Su nombre es Miau, atiende a cientos de comensales, sirve una carta casi infinita de platos y hasta canta el cumpleaños feliz. Lo curioso de este camarero es que no es humano, sino un robot que trabaja en uno de los establecimientos hosteleros de moda en Galicia, Umi Sushi, con dos locales en Vigo y uno en A Coruña.

Miau no es el único camarero robot, ya que en Sushi Utopia, que tiene un local en Narón y otro en A Coruña, cuenta con otros cuatro. Este tipo de establecimientos se han asentado en Galicia en los últimos meses y reciben cientos de comensales, especialmente los fines de semana.

Su propuesta es muy sencilla: una amplia oferta de platos y precios para todos los bolsillos. Los buffets libres siempre han tenido muchos adeptos y en la primera parte de la década de los 2010 se vivió un fenómeno similar con la cadena de comida italiana Muerde la Pasta.

Locales amplios en las afueras o centros comerciales

Este tipo de establecimientos coinciden en varios aspectos. Sus locales suelen ser muy amplios y con capacidad para cientos de comensales. Aunque su tamaño es grande, no es fácil encontrar una mesa el fin de semana, por lo que es aconsejable reservar.

Otro aspecto a destacar es que están en las afueras de la ciudades o en centros comerciales. Por ejemplo, en Vigo, Umi Sushi empezó con un local cerca de la playa de Samil. Recientemente abrieron un local en el centro, pero lo hicieron en el centro comercial A Laxe. En A Coruña, la cadena acaba de abrir en el polígono de A Grela y Sushi Utopía se sitúa en Matogrande, un barrio a las afueras. En Narón, el otro establecimiento de Sushi Utopía está en el Polígono de A Gándara, siguiendo la tónica general.

Resulta curioso que aunque sirvan comida japonesa, sus dueños no sean nipones, sino de China. Es el caso de los propietarios de Umi Sushi en Vigo, Cristina y Samuel, nombres que escogieron al llegar a España para facilitar su pronunciación, o de Yu Zhou, que abrió en Narón el Sushi Utopía de A Gándara.

Una carta prácticamente infinita

La oferta gastronómica de estos establecimientos tiene a la cocina japonesa como protagonista, aunque también hay otros platos de la cocina asiática. Los precios suelen ser bastante baratos, por debajo de los 20 euros de lunes a viernes y por debajo de los 30 los fines de semana.

Un aspecto interesante para evitar el desperdicio de comida, aunque también puede generar el disgusto de algún cliente, es que tienes que acabarte todo lo que pides. En caso de dejar algo en el plato tendrás que pagar una multa, lo que incrementará el precio de la cuenta.

Al contrario que en otros buffets, aquí no hay que levantarse a buscar los platos, sino que se pide como en un restaurante normal seleccionando los platos en la mesa. En Umi Sushi, los camareros, humanos en este caso, recogen la comanda. En Sushi Utopía el pedido se hace a través de una tablet. El comensal debe seleccionar los platos que quiere y para poder pedir de nuevo tiene que terminarlos o contar con la multa posterior.

Si queréis descubrir estos establecimientos podéis hacerlo en los locales anteriormente mencionados. Su horario es tan amplio como su carta, ya que abren todos los días de la semana en turno de comidas y cenas.