Las altas temperaturas provocadas por la ola de calor mantienen en amenaza al territorio español. A los incendios descontrolados que han arrasado en las últimas horas miles de hectáreas, hay que sumar las muertes notificadas y atribuibles a las temperaturas récord que registran los termómetros estos días. Así lo ha notificado el Instituto de Salud Carlos III, dependiente del Ministerio de Sanidad, que ha confirmado 360 fallecimientos entre el 10 y el 15 de julio a causa de las altas temperaturas.
El último dato que recoge la estadística de Monitorización de la mortalidad diaria (MoMo) por causas atribuibles al exceso de temperatura es el referido al 15 de julio, cuando se contabilizaron 123 fallecidos. En la jornada previa, la del 14 de julio, que se considera el pico máximo de la ola, y que sumó solo en ese día un total de 93 fallecidos.
Desde el día 10, la tendencia ha sido ascendente con 15 muertos esa jornada y prácticamente el doble (28) en la siguiente. Los días 12 y 13 los decesos por exceso de calor han seguido creciendo.
De hecho, el martes 12 fallecieron por este motivo 41 personas y 60 el miércoles 13. Las temperaturas más extremas que se están registrando en numerosos puntos del país desde el domingo comenzaron a remitir este viernes.
Una de las víctimas de estos incendios ha sido un barrendero de Madrid, que sufrió un golpe de calor el viernes mientras trabajaba a las 17:30 horas de la tarde. Un momento del día en el que el termómetro marcaba cerca de 40 grados.
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Alerta por los fuegos
Por el momento, son cinco las comunidades autónomas donde, en estos momentos, continúan activos varios incendios de distinto nivel y extensión. Extremadura, Andalucía, Castilla y León y Galicia son las principales afectadas por unos fuegos cuya extinción continúa siendo difícil debido a las condiciones climatológicas desfavorables.
Dada esta situación, desde el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico se ha alertado a la ciudadanía para "extremar las precauciones" ante unos incendios que podrían llegar durante los próximos días a otros puntos de la Península y al archipiélago de Baleares.
En la actualidad, uno de los incendios que más preocupan es el declarado este jueves en Casas de Miravete, en Cáceres. El fuego obligó a cortar la madrugada del sábado Autovía de Extremadura (A-5) entre los kilómetros 200 al 219. Entró ya en la reserva de la Biosfera de Monfragüe y ha calcinado ya más de 3.000 hectáreas. Entre los principales riesgos, está la cercanía del incendio con la central nuclear de Almaraz, que se encuentra a escasos cinco kilómetros. Sin embargo, según ha informado el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), el fuego no afectará a la instalación dado que se encuentra en el margen contrario del río Tajo.
Este incendio se suma al declarado este lunes en la comarca de Las Hurdes y cuya evolución ha sido negativa progresivamente durante estos días. Durante la madrugada del jueves al viernes fue necesaria la intervención de la Unidad Militar de Emergencias en una zona en la que ya se han calcinado 4.100 hectáreas entre las provincias de Cáceres y Salamanca.
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4.300 hectáreas en Galicia
El fuego también ha llegado a la comunidad autónoma de Galicia, donde por el momento las llamas han arrasado ya 4.300 hectáreas. Entre los incendios propagados en la región, preocupa el de Folgoso do Courel (Lugo), con cerca de 2.000 hectáreas calcinadas, y Carballeda de Valdeorras (Ourense), que ha afectado a 950 hectáreas.
Solo entre la noche del jueves y el viernes, una fuerte tormenta provocó 52 incendios a causa de los rayos. Entre todos ellos, un total de 41 se produjeron entre las 20.00 horas y la medianoche. Unos fuegos que se han avivado a causa de las altas temperaturas registradas en la zona. En el caso de Ourense, durante el jueves se alcanzaron máximas de 44 grados.
Cinco fuegos en Castilla y León
Los incendios tampoco han dado tregua a Castilla y León, donde hasta cinco provincias registran en la actualidad incendios que preocupan a sus habitantes. De entre ellos, tres son los que más preocupan, con un nivel 2 de peligrosidad, en Figueruela de Arriba (Zamora), en Navafría (Segovia) y Monsagro (Salamanca). Por su parte, se han declarado otros tres de nivel 1 en Barjas y Villafranca del Bierzo (León) y Navalonguilla (Ávila).
El fuego ha obligado a desalojar algunas zonas cercanas, como es el caso de la zona de Morasverdes (Salamanca). Por el momento, los técnicos han puesto ya en marcha un plan de extinción que parece estar funcionando. El otro municipio que ha tenido que ser evacuado ha sido el de Guadapero, cuyos habitantes se han visto obligados a abandonar sus viviendas y desplazarse a Ciudad Rodrigo.
Preocupación en Málaga
A todos estos incendios hay que añadir también el declarado en El Higuerón, en el municipio malagueño de Mijas, donde el gobierno andaluz ha activado el nivel 1 del Plan de Emergencias por Incendios Forestales en Málaga. Hasta un total de ocho medios aéreos trabajan para controlar las llamas en el terreno.
A ellos, se han sumado también cuatro brigadas de refuerzo contra incendios (Bricas), dos agentes de medioambiente y dos autobombas. Unos efectivos que finalmente han ido aumentando sus agentes en función del avance del fuego, llegando a los 170 bomberos del Infoca, 35 del Consorcio Provincial de Málaga (CPB) y cuatro vehículos pesados. A consecuencia de ello, 2.300 vecinos de los municipios de Alhaurín de la Torre y Alhaurín el Grande han sido desalojados de sus viviendas.