virgen extra y pimentón dulce. Cuatro ingredientes que se convierten en una delicia para todos los amantes de estas dos gastronomías.
Perrito de pulpo
Una de las formas más originales de comer el pulpo es como un perrito caliente. Así lo podemos tomar en Benboa, que tiene establecimientos en A Coruña, Santiago y Corrubedo. Para llevar a cabo este plato utilizan el pulpo cortado como si fuera raxo y lo acompañan de puré de boniato, queso San Simón y mayonesa de chimichurri.