El Grupo de Emerxencias Supramunicipal (GES) de Ortigueira (A Coruña) y los Bombeiros do Eume rescataron esta mañana a un perro que se había caído en un pozo de muy difícil acceso en el lugar do Valado, en la parroquia de Insua. El aviso se trasladó inicialmente al GES, pero bajar al pozo era complicado y la zona resultaba peligrosa al estar en el entorno de una vivienda abandonada cuyos muros podrían derrumbarse.

Las circunstancias motivaron que se llamase a los bomberos para poder realizar la desescalada y subir al perro con más seguridad. El animal, que estaba a 15 metros de profundidad, fue rescatado sin heridas de gravedad y entregado a sus dueños. El alcalde de este municipio coruñés, Juan Penabad Muras, ordenó tapiar el pozo y las autoridades municipales buscarán al propietario del terreno para que se ocupe de asegurar toda la zona en función de las directrices municipales.

Un momento del rescate del perro en el pozo de Ortigueira (Concello de Ortigueira).

Muras trasladó su preocupación ante este tipo de sucesos, ya que no es la primera vez que toma decisiones relacionadas con construcciones peligrosas desde que ocupa el mandato del Concello de Ortigueira. El año pasado, sin ir más lejos, falleció una nonagenaria que se había precipitado en otro pozo. "Hoy fue un perro, y le damos toda la importancia del mundo a su rescate. Pero, ¿y si llega a ser un cazador, un senderista o un trabajador de la madera y no pueden avisar de lo que les pasó?", recapacitó el regidor.

El alcalde de Ortigueira pidió la colaboración ciudadana para que si alguien conoce o encuentra un pozo abierto u otra situación de peligro similar, dé aviso "sin perder ni un minuto". Muras insistió en que él mismo está localizable las 24 horas y que este tipo de situaciones tienen que corregirse de inmediato.