Cuando Félix Alonso (Barcelona, 1959) era diputado de Podemos, defendió cambiar el día del Pilar (12 de octubre) como fiesta nacional española, por el 23 de abril (San Jorge/Jordi), que es el mismo que el de Cataluña. También propuso eliminar ese día los desfiles militares y demostraciones castrenses, porque suponían un gasto superfluo para el Ministerio de Defensa. Ahora, Félix Alonso es uno de los nombres que va a ser investigado por la Oficina Anticorrupción, por los sobresueldos de 1.800 euros al mes que percibe como Director de Consumo en Baleares. Casi el doble que el salario mínimo interprofesional (950 euros), solamente en extras.
Alonso forma parte de ese contingente de extraños fichajes peninsulares que hizo Podemos cuando llegó al poder en Baleares y que ahora van a ser investigados. Para cubrir puestos en el archipiélago, la formación morada recurrió a exdiputados del partido de la península que se habían quedado sin escaño tras el batacazo electoral. Figuras procedentes de Asturias, Palencia, Bilbao o Cataluña, para desempeñar puestos de responsabilidad en el gobierno mallorquín. Una especie de puerta giratoria para colocar a gente de Podemos que se quedó sin trabajo.
Así llegó el catalán Félix Alonso a Mallorca, colocado por su partido para desempeñar una labor que, hasta la fecha, le había sido ajena: Director de Consumo. Un puesto en el que no puede acreditarse como experto en la materia. Félix Alonso es periodista deportivo y cuenta con una dilatada carrera en el diario catalán Sport. En este sector desarrolló su carrera laboral y su actividad sindicalista, ya que formó parte del Sindicat de Periodistes de Catalunya entre 1993 y 2001. También relacionado con los medios de comunicación, formó parte del consejo asesor de la Corporació Catalana de Radio i Televisió con Pasqual Maragall.
Empezó siendo activista vecinal: de la Asociación de Vecinos del Baix Guniardó pasó a ser el portavoz de la coordinadora de parados de su distrito. En la década de los 80, Alonso era militante del Partido Comunista de Cataluña. Años más tarde, siendo alcalde de Altafulla, metió a su pueblo en la Asociació de Municipis per la Independència. Siempre ha estado vinculado con entidades y asociaciones, con estamentos de poder de algún modo, tanto en el ámbito vecinal, como en el político, como en el sindical. De una asociación de vecinos, a la Generalitat. De un sindicato de periodistas, a alto cargo en Baleares, una comunidad que ni siquiera es la suya.
1.800 al mes sin justificar
En Baleares, los que vienen de fuera de Mallorca cobran un plus para minimizar los gasto de desplazamientos y estancias en las islas. Unidas Podemos tiene a 8 altos cargos así. Todos ellos perciben sobresueldo. 22.000 euros al años. 1.800 euros por tener que desplazarse hasta Mallorca, teniendo su residencia en la península o fuera de la isla (casos de residentes en Menorca o Ibiza). No tienen que justificar su desembolso. No tienen que presentar facturas ni recibos. El receptor se gasta los 22.000 euros como le da la gana, en vuelos, barco, alquiler u hoteles.
Y es aquí donde puede estar el presunto fraude que van a investigar desde Anticorrupción. El Diario de Mallorca adelantó en diciembre la noticia: algunos de los beneficiarios de dichos sobresueldos podrían estar incurriendo en ilegalidad, porque a pesar de estar empadronados en la península, había indicios de que estaban en realidad residiendo en Mallorca con familiares o amigos.
¿Es legal ese plus? Lo es, pero es explícito. La Ley de Presupuestos del Govern prevé que los altos cargos que en el momento de su nombramiento “residan en las islas de Menorca, Ibiza o Formentera o fuera de las Illes Balears, y mientras mantengan esa residencia, tienen derecho a percibir una indemnización por el coste de su residencia temporal en la isla de Mallorca. La cuantía de dicha indemnización es de 22.000 euros, repartidos en doce mensualidades". Este sobresueldo está vigente 2011, pero ha sido en esta legislatura cuando ha saltado la liebre por el elevado número de cargos de un mismo partido recibiendo este dinero: al menos 8 altos cargos de Unidas Podemos estaba percibiendo dicho plus. Legal es, pero.... ¿Es ético cobrar el doble del salario mínimo interprofesional por un plus de algo que ni se está gastando?.
A algunos de los perceptores, les parece no sólo ético, sino escaso. Es el caso de la consellera de Agricultura y líder de Podemos en Baleares, Mae de la Concha, que es asturiana y que está percibiendo el plus por estar empadronada en Menorca. Declaró que sin ese plus no llegaría a fin de mes. Que si tuviera que prescindir de la totalidad de ese plus, no le bastaría para vivir en Palma y tendría que dejar de ejercer como consellera.
Residencia encubierta
En total son 19 los altos cargos o personal eventual del gobierno balear (conformado por socialistas, podemos y los soberanistas locales de MES) que están percibiendo dichos emolumentos extra. Lo que sucede es que en algunos casos existen fundadas dudas de que los perceptores lo estén haciendo de forma correcta. Es el caso de Félix Alonso; el exalcalde de Altafulla, militante de Podemos que pactó con Convergència, habría confesado en el seno de su propio partido que, a pesar de seguir teniendo fijada su residencia oficialmente en Cataluña, él estaría residiendo de facto en Mallorca, en casa de su hija, por lo que se estaría ahorrando los gastos para los que recibe ese dinero adicional, según contó el Diario de Mallorca.
No es el único caso en el que se meterá Anticorrupción, que ya está recabando la información necesaria para saber si el asunto debe ser judicializado. Hay otros casos, también de Unidas Podemos, en los que planea la misma sombra: un jefe de gabinete que está empadronado en Palencia, pero que cuenta con familia censada en Mallorca. Una situación que se repite con otros altos cargos puestos por el equipo de gobierno. Hay gente censada en Asturias o Bilbao, pero también en Ibiza, Menorca o Formentera, que tienen casa y familiares en Mallorca y que podrían estar cobrando indebidamente.
Puertas giratorias
El dinero que esta coalición de izquierdas está destinando a asesores y altos cargos es uno de los asuntos más polémicos a los que se viene enfrentando desde su llegada al poder. A pesar de la mala situación económica del ejecutivo balear, este ejecutivo ha nombrado un 40% más de asesores y ha destinado 600.000 euros más al año en altos cargos. Muchos de ellos, fichados de la península tras la caída de escaños de Podemos en el Congreso.
Y es aquí donde han encontrado sus puertas giratorias, un mal endémico que la izquierda siempre ha criticado, pero que tiene en estos trasvases su versión propia y más modesta. Félix, el alcalde de Altafulla, dirige ahora Consumo en Baleares, aunque haya sido político y periodista en Cataluña toda su vida. Y cobra casi el doble del SMI solamente en extras, por venir desde fuera a Mallorca a trabajar. Ahora, Anticorrupción le va a pegar un vistazo a su caso.