La oferta de Cristina Fernández, la granjera que paga 2.000 euros por ser tiktoker de vacas dos días

Cristina Fernández-Armesto todavía recuerda las charlas con su abuelo Felipe hablando sobre los orígenes de 'Casa Grande de Xanceda'. Todo comenzó en el año 1968, cuando un total de 20 vacas cruzaron el Atlántico desde Canadá para desembarcar en un terreno de apenas 30 hectáreas situado en el municipio de Mesía, en la provincia de La Coruña. El abuelo de Cristina, periodista de profesión, fue el encargado de informar a España desde Reino Unido sobre la evolución de la II Guerra Mundial. Pero no solo eso. También se codeó con Dalí y Picasso, conoció a Churchill y a Einstein y fue expulsado de Alemania por Heinrich Himmler —mano derecha de Hitler— acusado de conspirar contra el nazismo.

Una vida muy ajetreada que llevó a Felipe y a su mujer Victoria a tener dos grandes deseos, que iban unidos. Por un lado, retirarse en su Galicia natal. Y por otro, conseguir crear lo que siempre habían querido que fuera su gran proyecto de jubilación: una granja. Tras la muerte de su abuelo, Cristina y su familia debatieron la posibilidad de vender las tierras y los animales. Pero, tal y como cuenta a EL ESPAÑOL, la sangre gallega que corre por sus venas y la morriña les hizo cambiar de opinión y, finalmente, decidieron quedarse con el negocio. Un proyecto de vida que ha ido creciendo hasta el punto de que, en la actualidad, 'Casa Grande Xanceda' ya se ha convertido en una de las granjas ecológicas con más repercusión de todo Galicia.

Esta semana, su aparición en los medios de comunicación ha sido masiva. Y es que esta granja gallega ha publicado una inusual oferta de trabajo que no ha dejado indiferente a nadie. Con motivo del Día Mundial de la Leche, 'Casa Grande de Xanceda' busca a una persona para trabajar como 'tiktoker de vacas' durante un fin de semana. El candidato que supere el proceso de selección deberá crear contenido multimedia con los animales para, después, subirlo a redes sociales. Vivirá rodeado de animales, podrá llevar un acompañante y dormirá en una camper. Y todo ello durante dos días, con un sueldo de 2.000 euros y con los gastos, la comida y el alojamiento totalmente incluido.

"Buscamos una persona que comparta los mismos valores que nosotros y que le gusten mucho los animales. Va a tener que estar con las vacas y que lidiar con perros mastines y burros. Tiene que ser una persona que le guste la naturaleza y que disfrute del medioambiente. Que sea una persona echada para adelante y que no se le caigan los anillos. Aquí se viene a currar también. Que sea una persona divertida, positiva y que tenga ganas de pasárselo bien y de vivir una experiencia nueva", cuenta Cristina a EL ESPAÑOL.

Los motivos que han llevado a 'Casa Grande de Xanceda' a publicar esta oferta de trabajo han sido dos. El primero de ellos, poder dar a conocer los productos ecológicos que Cristina elabora y comercializa en su propia granja: yogures, quesos, helados, leches, etc. Pero para esta gallega, detrás de la iniciativa hay un objetivo aún más importante. Y es informar al público más joven, sobre todo a la Generación Z, sobre la realidad de los productos ecológicos y la repercusión positiva que estos tienen en el medioambiente. 

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"Ahora hay un verdadero problema con el greenwashing, el blanqueo ecológico. Estamos en una crisis climática y los consumidores están muy sensibles con los temas medioambientales. Hay una parte de las empresas que se aprovechan de eso y lanzan ‘claims’ verdes sin ninguna justificación ni estudio científico. Hay términos que se usan como agricultura verde, ganadería 100% sostenible, amigos del planeta. Los consumidores están confusos. A los jóvenes hay que recordarles cuál es la diferencia entre la agricultura ecológica y lo demás. Los productos ecológicos tienen una certificación. El resto son claims de marketing, que algunos serán verdad y otros no, pero que no tienen ningún tipo de control", asegura. 

Para el candidato que resulte seleccionado, el equipo de 'Casa Grande de Xanceda' tiene preparada una experiencia completamente inmersiva en el mundo rural ecológico. El trabajo se desarrollará durante el fin de semana del 1 y el 2 de julio y todos aquellos que deseen participar deberán enviar su solicitud antes del próximo domingo 11 de junio. El sábado, cuando lleguen a Santiago, el elegido y su acompañante serán recogidos con una camper para viajar hasta Xanceda. Una vez allí, pasearán por la granja, entrenarán a perros mastines y pastores, ordeñarán vacas, practicarán agroyoga y disfrutarán de una observación de fauna nocturna.

El domingo, las actividades continuarán a primera hora de la mañana con una salida a los prados con las vacas para, después, visitar el colmenar y aprender a educar a un burro. "Va a ser una experiencia inmersiva 100%. Va a ser cortita, pero muy intensa. Se lo pasará muy bien y estará rodeado de un equipo estupendo. Y, sobre todo, que aprenderá algo más, una parte que no está en la conciencia y que tiene que ser capaz de divulgarla, que es el principal objetivo", explica Cristina.

Aunque la oferta laboral parezca más un regalo de un todo incluido en el rural que un empleo en sí, el candidato irá a la granja a trabajar. Durante todo el fin de semana, el elegido deberá mantener su mente abierta y tirar de creatividad para crear contenido que, posteriormente, será publicado en plataformas como Tik Tok, la red social por excelencia entre los jóvenes. 

— Tik Tok es el rey de los adolescentes y estos huyen del mundo rural. ¿También pretendéis con ello ofrecerles una visión distinta a la que tienen?

— En nuestro Concello, en los últimos siete años, hemos perdido al 10% de la población. Y es realmente un problema. Es claramente una de las cosas que más preocupa a la gente que vive en el rural. Tenemos una iniciativa que es ir a visitar institutos y damos másterclass. Ponemos ejemplos de proyectos que han tenido éxito en el rural y ellos deben simular la creación de una empresa. Es para que sepan que el futuro en el rural no tiene por qué ser el que ellos han visto y del que quieren huir. Ha sido muy duro y es muy duro. Pero se pueden hacer otras cosas y se puede innovar. Se pueden hacer cosas en el mundo de la moda, puedes teletrabajar con la fibra óptica de las aldeas... Puedes ser programador de videojuegos en el rural y tener una calidad de vida mejor que la que tienes en muchas ciudades.

Crear una granja ecológica 

El abuelo de Cristina siempre tuvo una visión clara sobre cómo quería que fuera su modelo de negocio. Bajo su punto de vista, las vacas tenían que estar en el campo. De hecho, siempre solía repetir que con el suelo, la fertilidad y las lluvias que se dan en Galicia, era "absurdo" tener a las vacas estabuladas y comiendo piensos que procedían de la otra punta del mundo. "Mis vacas de ahora, que son las tataranietas de las 20 que cruzaron el charco, llevan medio siglo paciendo nuestra tierra. Están genéticamente súper adaptadas al tipo de clima y de pasto", asegura.

Poco a poco, y debido a su longevidad y a su buen trato con el resto de ganaderos y agricultores de la zona, Felipe fue creando todo un imperio. Tras su fallecimiento, el legado quedó en manos de su familia. Pero, tal y como explica Cristina a EL ESPAÑOL, ninguno de ellos había trabajado previamente en el campo. "Yo estudié empresariales internacionales y trabajaba en el mundo de la moda en una multinacional alemana. Es decir, nada que ver con el tema. Realmente, la granja significaba los veranos, el campo y los animales. Había unos valores a los que le teníamos cariño, pero ninguno nos habíamos dedicado profesionalmente a la ganadería ni a la agricultura, ni siquiera al mundo de la alimentación", explica.

A pesar de ello, decidió liderar el proyecto dándole una vuelta de 180º. Hasta el momento, Felipe vendía leche convencional a una industria que la recogía en una cisterna cada día. Pero, por aquella época, el negocio comenzó a convertirse en una auténtica ruina. "Mi abuelo había ido metiendo los ahorros de una vida, pero no era un negocio que se sostuviera económicamente. O le dábamos una vuelta a todo eso, o íbamos a tener que cerrar", cuenta Cristina. Por ello, trataron de apostar por un proyecto que aumentara el valor de su leche, pero que también respetara los valores originales de su abuelo.

"Ahí se empezaba ya a escuchar el tema de la agricultura y ganadería en ecológico y nos certificamos. Nos certificamos como ecológico porque teníamos la base para ello. En una hectárea de terreno no puedes tener más de dos cabezas de ganado. Si tú quieres tener 300 vacas, tenías que tener 150 hectáreas de terreno y eso es muy difícil de conseguir y muy costoso", confiesa.

En la actualidad, 'Casa Grande de Xanceda' se ha convertido en una de las granjas ecológicas con más repercusión de todo Galicia. Trabajan con ganadería extensiva, no utilizan productos químicos y es la propia Cristina y todo su equipo quien cuida y mide los terrenos. De hecho, recientemente han sido declarados Espacio Natural Protegido. En el recinto cuentan con vacas, perros, burros, además de pájaros, árboles autóctonos e incluso colmenas de abejas. "Y eso que yo no comercializo la miel. Las tenemos para que polinicen", asegura.

El procedimiento que se sigue es sencillo. Se trata de una economía circular en la que cada uno de los componentes son esenciales para el engranaje de la cadena. Las vacas pastan de forma natural en el campo, después son ordeñadas para extraer la leche y es de esta leche de donde se obtienen los productos que, posteriormente, Cristina y su equipo comercializan desde su propia ecotienda.

"Nosotros, principalmente, somos yogurteros. Lo que más vendemos son yogures ecológicos. En la práctica habitual, en la industria, para conseguir que sea cremoso se le echa leche en polvo. Lo que hicimos fue utilizar una técnica, la ultrafiltración, que filtra la leche y de dos litros de leche salen un kilo de yogur. Desecha el agua y se queda sólo con lo bueno de la leche. Con esa base de leche es con la que hacemos los yogures. También hacemos yogures infantiles, quesos, helados, mantequilla, leche. Hemos ido diversificando también toda la paleta de productos porque es más fácil cuando viene un cliente ofrecerle un surtido", añade.

Aprender de lo ecológico 

Acercar al público joven la importancia de las granjas y productos ecológicos es el objetivo principal de la campaña de 'tiktoker de vacas' de Casa Grande de Xanceda. Y es que, tal y como asegura Cristina, el elegido entenderá toda la cadena de trabajo desde el momento que ponga un pie en la finca. 

"Ves las vacas en el prado, los árboles, los patos que crían en la ecolaguna, las abejas que polinizan. Y lo entiendes. Sirve muy bien para esa plataforma, para decir qué es la ganadería y la agricultura ecológica. Si tú compras un producto ecológico, esto es de donde viene. Yo lo puedo demostrar. Yo no sé si los que dicen que tienen una ganadería 100% ecológica lo pueden demostrar", confiesa. 

Por ello, no han dudado en buscar una persona que sepa grabar vídeos y que tenga chispa y gracia para contarle a todos sus seguidores lo que es vivir, estar y trabajar en una granja ecológica. 

"Cuando vengan a Xanceda se van a sumergir en el mundo ecológico. Van a conocer lo que es vivir en una granja, estar rodeado de vacas, van a ayudarnos a sacar a las vacas al pasto... Van a conocer a nuestros diez mastines de pastoreo, van a ordeñar y van a hacer agroyoga, que está muy de moda, rodeado de vacas. También van a tener la oportunidad de vivir el día a día de una granja con un equipo estupendo, descubrir lo que es la ganadería y agricultura ecológica y pasar una experiencia inolvidable", concluye.