Varias asociaciones españolas, arropadas por la Red Europea de Prevención del Tabaquismo, presentaron esta semana en el Parlamento Europeo la llamada "Declaración de Madrid", que propone medidas para limitar el consumo activo y pasivo de cigarrillos en España, donde el tabaco causa 50.000 muertes anuales.
"Estamos aquí porque el principal problema de salud pública para España y para Europa es eltabaco", señaló el presidente de la Organización Médica Colegial (OMC) española, Serafín Romero, en una presentación organizada en las dependencias de la Eurocámara y auspiciada por la eurodiputada de UPyD Maite Pagazaurtundua.
La citada declaración, presentada en Madrid el pasado julio y cuyos autores quieren que se aplique en España y sirva de modelo en otros países de la Unión Europea, pone de relieve los éxitos conseguidos en la lucha contra el tabaco, con una caída de la tasa de fumadores del 32 % antes de la ley anti-tabaco de 2010 al 22,1 % de la actualidad, según datos de la misma.
Pero avisa del peligro de que se estanquen los esfuerzos para erradicar la adicción a la nicotina y sus riesgos asociados, especialmente en los hogares más desfavorecidos.
"Nos están adelantando", comentó en el acto el presidente de la Red Europea de Prevención del Tabaquismo, Francisco Rodriguez-Lozano.
España fue pionera, pero no ambiciosa
Apuntó que la ley española de 2010 fue pionera pero que actualmente hay países de la UE como Francia, el Reino Unido, Bélgica, Eslovenia o Rumanía que han aprobado medidas más ambiciosas, como obligar a que los paquetes de cigarrillos sean "neutros" y no muestren la marca.
Y entre las iniciativas complementarias que propone esa "hoja de ruta" para contener el tabaquismo destaca la atención a los nuevos productos como cigarrillos electrónicos o vaporizadores, un fenómeno al alza que quieren evitar que se "normalice".
Los jóvenes "no tienen en la retina las discotecas llenas de humo", pero esos dispositivos que venden las tabaqueras para sustituir la caída de las ventas de cigarrillos tradicionales están "inundando las aulas" en Estados Unidos, alertó la presidenta del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo, Regina Dalmau.
"Tenemos que regularlo antes de que sea un problema nuevo", agregó la cardióloga en un debate que contó con representantes de la sociedad civil, asociaciones médicas, el Ministerio de Sanidad, la Representación Española ante la UE, europarlamentarios y diputados nacionales españoles.
Igualar los precios con Francia
En ese sentido, piden que se equipare al alza la fiscalidad de todos los productos que contengan nicotina, al tiempo que apuntan que un incremento significativo del precio de los cigarrillos favorece que se reduzca su consumo.
El profesor de Farmacología de la Universidad de Cantabria Javier Ayesta explicó que la subida debería ser de "un 20 % mínimo" para que se notara su efecto, y citó como ejemplo a Francia, donde hay un millón menos de fumadores desde que la cajetilla se vende con paquete estándar y a un precio de 8 euros mientras que en España no alcanza los 5 euros.
Otras medidas que promueve la Declaración de Madrid pasan por exigir el cumplimiento de la legislación vigente relativa a espacios públicos cerrados o semi-cerrados, prohibir fumar en cualquier tipo de vehículos, promover hogares libres de humo, facilitar y financiar el acceso a profesionales y tratamientos sanitarios y ampliar la normativa sobretabacoy publicidad a los nuevos productos.
"Es el primer problema de salud pública en España por mortalidad", declaró la subdirectora general de Promoción de la Salud del Ministerio de Sanidad, Araceli Arce.