Beatriz y Jesús tenían todo preparado para casarse. Estaban decididos a poner el broche perfecto a su relación el pasado sábado 24 de agosto, pero el miércoles sus planes de futuro se truncaron. Su hija Lucía, de tan solo 21 meses, era atropellada -accidentalmente- por su abuelo en el patio de su casa de Ledaña (Cuenca). La bebé ingresó en el Hospital General de Albacete en estado grave y esta madrugada ha muerto debido a las importantes heridas que le produjo el automóvil. La pareja se encontraba ultimando los detalles del enlace y habían dejado a la pequeña al cuidado de sus abuelos. La mujer, de 69 años, que también fue atropellada, se encuentra estable.
La alcaldesa del municipio conquense, Clara Plaza, ha afirmado que se trata de una verdadera “tragedia” y afirma que “no se puede hacer nada, solo ayudar a la familia, apoyarla y darles todo el cariño del mundo". La regidora ha mantenido contacto, en todo momento, con los padres de Lucía, que se encuentran desolados. En el pequeño pueblo, se han decretado dos días de luto y las banderas ondean a media asta. "Bea y Jesús son muy buenas personas, no se lo merecían", cuenta una vecina a EL ESPAÑOL.
La pareja se iba a casar el pasado sábado
Beatriz y Jesús llevaban seis años de noviazgo cuando decidieron dar un paso más en su relación: querían pasar por el altar. Pero, antes de ello, llegó a sus vidas Lucía -concretamente hace 21 meses-. Su única hija. Era una niña muy deseada por toda la familia y especialmente por la pareja, que se imaginaba día y noche cómo sería su hija y así lo mostraban en redes sociales. Ambos se habían empleado en el campo y habían alcanzado la estabilidad necesaria para formar una familia.
Ya tenían todo planeado: celebrarían su boda, el día 24 de este mes, en el pueblo de ella, Motilla del Palancar. En la iglesia, querían reunir a toda su familia, a la que están muy unidos. La pareja estaba segura que iba a ser un día especial, lleno de emociones y sentimientos. Pero esa ilusión se truncó a tan solo tres días del enlace.
El coche se desplazó y arrolló a Lucía y a su abuela
El pasado miércoles la tragedia y la desolación sacudió a este pequeño pueblo de Cuenca. Ledaña cuenta con menos de 1.600 habitantes y en una de sus empedradas calles, más concretamente en Pozo Alfaro, los abuelos de Lucía se preparaban -junto a la pequeña- para salir de casa. Los tres se dirigieron al patio exterior con el que cuenta su vivienda y el hombre arrancó el coche. Beatriz y Jesús se encontraban ultimando los preparativos de su cercana boda. El automóvil lo habían adquirido hacía unos días de segunda mano. Todavía lo estaban probando.
En un momento dado y por cuestiones que todavía se están investigando, el coche se desplazó unos metros. Justo detrás del aparato se encontraba Lucía, a quien su abuela llevaba en brazos. Ambas fueron arrolladas. La hipótesis que se baraja es que el coche estuviera aparcado con una marcha y al encenderlo, este se moviera hacia atrás.
Inmediatamente, los Servicios de Emergencias acudieron al lugar de los hechos y trasladaron a las dos al Hospital General de Albacete. Lucía estaba muy grave. La mujer, en cambio, había sufrido varios traumatismos, pero se encontraba estable -dentro de la gravedad-. La alcaldesa del municipio, Clara Plaza, estaba segura que quedaba algo de “esperanza”, a pesar de la importancia de las heridas. Además, afirmaba que había sido un verdadero “trauma”, y que todo el pueblo se encuentra “consternado” y solo deseaban mostrarles su apoyo a la familia.
Pero esa esperanza se desvaneció con el paso de los días. Y este domingo, de madrugada, llegaban las peores de las noticias: Lucía no conseguía recuperarse de las importantes heridas y fallecía en el Hospital General de Albacete. La alcaldesa, Clara Plaza, ha informado que en las próximas horas será trasladada a la localidad y que está previsto que el funeral sea este martes por la mañana. Además, ha indicado que el ayuntamiento ha decretado tres días de luto oficial por la muerte de la pequeña, pues "no se puede hacer nada, solo ayudar a la familia, apoyarla y darles todo el cariño del mundo". "Es una pena", ha asegurado la regidora, que ha señalado que ha hablado con la madre todos los días desde que el miércoles por la tarde se produjo el atropello y que la familia está destrozada.