La Policía Nacional ha desvelado hoy que sus agentes impidieron que un menor residente en Cataluña se suicidara ante el acoso al que le estaban sometiendo desde Guatemala dos individuos que le obligaban a enviarles material pornográfico por Internet con imágenes cada vez más explícitas.
La colaboración entre el Homeland Security Investigation (HSI) de Estados Unidos, la Policía de Guatemala y la española evitó que el joven consumara su intención de quitarse la vida ante la presión que sufría por parte de los acosadores, los cuales han podido ser detenidos en su país, desde el que actuaban utilizando la red.
Los investigadores consideran que estas personas "ciberacosaban" a decenas de jóvenes de todo el mundo, contactando con los muchachos desde Guatemala, ganándose su confianza para pedirles material pornográfico de sí mismos.
"Con el paso del tiempo, los jóvenes debían enviar imágenes más explícitas provocando un estado de ansiedad y una presión que llevó a uno de ellos a manifestar su intención de quitarse la vida", explica la Policía.
Un año de investigación
Los hechos datan de septiembre del año pasado, cuando el HSI de Estados Unidos detectó una comunicación entre un peligroso acosador sexual y una víctima que expresaba su intención de suicidarse ante la presión que estaba sufriendo.
Sus agentes comprobaron que el acosador actuaba desde Guatemala y comunicó lo ocurrido a las autoridades del país, que a su vez alertaron a la Policía española ante la sospecha de que la víctima era un joven residente en España al que era preciso localizar.
Finalmente pudo ser identificado en una población catalana no especificada y se impidió así que se quitara la vida; su madre declaró a los policías que había notado un comportamiento anormal en su hijo, aunque desconocía la gravedad de su problema.
Entre tanto, las fuerzas de seguridad de Guatemala lograron entrar en el domicilio del presunto acosador sexual y comprobaron que en realidad se trataba de dos personas que lograron huir. Al registrar su vivienda hallaron pruebas sobre la existencia de decenas de víctimas en varios países.
El caso se ha resuelto definitivamente meses después, cuando los acosadores volvieron a contactar con el joven español, lo que puso en alerta a la Policía Nacional, que a su vez avisó a sus colegas de Guatemala para que detuvieran a los dos individuos, que ya están en prisión.