Oihana Goiriena, mujer del periodista Pablo González, quien está en prisión provisional en Polonia acusado de un delito de espionaje desde hace cinco meses, ha pedido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que se encuentra en ese país, que "interceda" por su marido ante el presidente polaco.

España y Polonia reforzarán este miércoles, en el marco de la XIV cumbre entre ambos países que se celebra en Varsovia, su cooperación en materia de defensa.

En un video publicado en las redes, Oihana Goiriena pide a Sánchez que "interceda" por Pablo González ante el presidente de Polonia para que el periodista "pueda tener una defensa y un juicio justos, y, sobre todo, que se respeten sus derechos".

Pide al presidente del Gobierno que "se acuerde de Pablo, un ciudadano español detenido en un país de la Unión Europea, al que se le está negando el derecho a hablar con su familia, que solo ha tenido cuatro visitas del cónsul y no está teniendo la posibilidad de que su abogado de confianza conozca las causas de las que se le acusa".

Recuerda que Pablo González cumple hoy "150 días detenido en Polonia", cinco meses en los que "solo" ha recibido "dos cartas" de su marido. "Cuenta que está bien, que se le hacen los días muy largos y que sigamos apoyándolo", relata Ohiana Goiriena.

Ha reprochado que en este tiempo no se haya permitido hablar con él "ni a su familia ni a su abogado de confianza".

La mujer de Pablo González ha dicho haber sentido el "calor y cariño" de los amigos de su marido, "pero a la vez -añade- también al abandono de las instituciones nacionales y europeas".

Pablo González, en una imagen de sus redes sociales, cubriendo la segunda guerra del Alto Karabaj. @PabVis

Por ello, ha pedido a Pedro Sánchez que interceda por Pablo, para que tenga una defensa y juicio justos, y también "para que su familia pueda hablar con él de primera mano y saber que está bien; que sus hijos escuchen a su padre".

Pablo González, nacido en Rusia y que reside en Bizkaia con su esposa y sus tres hijos, fue detenido en Polonia a pocos kilómetros de la frontera con Ucrania, acusado de ser un agente de la Dirección de Inteligencia de las Fuerzas Armadas rusas, cuando trabajaba como "freelance" informando sobre la llegada de refugiados que huyen de la guerra.

Asociaciones de periodistas españolas y de ámbito internacional han pedido explicaciones a Polonia por la detención de González y han reclamado respeto al derecho a la información en la cobertura de la invasión de Rusia en Ucrania.