Marcados por "lesiones recientes", tres hermanos menores de edad han denunciado en su colegio de Puertollano (Ciudad Real) que sus padres les someten a castigos violentos. El matrimonio, de origen asiático, ha sido detenido por la Policía Nacional y se le acusa de maltrato físico continuado.
La detención ha sido posible tras las investigaciones iniciadas por el delegado de Participación Ciudadana de la Comisaría de Puertollano en sus contactos con los profesores de los centros educativos dentro del Plan director para la convivencia y mejora de la seguridad en centros educativos y sus entornos, según ha informado hoy la Policía Nacional.
Para salvaguardar la integridad de los menores, el delegado de Participación Ciudadana y miembros de la Unidad de Familia y Mujer de la Comisaría de Puertollano acudieron "de urgencia" al centro educativo y se entrevistaron con los menores, que "espontáneamente" contaron a los agentes que sufren castigos muy severos y agresiones por parte de sus padres.
Además, la información de los escolares fue corroborada tras comprobar las "numerosas marcas de agresiones recientes" en diversas partes del cuerpo del mayor de los tres niños, en vista de lo cual los agentes solicitaron la presencia del médico de guardia para su valoración.
Los menores fueron examinados por profesionales sanitarios que comprobaron la existencia de lesiones, algunas de ellas recientes.
Los hijos al centro de acogida y los padres detenidos
Los hechos se pusieron en conocimiento del fiscal de menores, que ordenó contactar con el servicio de familia y menores de la Dirección de Bienestar Social de Ciudad Real para que se hiciera cargo de los niños, que han sido trasladados de forma cautelar a un centro de primera acogida tras detener a los padres por un delito de malos tratos continuados en el ámbito familiar.
Por su parte, fuentes de la Consejería de Bienestar Social han señalado a Efe que la familia es de origen chino y que los menores llegaron al centro de primera acogida a finales del pasado mes de mayo.
Los niños tienen "todas las medidas de protección" por parte de la Administración regional y están "perfectamente atendidos", tanto en sus necesidades primarias como con apoyo psicológico y emocional.
Asimismo, hay abierto un procedimiento judicial y la Junta está elaborando un plan particular para precisar las medidas que se van a adoptar en este caso