Los tipos de cáncer más frecuentes en Galicia: cómo prevenirlos y detectarlos

Los tipos de cáncer más frecuentes en Galicia: cómo prevenirlos y detectarlos

Salud

Los tipos de cáncer más frecuentes en Galicia: cómo prevenirlos y detectarlos

El pasado año en Galicia se diagnosticaron 19.932 pacientes de cáncer, siendo los más comunes el de colon, próstata, mama y pulmón. Analizamos con expertos la situación actual de estas enfermedades. ¿Está aumentando la incidencia?

19 febrero, 2023 06:00

"Nunca te esperas que te pase a ti" es una de las frases más repetidas en las consultas, pero el próximo año se estima que haya en España 279.260 nuevos casos, una incidencia que ha ido subiendo año a año. Hablamos del cáncer, una de las principales causas de morbi-mortalidad en España. Un grupo de enfermedades que se origina cuando las células se reproducen sin control, invadiendo los tejidos y causando tumores, que pueden ser de un amplio espectro. Sin embargo, lejos de las alarmas, los avances en los tratamientos y los diagnósticos cada vez más precoces hacen que la supervivencia y la calidad de vida de los pacientes, no deje de aumentar.

Según las cifras de la Asociación Española contra el Cáncer, el pasado año en Galicia se diagnosticaron 19.932 pacientes, de ellos 11.641 fueron hombres y 8.921 mujeres. Fue así la quinta comunidad española con más diagnósticos, solo superada, en orden de más a menos casos, por Andalucía, Cataluña, Madrid y la Comunidad Valenciana. En total fueron 290.175 casos en España.

Sobre los tipos de tumor con mayor incidencia destaca el cáncer de colon, con 2.925 casos diagnosticados el pasado año. Con poca diferencia, aparece el de próstata (2.453 diagnósticos). Le siguen el de mama, con 2.247 casos y el de pulmón, con 2.039. El de mama es el que presenta una mayor incidencia a nivel mundial, representando el 12,5% de los casos de cáncer diagnosticados, según el estudio de la SEOM. Este grupo de tumores representan más de la mitad del total de nuevos casos.

En el caso de cáncer de colon, se ha detectado cada vez una mayor incidencia en la población, siendo la masculina la más afectada. Desde la sede de A Coruña de la Asociación Española contra el Cáncer cuentan que han detectado un aumento en los últimos años de estos pacientes. Rosa Trillo, psicóloga y técnica de prevención del centro, explica que en el caso del de colon "hay diagnósticos muy precoces que se solucionan con cirugía no invasiva, por lo que los pacientes no suelen llegar a acudir a nosotros", en el caso del de próstata acuden a consulta "hombres que conocen su enfermedad y tienen una actitud proactiva ante ella", explica Inés López, fisioterapeuta del centro. Aunque afirma que el aumento de participación de los pacientes masculinos en los programas de la Asociación es uno de los retos.

En referencia a la población femenina, ven acudir al centro a mujeres con cáncer de mama "cada vez más jóvenes". En este sentido, Joaquín Mosquera, responsable de la Unidad de Mama del Chuac, afirma que el aumento de casos está también relacionado con los programas de cribado: "La participación es de más del 80%, además tienen una gran adherencia, las mujeres acuden cada dos años a la revisión", explica. Este programa funciona en Galicia desde 1992 y recientemente se ha bajado a los 45 años la edad de para las revisiones.

Cáncer de próstata, el más común en hombres

Es el segundo tumor con mayor incidencia en Galicia y afecta mayoritariamente a la población masculina. "Es raro tener pacientes menores de 55 años, el pico está sobre los 65", cuenta Venancio Chantada, jefe del servicio de Urología del Chuac. A pesar de la alta incidencia, Chantada explica que en este caso, como ocurre con el tumor de mama, cada vez encontramos diagnósticos más precoces, que permiten que la esperanza de curación aumente. "En los últimos 20 años hubo una revolución en el diagnóstico y el tratamiento. Antes, la forma más común de diagnóstico era porque los pacientes tenían síntomas como dolor al orinar, o incluso por dolor en los huesos se diagnosticaba cuando ya estaba en metástasis", explica. En la actualidad, la forma más común de diagnóstico es mediante la prueba del antígeno prostático específico (PSA) en sangre, una substancia que se encuentra en la próstata. Cuando este índice es elevado "algo está pasando, no tiene que ser cáncer, pero hacemos la prueba", explica Chantada.

En estos casos el porcentaje de curación es alto y muchos no necesitan tratamiento oncológico, sino una cirugía. Chantada destaca la importancia de la cirugía robótica, implantada en Galicia mediante equipos como los Da Vinci: "La cirugía tienen que ser curativa y funcional y conservar las estructuras nerviosas del paciente para que no tengan secuelas, como la incontinencia o potencia sexual, que afecten a su calidad de vida".

Venancio Chantada, jefe del área de Urología del Chuac

Venancio Chantada, jefe del área de Urología del Chuac

Una de las particularidades del cáncer de próstata es que es sensible al tratamiento hormonal, "si con un fármaco logramos reducir los niveles de testosterona este se puede frenar, aunque no es una cura, porque con el tiempo el cáncer se acostumbra y puede volver a avanzar", explica el experto.

Cáncer de mama, alta incidencia y supervivencia

En cáncer de mama es el que presenta una mayor incidencia en la población femenina, aunque también es cierto que gracias a los programas de cribado y a los avances en el tratamiento la supervivencia es del 80%, según explica el jefe de la Unidad de Mama del Chuac Joaquín Mosquera. "Suelen tener un buen pronóstico", afirma. Para el diagnóstico, además de estos programas, también es importante la autoexploración, ya que "la mayor fuente de síntomas es un bulto en la zona del pecho, hay la posibilidad de que sea benigno, pero si aparece hay que revisarlo", cuenta el experto. Este bulto también puede aparecer en zonas como la axila, es menos común pero indicaría que "el tumor está causando una inflamación en los ganglios".

"La mayor fuente de síntomas es un bulto en la zona del pecho, hay la posibilidad de que sea benigno, pero si aparece hay que revisarlo"

Sobre el diagnóstico y tratamiento Mosquera destaca que dentro de lo que conocemos como cáncer de mama hay muchas tipologías, que se tratan de forma diferente. En todos los casos, el tratamiento por parte de "un equipo multidisciplinar" es esencial. Además, en el caso del Chuac, el disponer de una unidad especializada "hace que las pacientes tengan un pronóstico mejor". En esta unidad también ponen a disposición de las pacientes ensayos experimentales con "alta participación". El especialista pone en valor los avances en la cirugía, en los casos en los que hay que eliminar el tumor, ya que en muchos casos la precisión evita "extraer la mama completa".

Desde la Asociación cuentan que no solo es importante el tratamiento oncológico, las pacientes también buscan en el centro terapia psicológica o las recomendaciones de la fisioterapeuta. "Antes se recomendaba el reposo absoluto, en el caso del cáncer de mama recomendaban no mover el brazo, ahora con la guía de un profesional sabemos que es favorable el ejercicio y la vida activa", explica Inés López.

Factores de riesgo y prevención

Aunque no hay un único factor que pueda ser el desencadenante de un tumor, los expertos ponen el foco en varios aspectos de la vida cotidiana sobre los que está probado que sí aumentan el riesgo de cáncer. En primer lugar está el tabaco, muy asociado a tumores en el pulmón o en la garganta, aunque también es un factor de riesgo para el resto de enfermedades. Para la Asociación Española contra el Cáncer "que haya más espacios libres de humo es uno de los retos para este año", ya que por experiencia de las especialistas, siguen detectando muchos pacientes fumadores. El consumo de alcohol tampoco es recomendable y destacan el mantener un estilo de vida saludable, combinando una alimentación sana y equilibrada con el ejercicio físico.

"El aumento de la probabilidad de padecer la enfermedad se eleva en un 15% por antecedentes familiares, en cualquier tipo de tumor"

Los factores genéticos también hay que tenerlos en cuenta. En el caso del cáncer de próstata, cuando desde el Chuac diagnostican el paciente y este tiene descendencia masculina se les hace también la prueba para que el caso de que haya tumor "detectarlo cuanto antes", explica Venancio Chantada. En el caso de tener antecedentes familiares, la prueba de cribado se adelanta a los 45 años. El aumento de la probabilidad de padecer la enfermedad "se eleva en un 15% por antecedentes familiares, en cualquier tipo de tumor", cuenta el profesional. Con pruebas y diagnósticos precoces, el haber padecido un cáncer también aumenta el riesgo de volver a vivirlo, aunque Mosquera indica que en caso del de mama, el 7% de las pacientes vuelven al ser diagnosticadas, un porcentaje que también se justifica por el precoz diagnóstico, ya que a más años de vida, más probabilidad de acabar desarrollando un nuevo tumor.

El cáncer no es una batalla, es una convivencia

Es una palabra con la que convivios en el día a día, ya sea por padecerlo, o por tener a alguien cercano que haya pasado, o pasa, la enfermedad. Expresiones como "la batalla contra el cáncer" o denominar a pacientes del mismo como "héroes" o "luchadores", incluso "ganadores", cuando lo superan, puede no ser la forma más correcta de tratar el cáncer en nuestro día a día. "Estas palabras bélicas hacen que el paciente perciba que tiene una responsabilidad añadida con su enfermedad y tiene que luchar contra algo que no controla, lo que provoca sensación de agobio o culpabilidad", explica Rosa Trillo. "Esta idea les agobia y ellos no lo ven como una lucha, lo ven como aprender a convivir con una enfermedad que va a ser distinta según la fase en la que se encuentren", remarca Inés López.

e De izquierda a derecha, Rosa Trillo, psicóloga y técnica de prevención e Inés López, fisioterapeuta

e De izquierda a derecha, Rosa Trillo, psicóloga y técnica de prevención e Inés López, fisioterapeuta

Hay otros aspectos en la experiencia del paciente que también suelen pasar desapercibidos, y que según cuentan las especialistas son esenciales. En primer lugar está el qué pasa después de que un paciente se cura: "Los que se curan que siguen necesitando atención porque a veces el estado de ánimo baja y no entienden por qué, tienen incertidumbre por volver a la vida cotidiana, algo que socialmente se percibe al revés", explica la psicóloga. Por otra parte, otro de los retos de la Asociación es poder acompañar mejor a los pacientes que pasan la enfermedad solos, "cada vez son más", aseguran. Por último ponen el foco en los cuidados paliativos, para garantizar que estas personas "tienen todas sus necesidades cubiertas".

Número de teléfono de la Asociación Española contra el Cáncer (atención gratuita 24 horas): 900 100 036