Pretendían huir del país. Dos de los raperos acusados de haber violado a una menor de edad el viernes en la sala Razzmatazz (Barcelona) han sido detenidos por los Mossos d'Esquadra en el Aeropuerto de El Prat, justo cuando iban a embarcar rumbo a Estados Unidos.
Ninguno de los dos se presentó al requerimiento que les hizo la policía catalana para que fuesen a declarar voluntariamente. Los dos músicos, ambos mayores de edad y miembros de la banda del rapero adolescente Smooky Margielaa, están acusados de haber violado a una barcelonesa de 17 años el viernes de madrugada. La chica los denunció porque presuntamente la forzaron a mantener relaciones sexuales con ellos sin su consentimiento. Los hechos sucedieron en el camerino de la Sala Razzmatazz que ocupaba la banda tras dar un concierto.
Renovaron pasaportes en el Consulado
Los ahora detenidos tenían los pasaportes retirados por las autoridades catalanas. Este fue uno de los motivos por los que la banda tuvo que cancelar el concierto que iban a dar la noche del lunes en Copenhague (Dinamarca) y que iba a suponer el último de la gira internacional. Con la maniobra de la retirada de los pasaportes, los investigadores pensaban que se aseguraban la permanencia de los acusados en España mientras durasen las pesquisas. Pero ellos tenían otros planes.
Los dos raperos acudieron al Consulado de Estados Unidos en Barcelona para que les expedieran sendos pasaportes nuevos. Con esta documentación renovada, se dirigieron al aeropuerto barcelonés y se disponían a tomar un avión con dirección a Nueva York. Los Mossos d'Esquadra, enterados de la situación, procedieron a la detención de ambos.
Incoherencias en la declaración
No obstante, la detención de estos dos músicos neoyorkinos no responde a un avance en la investigación que les vincule con una presunta violación. De hecho, a lo largo del lunes se publicaron informaciones que arroja más incógnitas sobre la versión aportada por la denunciante. La primera procede de los mismos Mossos d'Esquadra, que optaron por no practicar ninguna detención cuando vieron las grabaciones de las cámaras de seguridad de la discoteca. Al visionarlas se percataron de que lo que aparecía en las imágenes no tenía mucho que ver con la versión que les había dado la joven en su declaración. La policía se limitó a practicar las identificaciones correspondientes y dejarlos en libertad.
La segunda información procede del programa de Antena 3 Espejo Público, que sostiene que la joven presuntamente agredida ya habría interpuesto con anterioridad otras cinco denuncias falsas por violación contra otros hombres. En tercer lugar, fuentes próximas a la investigación han asegurado que las explicaciones que ofrece la joven carecen de coherencia, y que además ella ha modificado su declaración con respecto a la primera versión que le dio a la policía. En esta última ya reconoce que entró voluntariamente al camerino y que mantuvo relaciones sexuales consentidas con el primero de los músicos, pero sigue sosteniendo que luego entraron tres miembros de la banda y la penetraron sin su consentimiento.
Acusados de obstrucción a la justicia
Los detenidos, por su parte, además de la acusación de violación a una menor de edad, se enfrentan a otra por obstrucción a la justicia. Y es que a pesar de que no estaban detenidos, las autoridades catalanas les pidieron que no abandonasen el país porque se encontraban bajo investigación. Por eso les retiraron los pasaportes. Pero ellos hicieron caso omiso e intentaron largarse. El Juzgado de Instrucción Número 22 de Barcelona sigue recabando información para intentar esclarecer este asunto.