Fotos tomadas entre el 3 y el 6 de octubre en las urgencias del Clínico de Santiago

Fotos tomadas entre el 3 y el 6 de octubre en las urgencias del Clínico de Santiago Asociación Pacientes e Usuarios do CHUS

Salud

Denuncian la falta de intimidad en la sala de Urgencias del CHUS de Santiago de Compostela

La Asociación de Pacientes e Usuarios do CHUS ha recibido varias quejas de pacientes

10 octubre, 2022 17:14

La Asociación de Pacientes e Usuarios do CHUS denunció este lunes en Facebook las condiciones que hay en el servicio de Urxencias del Clínico de Santiago. La situación refleja "as graves limitacións que existen para preservar a intimidade e dignidade dos pacientes" en el hospital compostelano.

La entidad señala que han recibido varias quejas sobre enfermos que permanecen en espera de ingreso en una sala amplia que no está pensada para los pacientes o sus familias. Durante el momento de espera, que puede llegar a extenderse días, la distancia entre los puestos dificulta que se pueda colocar una silla para los acompañantes. Igualmente la separación en las camas, indican, consiste en un biombo que no llega a los 1,5 metros de altura, que cuando se mueven para atender al paciente obliga a invadir el espacio contiguo.

Este traqueteo, denuncia la asociación hace que estos instrumentos no estén nunca donde debían y un adulto puede ver en su totalidad la sala, en la que se realizan pruebas médicas y exploraciones. "Calquera pode coñecer o relativo a todas as demais persoas e que os doentes teñan que expoñer a súa intimidade ou realizar as súas funcións fisiolóxicas á vista de todo o mundo", añaden.

Todo ello, argumenta la asociación, se hace todavía más grave si se tiene en cuenta que la sala de observación se usa "como un almacén de pacientes co ingreso en planta asinado e con estancias superiores a 24 horas".

La entidad señala aque han recibido valias quejas sobre enfermos que permanecen en espera de ingreso en una sala amplia que no está pensada para los pacintes o sus familias. Durante el mometno de espera, que puede llegar a extenderse días, la distancia entre los puestoos dificulta que se pueda colocar una silla para los acompañantes. Igualemnte la separación en las camas, indican, consiste en un biombo que no llega a los 1,5 metros de altura, que cuando se meuven para atender al pacinete obligar a invadir el espacio continuo.

Este traheteo, denuncia la asoicaión hace que estos instrumentos no estén nunca donde deban y un adulto puede ver en su ottalidad la sala, en la que se realizan pribeas médicas y exploraciones. "Calquera poode coñecer o relativo a todas as demais persoas e que os doentes teñan que expoñer a súa intimidade ou realizar as súas funcións fisiolóxicas á vista de todo o mundo", añaden.

Todo ello, argumenta la asociación, se hace todavía más grae si se tiene en cuenta que la sala de observación se uso " como un almacén de pacientes co ingreso en planta asinado e con estancias superiores a 24 horas".