Los vehículos diésel son los nuevos criminales del asfalto. Los conductores -acechados con los nuevos planes del Gobierno que criminalizan este tipo de vehículos por su alta contaminación- comienzan a buscar alternativas con las que desplazarse y -casi- todas empiezan por deshacerse del vehículo diésel. Una tendencia que está haciendo que el mercado de segunda mano de los diésel esté por los suelos: coches que salieron al mercado por 11.430 euros ahora se pueden adquirir por 800 euros en las páginas de segunda mano. Pero, ¿cómo se pueden compensar estas pérdidas?
En Alemania, como en Francia, Reino Unido, Holanda o Bélgica, saben que es necesario incentivar a la población para eliminar poco a poco los autos diésel y sustituirlos por híbridos o eléctricos. Por eso, el gobierno de Ángela Merkel ha tomado una serie de medidas que van desde subvenciones hasta exenciones de impuestos. Las acciones tomadas por el Estado alemán implican a las grandes compañías de automóviles como BMW y Volkswagen.
Deshacerse del coche viejo diésel en Alemania es una ganga en la que contribuye el gobierno. Ya desde 2016 era posible hacerse con el “bono ambiental”, gracias al acuerdo entre el Estado, que aportó 600 millones de euros, y las empresas del automóvil, que pagaron una cifra igual para iniciar el programa. Con el “bono ambiental”, la gente puede adquirir automóviles nuevos con la condición de que sean totalmente eléctricos o híbridos y no superen los 60.000 euros.
Ahora los alemanes pueden beneficiarse de estos bonos que van desde 3.000 euros para vehículos híbridos enchufables, hasta 4.000 para los coches completamente eléctricos. También tienen la posibilidad de cambiar sus automóviles con un descuento favorable para modelos que cumplan con las emisiones permitidas de diésel o devolver sus vehículos para actualizar los respectivos hardware y reducir así dichas emisiones.
BMW anunció que, a partir de este mes, cualquier persona que compre nuevos automóviles obtendrá la “bonificación ambiental” de 6.000 euros. Para vehículos seminuevos o de demostración, 4.500 euros.
Volkswagen, por su parte, ofrecerá intercambios de diésel en 14 ciudades alemanas con alto grado de contaminación. “Cualquiera que decida comprar un Volkswagen con alternativas ecológicas de gas natural, híbrido o eléctrico, recibirá entre 1.000 y 2.380 euros. El gigante automovilístico también dijo que los automóviles de clase “Euro 5”, recibirán un impulso de intercambio de 5.000 euros, los más antiguos recibirían 4.000.
Por su parte, Renault, el único fabricante no alemán que se ha posicionado ofrecerá a los propietarios de antiguos coches diesel en el país un incentivo de 10.000 euros para que los cambien por nuevos modelos.
Sin duda, la medida más sorprendente es la de la exención de 10 años de impuestos de propiedad para vehículos eléctricos registrados entre 2011 y 2020.
Las ayudas en España
El drama de los vehículos diésel en España ha venido de la mano de Teresa Ribera, ministra para la Transición Ecológica y Manuela Carmena, alcaldesa de Madrid. La primera, afirmando que este combustible “tiene los días contados”; la segunda, diciendo que no dejaría que los coches a gasoil transitaran por la capital. Pero, ¿quién ayuda a la población para modernizarse? Pablo Iglesias lo intentó, proponiendo un programa con un presupuesto de 200 millones de euros pero fue rechazado por el Senado.
A nivel nacional sólo existe una subvención, y que todavía no entra en vigor: el plan VEA (Vehículos Eléctricos y Alternativos). Este es el incentivo para que los ciudadanos adquieran coches eléctricos o híbridos enchufables. La dotación de este plan, cuya salida se esperaba para el verano, ha sido de 16'6 millones de euros. 584 millones menos que en Alemania. Y es que VEA no es el primer intento del Gobierno español por reducir las emisiones de CO2 y PM de los vehículos. En 2017, salía el plan Movalt con un presupuesto de 20 millones de euros. Las ayudas de dicho plan se agotaron en 24 horas.
Emite cero es la iniciativa de la Comunidad de Madrid para “ayudar al ciudadano para que pueda cambiar de coche, y cambiar a un coche nuevo con muy bajas o nulas emisiones”, dice Carlos Izquierdo, consejero de Medio Ambiente y Ordenación de Territorio. Emite Cero es parte del programa Ecolab de la Comunidad de Madrid y que destinará ayudas directas para la compra de vehículos, motocicletas y bicicletas eléctricas. La Comunidad también destinará 1.5 millones de euros para la instalación de puntos de carga para vehículos eléctricos en edificios públicos y privados. El presupuesto para las ayudas de adquisición de nuevos coches será de 2 millones de euros.
El gobierno del País Vasco, a través del Plan Integral de Movilidad Eléctrica (PIME), pretende la electrificación del transporte público, la creación de una red de puntos de recarga y ayudas para la adquisición de coches eléctricos. El presupuesto con el que cuenta el PIME es de 494 millones de euros.
En Castilla y León, deducirán un 15% sobre la compra de coches eléctricos con un valor de 4.000 euros. Por su parte, en El Hierro, Canarias, dotarán de ayudas de hasta 7.000 euros para la compra de coches eléctricos.