La Ley de Protección y Bienestar Animal, entre otras muchas cosas, establece que a partir de ahora los españoles tendrán que contratar un seguro para todos los tipos de perro. No era obligatorio todavía a nivel nacional, pero sí en dos comunidades –en concreto, Madrid y País Vasco– donde los dueños deben contar con una póliza de responsabilidad civil, según la Ley 4/2016 de Protección de Compañía de la Comunidad de Madrid, independientemente de la raza.

Esta obligatoriedad puesta en marcha por Ione Belarra en su ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 le supondrá a los españoles pagar 245 millones al año (si se tiene en cuenta que hay siete millones de perros, según la Asociación Nacional de Fabricantes de Animales de Alimentos de Compañía, y cada uno e ellos tendrá que pagar como mínimo 25 euros).

La Ley también obligará a los dueños de perros a la realización “previamente de un curso (gratuito) de formación acreditado para la tenencia de perros, cuyo contenido se determinará reglamentariamente”. Por el momento, se desconoce cómo será esa preparación para tener un can o quién impartirá los cursos. Lo que parece seguro es que será un trámite sencillo, que el dueño pueda hacer incluso por internet.

Además, la Ley también endurece las penas por maltrato animal, que en caso de la muerte llega a penas de hasta 24 meses –en esta medida se incluye a todos los animales vertebrados–. Queda prohibido sacrificar animales de compañía, salvo que sea por motivos sanitarios o eutanásicos; todos los animales serán identificados; la cría sólo podrá ser ejercida por criadores registrados y profesionales así como la prohibición de comercializar con perros, gatos y hurones. Y, por último, prohíbe los circos con animales salvajes; su utilización en actividades o espectáculos donde puedan sufrir daño o muerte; y se reconvertirán los zoos y delfinarios en centros de recuperación de especies autóctonas.

Seguros

El seguro de Responsabilidad Civil obligatorio tendrá un coste de entre 25 y 30 euros al año en razas de perros no peligrosas y 50 euros anuales en perros potencialmente peligrosos, según datos de Rastreator. Esta póliza responde legalmente a todos los daños que el can pueda causar a un tercero.

Hay otros dos seguros que pueden contratar a día de hoy los dueños de los perros. Se trata del de Responsabilidad Civil y Accidentes, que tiene un coste de 97 euros al año y que cubre también accidentes; y el de accidentes y veterinario, que por 400 euros anuales incluye también las consultas al doctor canino. Estos dos últimos no son obligatorios con la nueva ley.

Con este nuevo texto normativo desaparece también la obligación de los dueños de perros potencialmente peligrosos de contratar un seguro de Responsabilidad Civil por daños a terceros con una cobertura superior a los 120.000 euros –aunque en algunas comunidades como Castilla y León, Madrid, Cataluña, Galicia y Cantabria, el mínimo llega a ser superior–.

Entre estos perros que antes tenían que contratar alguna póliza se encontraban las siguientes razas: Pit Bull Terrier, Staffordshire Bull Terrier, American Staffordshire Terrier, Rottweiler, Dogo argentino, Fila brasileiro, Tosa Inu, Akita Inu y los cruces entre estas razas. Ahora, el seguro será obligatorio para todos los tipos de canes.

Sacrificio de animales

La Ley, más allá de los cursos y los seguros para perros, también incluye la prohibición el sacrificio de animales domésticos, salvo que se produzca por razones sanitarias. En los casos en los que se mate al animal se podría llegar a condenar al dueño con penas de entre 24 y 36 meses de cárcel.

Se prohíben también las actividades y espectáculos que puedan provocar daño o incluso la muerte a los animales, tales como las peleas de gallo o el tiro al pichón, así como los animales salvajes. Las corridas o los encierros con toros siguen permitidas.

Otras medias

La ley también regula la correcta gestión de las colonias felinas y prohíbe exponer perros y gatos en los comercios por dos motivos: la regulación considera que eso evita la adquisición no meditada por parte de algunos clientes y quita estrés a los cachorros cuando están en fase de socialización. Esto afecta a todos los animales de compañía, pequeños mamíferos, reptiles y aves. Sólo los peces podrán verse en escaparates.

Toda esta legislación lleva aparejadas multas de hasta 600.000 euros para todos aquellos que realicen peleas de gallos en Canarias y Andalucía –regiones donde más se llevan a cabo– y de 100.000 euros para los circos que sigan promoviendo espectáculos con animales salvajes. Se veta también la cría de visones americanos, muy apreciados para la elaboración de pieles.