Yuyo, carriño, bes o apotegma. Estas son sólo cuatro de las cien palabras que los más de 19.000 aspirantes a agentes de la Policía Nacional se encontraron en su último examen de ortografía de la oposición. Debían discernir si esos palabros junto a otros como duunvirato, cíngaro o angosto están recogidos en el diccionario de la Real Academia. Una prueba que ha desatado la polémica “por su dificultad”, pero que no es una novedad en los procesos de selección para los cuerpos de fuerzas de seguridad. “Tienen que saber escribir correctamente, que después te encuentras con atestados llenos de faltas de ortografía”, avisan desde una academia.
Aunque su uso no sea muy común, los siete términos mencionados antes existen. Por este motivo, EL ESPAÑOL propone a sus lectores un examen para poner a prueba sus conocimientos en ortografía, gramática y lengua castellana. Aquí se recogen algunos de los exámenes a los que se deben someter los futuros policías, guardias civiles o bomberos. ¿Usted aprobaría?
“Año, tras año, la misma controversia”. Con esta frase resume la Confederación Española de Policía el examen de ortografía en su tercer año de implantación. Este sindicato -el segundo en cuanto a número de afiliados- explica que es una prueba “anacrónica”, que genera grandes “discrepancias” y sobre todo “una mala imagen de la institución y del proceso selectivo”.
No opina lo mismo Nicolás Aparicio, director de la academia Abalar, una de las más prestigiosas de Madrid para la preparación a cuerpos de seguridad. “La prueba es necesaria. Después tienen que redactar denuncias, informes o atestados y no pueden tener faltas de ortografía”, explica a este diario Aparicio, quien está al frente de un centro que cuenta con 30 profesores y más de 400 alumnos.
Todos los que se preparan para la Policía Nacional, la Guardia Civil o Policía Local reciben clases de ortografía por parte de una profesora especializada en ello. “Estudian no sólo puntuación, sino también el significado de las palabras”. En todas estas oposiciones hay un temario específico para este ámbito aunque las pruebas son distintas.
¿Podría usted ser policía nacional?
La oposición para la Policía Nacional consta de tres pruebas. La primera de ellas mide la aptitud física, en la que los aspirantes a agentes deben realizar en el mínimo tiempo posible un recorrido de obstáculos y una carrera de 1.000 metros, además de dominadas los hombres y flexiones las mujeres.
La segunda -la mayor criba- consta de un examen de conocimientos -esta última convocatoria la nota mínima debido a su dificultad ha tenido que ser rebajada hasta el 4,4- y la polémica prueba de ortografía, que este año ha sido eliminada, finalmente, de la evaluación por no cumplir con las bases de la convocatoria.
Algo que ha perjudicado a opositores como Sofía y Luis (nombre ficticio porque no quieren que denunciar la situación pueda perjudicar en la entrevista personal de futuras convocatorias). De Andalucía y Madrid, estos dos aspirantes admiten a EL ESPAÑOL que el examen de ortografía les salió “muy bien”, que les podía haber servido para subir la nota media con la otra prueba de conocimientos. “Esto nos ha jodido, hubiese aprobado”, asegura Sofía.
“El famoso tema 29”. Así se refiere esta andaluza licenciada en Psicología a la parte de ortografía que ha preparado durante un curso entero a razón de dos horas a la semana “realizando ejercicios y ejercicios”. “Personalmente, durante estos meses he aprendido palabras que no tenía ni idea de que existían”, apunta.
¿Y las de Guardia Civil?
En el proceso para incorporarse a la Guardia Civil, la prueba de ortografía es la primera de todas las pruebas, que consiste en la realización de un ejercicio en tan sólo 10 minutos. Después, es necesario pasar un examen de conocimientos -con menos temario que el de la Policía Nacional- y otro de lengua extranjera, que se basa en un cuestionario de 20 preguntas concretas.
Los aspirantes a vestir el uniforme verde también deben pasar una prueba psicotécnica en la que hay test que evalúan las aptitudes intelectuales y test de personalidad. Por último, la prueba física consiste en una carrera de velocidad de 50 metros, otra de resistencia de 1 kilómetro, flexiones en suelo y natación.
¿Y bombero?
Las oposiciones a bombero no son nada homogéneas. Hay tantas como ayuntamientos o comunidades autónomas, ya que dependen directamente de estas administraciones. Aunque hay pruebas comunes -como el temario de conocimientos, las pruebas de personalidad o las físicas-, no en todos los lugares se realizan pruebas de ortografía.
El centro de la última polémica la ocuparon los aspirantes a bomberos en Burgos, donde el 60% de ellos suspendió la oposición por faltas de ortografía. El tribunal planteó una dictado durante el proceso en el que se ofertaban ocho plazas de empleo. ¿Aprobaría usted el dictado?