Llegó a la gasolinera para comprar unos inofensivos chicles y acabó encañonado por una decena de agentes de la Policía Nacional porque iba armado con un hacha. Este joven, de 29 años, ha sido detenido por lanzar el arma blanca contra un funcionario que tuvo los reflejos suficientes para agacharse rápido, evitando un hachazo que le habría causado lesiones de gravedad, tal y como recoge un vídeo al que ha accedido EL ESPAÑOL.
El veinteañero acudió a una estación de servicio que está situada en la zona norte de Alicante, próxima a un barrio deprimido de la ciudad, conocido popularmente como las 'Mil Viviendas'. Entró a la gasolinera, sobre las ocho de la tarde, de este domingo, y cogió unos chicles. Hasta ahí todo normal, salvo por un detalle: cuando llegó a la caja para pagar, la dependienta se percató de que debajo de la ropa llevaba algún tipo de arma blanca, y accionó el botón del pánico.
"El aviso entró como alarma de atraco en una gasolinera", tal y como confirman fuentes policiales. "La dependienta, al ver que llevaba el hacha, sus modos exaltados, y que había clientes en la tienda, cuando el joven salió, bajo la persiana". De inmediato, varios 'zetas' acudieron al establecimiento y se toparon con el sospechoso, esgrimiendo un hacha, de 15 centímetros de hoja. En todo momento, tal y como pone de manifiesto el vídeo al que ha accedido este diario, el veinteañero mostró una conducta desafiante hacia los agentes del Cuerpo Nacional.
"Cuando llegó el primer indicativo, su reacción fue ir a por el policía". De hecho, conforme fueron pasando los minutos, en la avenida Pintor Gastón Castelló se fueron acumulando más patrullas policiales, incluso agentes de paisano que trataban de negociar con el cliente de los chicles. En las imágenes, se aprecia como el joven, a pesar de estar rodeado, no depone su actitud agresiva, realizando continuos aspavientos, incluso lanzando advertencias a los funcionarios.
Una decena de agentes encañonando a un joven, de 29 años, que esgrime un hacha, en una gasolinera de Alicante.
En los balcones de los pisos, los vecinos asisten atónitos a la escena, propia de una película por el despliegue policial y porque varios agentes comienzan a encañonar al sospechoso. La negociación prosigue sin éxito porque en un momento dado, el joven, de 29 años, lanza el hacha contra uno de los policías nacionales que se tira al suelo para esquivar el ataque.
Dos policías lesionados
"Lanzó el hacha y le pasó al lado de la cabeza de un compañero", según precisan las citadas fuentes. Tras errar en el hachazo, los agentes, sin pensar en los posibles riesgos sobre su integridad física, se apresuran para reducir al sospechoso echándose encima suya, como si fuesen a placar a un jugador de rugby. "Hay dos compañeros lesionados".
El veinteañero fue detenido por un supuesto delito de atentado contra agente de la autoridad, descartándose el móvil del atraco. De momento, no ha trascendido si padece problemas mentales ni los motivos por los que acudió armado con un hacha a por unos chicles. Esta arriesgada intervención policial que se ha viralizado en varios vídeos, ha provocado reacciones de preocupación entre las asociaciones profesionales que representan a los agentes destinados en Alicante.
Desde la Confederación Española de Policía han reclamado al Ministerio del Interior que "se dote" a los agentes, "a la mayor brevedad", de pistolas eléctricas, tipo taser, que está diseñada para inmovilizar temporalmente a los delincuentes mediante descargas en los músculos motores, principalmente, en brazos y piernas. "En intervenciones como esta se reduce sustancialmente el riesgo para los policías".
Comisaría de Policía Nacional de la zona norte de Alicante.
Pedirán condecoración
Un portavoz de CEP avanza que su asociación solicitará al Ministerio del Interior que "se reconozca a los actuantes" con una condecoración: "Ponemos en valor la profesionalidad de los compañeros actuantes, al conseguir reducir y detener a este individuo sin usar medios letales".
En el sindicato Justicia Policial (Jupol) también han "insistido" en calificar de "urgente necesidad, la de formar y dotar a todos los funcionarios de la Policía Nacional de la pistola taser". Desde Jupol han resaltado en su cuenta de Twitter el enorme riesgo de la intervención, publicando una foto del hacha: "El arma con la que han sido amenazados y finalmente atacados, poca broma. Gracias compañeros por vuestra enorme profesionalidad".