Un 28% de los jóvenes españoles de entre 25 y 34 años no tienen aún un título de Bachillerato o Formación Profesional Básica o Media. Así lo recoge el informe Education at Glance de la OCDE, que analiza el nivel de estudios de la población y el impacto del mismo en el mercado laboral, entre otros aspectos educativos.
Según este estudio, las etapas de Bachillerato y Formación Profesional Básica o Media son "la cualificación mínima para una participación exitosa en el mercado laboral". A pesar de lo que pudiera parecer, los datos informan de una mejoría en la última década en este aspecto, pues en 2011 la cifra de jóvenes en las edades resaltadas y sin los títulos mencionados era del 35%.
Esto no significa que los datos españoles sean buenos. La media porcentual en los países de la OCDE también se ha reducido en la última década y el porcentaje de jóvenes sin estos estudios en los países miembros es del 14%, la mitad que en España.
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Desglosados por Comunidades, los datos son aún más preocupantes. De hecho, es algo que se destaca en el informe: "Las variaciones en el nivel educativo entre las comunidades reflejan, hasta cierto punto, la diferencia en las condiciones económicas y los patrones de migración interna".
Las Comunidades con mayor población con titulación exclusivamente de ESO son Extremadura, 49,7%; Ceuta, con 46,7%; Castilla-La Mancha, 45,8%; Andalucía, con un 44,8%; Murcia, con un 41,6%; Comunidad Valenciana, con 37,9%; y Canarias 37,8%.
Estudios terciarios
España también ha perdido la ventaja que tenía en población joven con estudios superiores, con respecto a la media de países de la OCDE. Si en el año 2000 había un 34 por ciento de jóvenes españoles de entre 25 y 34 años con estudios superiores, en la OCDE era del 27%. Ahora, en 2021, el porcentaje español se sitúa en un 49%, mientras que en la OCDE está en un 48%.
En lo que respecta a estudios terciarios —FP superior, grado universitario o superior—, la diferencia entre comunidades es abismal. País Vasco tiene el mayor número de personas de entre 25 y 64 años, porcentualmente, con estudios terciarios. Se trata de un 56%. En la cola, la Ciudad Autónoma de Ceuta, con sólo un 25%.
Las comunidades con mayor porcentaje de personas con estudios terciarios son País Vasco, Madrid (50,2%) y Navarra (49,2%), seguidas de Asturias (44,6%), Cantabria (43,6%), Cataluña (43,2%), Galicia (41,9%), Aragón (41%). Las peores en este punto son Extremadura (29,6%) y Castilla-La Mancha (31,1%).
Como es lógico, esto repercute en las perspectivas de empleo. "En 2021, la tasa de empleo entre las personas de 25 a 34 años con educación terciaria (FP superior, grado universitario y máster) en España es de 19 puntos porcentuales más alta que entre aquellos con un título de segunda etapa de educación secundaria o postsecundaria no terciaria".
Cultura 'ni-ni'
España lidera la lista de personas de 25 a 29 años que ni estudia ni trabajan, a pesar de tener educación terciaria. En este caso, el porcentaje es del 18,4%. Sólo Sudáfrica (39,1%), Grecia (34,1%), Turquía (27,4%), Chile (24,2%), Italia (21,9%) y Colombia (20,8%), son los únicos países con mayor número de 'ni-nis' que España.
Asimismo, el informe destaca otro grave problema: son pocos los que se decantan por estudios relacionados con las carreras con mayor demanda de empleo. Por ejemplo, sólo el 6% de los estudiantes se decantan por las Tecnologías de la Información y Comunicaciones, en la que la tasa de empleabilidad es del 88%. La tasa de empleabilidad por sectores es del 86% en Salud; 83% en Ingeniería; 82% en Ciencias; 80% en Economía, Empresa o Derecho; y del 78% en Educación y Artes y Humanidades.
Los malos datos no sólo repercuten a los estudiantes en este informe. España gasta unos 1.300 euros menos por alumno que la media de la OCDE en educación. Es decir, en 2019 la inversión española fue de un 4,3% del PIB, mientras que en la media de la OCDE se invierte un 4,9%. Es decir, en comparación, España gastó unos 10.694 dólares en 2019, mientras que la media es de 11.990. Esto supone una variación de unos 1.300 euros, aproximadamente, y en valor de 2019.
En lo que respecta al gasto privado en educación, cabe destacar que en España fue del 13% en los estudios no terciarios. Mientras tanto, la media de países de la OCDE se sitúa en el 10. Igualmente, en los estudios terciarios, el gasto privado fue del 33%, mientras que en la OCDE fue del 31%.