Pese a haber rebajado la nota de corte, el examen de las oposiciones para ser Policía fue demasiado, según los aspirantes. De cada cuatro opositores al Cuerpo de Policía Nacional este año, tres (75%) han suspendido, y eso que el aprobado no estaba en el 5, como otros años, sino en el 3,5 sobre 10. Ya lo dijeron, en conversación con EL ESPAÑOL, algunos de los preparadores para el test: "El examen de ortografía más difícil de todos los tiempos".
De acuerdo con los datos facilitados por la Dirección General de la Policía, 16.255 opositores se presentaron el pasado 6 de marzo en las 16 sedes repartidas por todo el país a las pruebas de conocimientos, ortografía, el cuestionario de información biográfica, el test de personalidad, los psicotécnicos y la prueba voluntaria de idioma tras haber aprobado el examen de aptitud física. En total, habían sido 35.120 los aspirantes que habían abonado las tasas de examen para poder concurrir a esta convocatoria, de la que saldrá la XXXVII promoción.
De los 16.255 (499 menos de los que tenían derecho), tan sólo 3.956 superaron el 3,5 sobre 10 en el test de ortografía, uno de cada cuatro de los examinados. A continuación, este diario le propone que realice el polémico examen de este año, el cual los opositores tienen que responder en menos de ocho minutos.
En las anteriores oposiciones, las del 2020, el tribunal se había reservado expresamente la facultad de bajar la nota de corte en la prueba de ortografía en caso de que no existiera "un número suficiente de opositores" que sacara al menos un 5. Al final no hizo falta, y la puntuación mínima se quedó en 6,20, pero este año ha sido otro cantar.
En el supuesto de que todos los que superaron el examen ortográfico hubieran alcanzado el mínimo en la prueba de conocimientos (que superó algo menos de la mitad), habría 1,67 opositores por plaza en liza de cara al final del proceso selectivo. Les quedarían, por tanto, la entrevista personal y el reconocimiento médico.
De estas pruebas, saldrán, previsiblemente, los 2.366 alumnos que ingresarán en la Escuela Nacional de Policía para su futura incorporación al Cuerpo, una proporción deliberadamente más baja de lo habitual con la que se habría buscado reducir riesgos de contagios por la Covid-19.
Ya el pasado mes de marzo, cuando el polémico examen salió a la luz, este diario se puso en contacto con varios opositores que se quejaron de que en Granada las pruebas habían terminado después, "por causas que se desconocen", cuando los resultados de la prueba de ortografía ya eran públicos. "Esto hizo que algunos opositores en Granada pudiesen ir al baño a echar un vistazo a las respuestas", explica la fuente denunciante.
Un extremo que la Policía Nacional no ha podido confirmar, ya que "no hay notificaciones de incidencias en Granada, de momento", asegura un agente. Pese a ello, lo único claro es que el test de ortografía volvió a generar polémica, entonces, por la dificultad. Ahora, de nuevo, por el bajo índice de aprobados.