En Andalucía y Extremadura, la problemática arrojada por la Cabalgata de los Reyes Magos es más pragmática que ideológica. Nada que ver con una drag queen ni con el enfrentamiento entre derechas e izquierdas por arrimar el desfile a su programa. Alrededor de cuarenta municipios han adelantado al jueves 4 por la tarde la llegada de las carrozas de Oriente. Les ha empujado la previsión meteorológica: diluvio y fuertes ráfagas de viento.
A esta decisión no se han sumado las grandes capitales de provincia, pero sí municipios de un grosor considerable como Mérida, Écija, Rota, Chipiona, Dos Hermanas, Mairena del Aljarafe, Los Palacios... Alcalá de Guadaíra fue la primera. El desmarque gustó y se produjo una reacción en cadena.
El amarillo y el rojo de los mapas de los hombres y mujeres de El Tiempo han sembrado la incertidumbre. Otras localidades han anunciado una reunión para dilucidar qué ocurre con sus cabalgatas. Existen Ayuntamientos que se plantean incluso posponerla al día 6. En Aznalcázar, por ejemplo, el adelantamiento ha supuesto la supresión de la simbólica entrega de regalos en la plaza.
"Nunca había visto algo igual"
¿Qué hacemos si los Reyes llegan el 4? ¿Les damos los regalos el 5? ¿Nos vamos a otro pueblo que no haya variado la fecha? ¿Qué pasa con la tradición? Estas son algunas de las preguntas que circulan en los grupos de Whatsapp.
"El problema es gordo para el que tiene hijos de seis o siete años", cuenta Isabel, madre de un niño de tres, residente en El Cuervo, último pueblo de la provincia de Sevilla. "El mío se cree que puedan llegar antes, pero habrá muchos que no. Le hemos dicho que los Reyes tienen un montón de trabajo este año y que repartirán dos días seguidos. Esto me ha trastocado mucho los planes. Todos los años llevo a mi hijo a entregar la carta a los Reyes el 4 por la tarde. Había cambiado el turno de trabajo para cumplir, pero claro, como han adelantado la cabalgata, han puesto lo de las cartas por la mañana. Le ha llevado mi hermana, pero muchos niños no han podido ir porque sus padres están trabajando", critica.
Isabel cree recordar que "alguna vez" se ha atrasado la cabalgata, pero nunca había visto que se adelantara.
"¿Qué hago? ¿Enclaustro a mi hija?"
Con una niña de cinco años, Israel lo va a tener más difícil. "Nosotros solemos desayunar el 6 en casa con los regalos. No quiero que le rompan el relato con una cabalgata el 4 y una posible entrega el 5". También de El Cuervo, al lado de Jerez, se trasladará a esta ciudad, donde el evento se mantendrá en su fecha original. Israel cuenta que otros padres, dado el adelantamiento en la venida de los Reyes, entregarán los regalos a sus hijos un día antes. "Vamos a tener que enclaustrarla para que no hable el 5 con los amigos del colegio, no habrá más remedio que resguardarla un poquito", bromea.
Algunos de los detractores de este baile de fechas se quejan en redes sociales de que este cambio sólo beneficia a los organizadores, que han decidido así en busca de su comodidad. El cómico Ismael Lemais bromea con este vídeo: "¿Y si ponemos la Semana Santa en agosto?"
Tomás es vecino de Dos Hermanas, uno de los municipios más poblados donde se ha llevado a cabo esta medida. Explica que la cabalgata del 4 de enero ha generado un fuerte debate social entre partidarios y oponentes. Aunque, en última instancia, resume que se trata de un asunto práctico: "Muchos padres se habían cogido libre la tarde del 5 de enero y esto les ha hecho un agujero". Reconoce cierta "sensación de surrealismo": "Todo se lía, yo que había dejado las compras para última hora...". Cuenta que aquellos a los que no les importa apuestan por "una mentirijilla piadosa" para salir del paso. Enfrente, "los fieles a la tradición, que aquí son muchos".