La Policía busca a la abuela de la niña de cinco años encontrada sin vida en un hotel de Logroño. Los agentes se han fijado como objetivo primordial dar con el paradero de la mujer, que se habría registrado, también, junto a su nieta y su hija en el Hotel Los Bracos. Hasta allí llegaron el pasado domingo y se alojaron en la habitación 404.
Esta mañana, a primera hora, la Policía ha recibido la llamada de un vecino que afirmaba que había observado a una mujer en un alfeizar de la ventana. Al parecer, quería lanzarse al vacío.
Pero cuando los agentes han llegado a la habitación, se han encontrado con la mujer -de unos 35 años- que presentaba varias heridas en los brazos. Su hija se encontraba fallecida sobre la cama y tapada con una manta. Fue el domingo cuando el padre de la pequeño presentó una denuncia por su desaparición; ambos estaban separados y ayer tenía que volver con él a su casa de Haro (La Rioja).
Poco se sabe de lo que ocurrió durante la noche del domingo al lunes. Por ello, la Policía busca sin descanso a la abuela, que pudo ser testigo directo de los hechos. Hasta ahora, se encuentra en paradero desconocido.
Como informa La Rioja, la madre ha sido trasladada al hospital y todavía no ha sido detenida. Al parecer, dejó varias cartas que la incriminan en los hechos. Por ahora, no se descarta ninguna causa, ni muerte natural ni violenta. Aunque todas las circunstancias parecen indicar esto último.
Los padres de la menor estaban separados desde hacia tiempo. Ella era canaria, pero llevaba tiempo viviendo en la localidad de Haro. Él era profesor y trabajaba en el colegio San Asensio, también en la misma localidad. Había rehecho su vida y vivía junto a su nueva pareja y su hija fallecida.
Tras llevarse a la madre, los agentes de la Policía científica y el Jefe superior de la Policía se han quedado en el interior del hotel, en la habitación, analizando qué ha podido suceder durante la madrugada. Posteriormente, el coche fúnebre entró en el parking del hotel y se llevó el cadáver de la niña.