El bebé vino al mundo con una deficiencia respiratoria. Tenía apenas 48 días de vida cuando sucedieron los hechos. Nada se pudo hacer en el Hospital Materno Infantil Virgen de las Nieves (Granada) por el recién nacido, el hijo de Adrián Heredia, 18 años de edad, el joven al que en su pueblo, Iznalloz, le llaman 'El Gatico'. A las once y media de la mañana de este martes, toda la familia esperaba en la quinta planta, en el área de Neonatología. Aguardaban impacientes por novedades sobre el estado del pequeño, el retoño de Adrián, un miembro más de la familia. Pocos minutos después, al conocer la verdad, iban a entrar en convulsión. El padre montó en cólera. El pato lo pagaron todos los que se les pusieron por delante.
El nuevo miembro de la familia Heredia nació prematuro, y por este motivo fue alumbrado con ciertas deficiencias que hicieron que todo desembocara en su fallecimiento. El equipo sanitario y los pediatras, según informan fuentes sanitarias del centro a EL ESPAÑOL, se volcaron por completo en salvar la vida del pequeño. Durante varias horas trataron de mantenerle con vida, pero no fue posible. La tragedia continuó justo después.
Tras confirmar el fallecimiento del pequeño, los sanitarios se dirigen a la sala de espera. Allí está toda la familia Heredia en pleno. En ese momento, Adrián 'El Gatico' entró en erupción. El primero en recibir fue el pediatra, que vio cómo le caía encima una bofetada que casi lo tumba. En pocos minutos, varios miembros de la familia forman allí un grave escándalo.
Rompen varias puertas, profieren amenazas verbales, no dejan de gritar, de empujar y de echar la culpa a los sanitarios del centro. Si el crío ha muerto, es por su culpa, y tienen que pagarlo. Por eso descargan su ira. A una enfermera la tumban de un portazo en la cabeza. Minutos después, a esta mujer se le aplican varios puntos de sutura en la ceja. Del impacto, le habían abierto una brecha en la cabeza.
A las novedades y los esfuerzos de los dos pediatras y de las enfermeras, Adrián y los Heredia respondieron con violencia. En uno de esos momentos de tensión, alguien de ellos dijo: "Vamos a ir a por escopetas. Vamos a matar a todos los de la bata blanca".
Pulsar el botón antipánico
Todos estos hechos han sido confirmados a EL ESPAÑOL por fuentes sanitarias del Hospital y por fuentes policiales del caso. A la familia no le importó que uno de los pediatras fuese un tipo corpulento, o que les superaban en número en aquel momento. Los puñetazos llovieron de forma incesante sobre todos ellos, chivo expiatorio de la ira del 'Gatico' y su familia.
Los insultos y las amenazas de 'El Gatico' comenzaron el día anterior al fallecimiento del bebé. El pequeño había llegado noches atrás procedente de la ciudad de Albacete. Toda la familia, de etnia gitana, abandonó el pueblo del que son oriundos, Iznalloz, para estar junto a Adrián y su esposa en su hora más complicada. Cuentan desde el hospital que la noche del lunes comenzó a empeorar. Adrián, al conocer que su hijo no experimentaba mejoría, se abalanzó sobre los sanitarios profiriendo toda clase de maldiciones y de insultos.
El día de los hechos, en cuanto comenzó la pelea, los pediatras y la enfermera decidieron pulsar el botón antipánico. De ese modo, se movilizaron los únicos dos vigilantes jurados del centro.Cuando llegaron a la unidad de Neonatología, cubrieronn dos de las tres puertas de entrada a la planta. Los familiares se colaron por la otra.
Minutos después, desde el hospital avisaron a los agentes de la Policía Nacional y de la Policía Local. Con su llegada se calmaron los ánimos y se evitaron desgracias mayores. No fue necesario reducir a nadie, pero los agentes tomaron los datos de Adrián. No se lo llevaron detenido. Para evitar una desgracia mayor, los agentes optaron simplemente por identificarle y tomarle los datos.
Con el paso de las horas se fueron acercando al lugar más y más familiares de los Heredia. Dado el elevado número de miembros del clan que allí se presentaron, la Policía tuvo que solicitar más efectivos y quedarse hasta las ocho de la tarde aguantando el cordón de seguridad hasta que todos se marcharon.
"Esa unidad está repleta de niños recién nacidos y de madres, así que imagínate. La situación fue muy tensa y muy desagradable". Se lo dice a EL ESPAÑOL Fayna Gómez, Presidenta de la Junta de personal del Hospital universitario Virgen de las Nieves. Los tres facultativos agredidos disponen de un parte de lesiones en el que están acreditados los ataques perpetrados por la familia de 'El Gatico' tras el fallecimiento del pequeño. Los tres interpondrán una denuncia.
7 agresiones en un mismo mes en el hospital
No es la primera vez que algo así ocurre en este Hospital. Según la propia presidenta de la Junta de Personal, en el último mes y medio se han registrado hasta 7 agresiones en el centro: "La primera, a una psiquiatra; otra, a un celador en el área de urgencias; la tercera, a una enfermera en la planta de Traumatología; otra más de un paciente de diálisis a un enfermero que le estaba preparando...".
Los facultativos del centro reclaman mayor protección y más medios humanos. "Esto ya es más común de lo que debería. Hacia los sanitarios se ha perdido el respeto. Estamos desprotegidos". Para reclamar sus derechos, este jueves, a las diez de la mañana, hay convocada una manifestación en la puerta del hospital en condena de la agresión y para reclamar medios que eviten que estas situaciones se vuelvan a producir.
Con los ánimos ya calmados, la familia de Adrián Heredia ha vuelto a casa. La de su mujer, a Guadahortuna. La suya, a la pequeña y bella Iznalloz. Dicen desde el hospital que al cuerpo del pequeño le practicaron dos autopsias, y que después lo entregaron a la familia para que puedan rendirle sus respetos. Ya con la ira fuera del cuerpo, lo enterraron la tarde de este miércoles en el cementerio de esta localidad.