Juan Carlos Quer, padre de la joven asesinada en Galicia Diana Quer, ha ampliado la denuncia que interpuso a principios de octubre contra su exmujer y la acusa de simulación de delito, porque se lo debe a sus hijas y "a las mujeres realmente maltratadas, las verdaderas víctimas". Quer ha confirmado a Efe que recientemente ha ampliado ante la Guardia Civil la denuncia que interpuso el pasado 8 de septiembre contra su exmujer, Diana López-Pinel, por amenazas, injurias e intento de agresión.
Ahora la denuncia también por simulación de delito, al entender que simuló los hechos por los que denunció el pasado 8 de octubre y asegura que se lo debe a sus hijas "por tanto sufrimiento innecesario" y "a las mujeres realmente maltratadas, las verdaderas víctimas, cuya protección se perjudica con cada denuncia falsa", según ha publicado en Twitter. Juan Carlos Quer ha evitado hacer más declaraciones ya que considera que se trata de un asunto familiar.
El pasado 9 de octubre, el padre de Diana Quer quedó en libertad sin medidas cautelares tras declarar ante un juzgado de Majadahonda (Madrid) por la denuncia interpuesta por su exmujer, que lo acusó de lesiones e intento de atropello. El día anterior, a veinte días del juicio en el que se juzgará al presunto asesino de su hija, Diana López-Pinel le denunció a él por lesiones e intento de atropello, y él a ella. Ambos protagonizaron un altercado ante los juzgados de Majadahonda, que no era el primero.
La guerra de los Quer
Los cimientos de la familia Quer comenzaron a tambalearse con la desaparición de Diana, hace casi tres años. Un duro varapalo que hizo que la vida privada de los Quer fue sabido por todos. Tres meses después de que no se supiera nada de Diana, a la madre se le atribuyó "un presunto delito de malos tratos en el ámbito doméstico". En el auto se entiende que tanto Valeria como Diana fueron abandonadas por parte de su madre, debido a sus problemas. El padre de Diana apuntó a Espejo Público que la decisión de la juez había llegado "demasiado tarde" y afirmó que sus hijas "le habían llamado en señal de socorro".
El 11 de mayo del 2016, Diana López-Pinel acudió a la comisaría de policía de Pozuelo de Alarcón para denunciar que su exmarido se había llevado a su hija mayor sin que le tocara -debido al régimen de visitas- y le prohibió comunicarse con ella. Cinco días después, Diana acudió a completar y ampliar la denuncia.