Acompañada de su marido, Sabah Muhammed buscaba un médico que la atendiese. Según informa la agencia Anadolu, apenas podía moverse, así que iba en una silla de ruedas que su esposo, Ebu Muhammed Halebi, manejaba por la ciudad de Alepo (Siria). Este matrimonio perdió a sus hijos cuando hubo un bombardeo aéreo perpetrado por el ejército del régimen de Bashar al Assad.
Sabah acababa de perder a sus 7 hijos en un bombardeo, claro ejemplo de la cruenta guerra que vive el país y que ya ha dejado más de 470.000 muertos y 5 millones de refugiados. En Siria ya no hay lugar seguro alguno.
Según relata la CNN turca, la mujer esperó durante toda la mañana la llegada de un médico, pero la situación en el país impidió que pudiera ser atendida. El marido intentó desesperadamente que recibiera la atención sanitaria necesaria, pero Sabah murió finalmente el pásado sábado 3 de diciembre en la silla de ruedas con la que recorrió las calles de Alepo.
Esto ha ocurrido precisamente durante la reocupación del distrito alepino de Tariq al Bab por parte de las fuerzas leales al presidente Bashar al Assad. Este y otros barrios de la ciudad llevaban al menos 4 meses recibiendo bombardeos diarios. La ONU calificó este desastre humanitario de "cementerio gigantesco".