Información del grupo de WhatsApp '52 amigos', creado por Iván Espinosa de los Monteros el pasado 29 de julio y al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL.

Información del grupo de WhatsApp '52 amigos', creado por Iván Espinosa de los Monteros el pasado 29 de julio y al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL. Diseño: Arte EE / EP, El Español

Reportajes

'52 amigos': Espinosa creó un grupo de WhatsApp 10 días antes de renunciar en el que Abascal no entró

El exportavoz de Vox invitó a los diputados de la formación en la XIV legislatura y les emplazó a "tomarse un café en septiembre". 

13 agosto, 2023 02:35
Domingo Díaz Ángel Ortiz

Es sábado, 29 de julio, seis días después de las elecciones generales. Vox ha pasado de 52 a 33 diputados tras perder unos 650.000 votos y todo indica que la posibilidad de alcanzar con el PP un Gobierno de coalición con Alberto Núñez Feijóo como presidente se ha esfumado. En el mejor de los escenarios, poniendo a los potenciales socios de acuerdo y superando los recelos insulares, PP, Vox, UPN y Coalición Canaria alcanzarían 172 diputados tras el recuento del voto exterior, impotentes en cualquier caso para derogar el sanchismo.

Son las 17:25 horas. Iván Espinosa de los Monteros tiene el móvil en las manos. Sin ministerio, preocupado por la salud de los suyos, tan recientes las meditaciones en las "noches de hospital", molesto con las intenciones de Buxadé de colocar a sus acólitos como asesores en la estructura de Rocío Monasterio, su mujer y lideresa de Vox en la Comunidad de Madrid; cada vez más arrinconada su manera de ver la política, sus ideas, en un partido donde el swing de Jorge Buxadé y su mano derecha, Ignacio de Hoces, se han impuesto sobre el resto; y, en definitiva, "quemado por la política" —cuenta una exdiputada a EL ESPAÑOL—, Espinosa de los Monteros crea un grupo de WhatsApp.

Le pone por nombre '52 amigos'. Manda la invitación para que se sumen la mayoría de los diputados que han pertenecido a la bancada esta legislatura. El gesto tiene algo de nostálgico. La brega parlamentaria crea profundas amistades y también algunos roces en un trabajo de ida y vuelta a Madrid. Muchos no volverán a trabajar juntos. Es una manera de no perder el contacto, un vínculo.

[La caída de la cúpula de cuando Vox tenía 52 diputados: "Es una agencia de colocación de Buxadé"]

Abascal rehúsa sumarse. Jamas pulsó el link para entrar en el grupo pese a que el nombre lo decía todo. Estrechísima desde que se conocieran en 2012, la relación entre dos de los fundadores de Vox se ha enfriado durante los dos últimos meses. Apenas han hablado desde el pasado 16 de junio, el día que se anunciaron las listas definitivas al Congreso y muchos diputados cercanos a Espinosa se quedaron fuera.

El grupo es un éxito y se suman hasta 40 compañeros. Espinosa les emplaza "a tomarse un café en septiembre", resalta una de las fuentes consultadas por este periódico. Muchos empiezan a sospechar que Espinosa abandonaría Vox.

Foto de familia de los 52 diputados de Vox al principio de la anterior legislatura.

Foto de familia de los 52 diputados de Vox al principio de la anterior legislatura. E.E.

El foro pronto adquiere el tono boomer y cuñado inevitable cuando quienes integran el grupo de WhatsApp superan en su mayoría los 40 años. En esto nada tiene que ver la ideología. Hay memes, tuits, fotos y emoticonos que lloran de risa. Se comparten las chaladuras de Alvise Pérez y noticias sobre Vox. Algunas como la publicada el pasado miércoles por este periódico: "Dirigentes del PP abren la puerta a Espinosa: "Hay que lograr que sea una pausa y no una marcha".

La naturaleza de un grupo de WhatsApp es opinar. La comunicación va mucho más allá. Y con la incertidumbre rondando las costuras del partido, el foro adquiere cada vez más significado. Cuando Espinosa creó el grupo, la decisión ya estaba tomada y la dirección del partido lo sabía. El partido, ahora, no está para emoticonos ni para stickers, aunque sean en movimiento.

"En política debes posicionarte; no opinar. El posicionamiento no es personal, sino político, y por ello comunitario o colectivo, y debe ser adoptado en el partido y por el partido", escribió Buxadé en La Gaceta de la Iberosfera en agosto de 2022. "Si tú opinas o te posicionas antes, dañas al partido", añadió el vicepresidente de Acción Política, sin demasiadas loas en el chat. Tampoco críticas evidentes.

Un número: 19

Habida cuenta de que las esperanzas de Santiago Abascal ya eran nulas con los resultados en caliente, el líder de Vox dio por perdida cualquier esperanza de ser vicepresidente en la misma noche electoral. Las declaraciones del jefe de la derecha vasca más tradicionalista, Andoni Ortuzar, cerrando la puerta a Feijóo y jactándose públicamente de que "la derecha está parada gracias al PNV" las enterraron definitivamente. 

También Iván Espinosa de los Monteros supo que no sería ministro. El hasta ahora portavoz parlamentario de Vox era el perfil más asumible por Feijóo dentro de un gabinete. A pesar de que en el extremo opuesto estaba Jorge Buxadé, cuya figura era un escollo a sortear en caso de que Abascal tuviera la sartén por el mango. El PP, presumiblemente, hubiera vetado esa segunda posibilidad de que ostentara una cartera que también ansiaba. 

Pero ni uno ni otro. Lejos de integrarse como socio minoritario en un Ejecutivo, el partido pedalea cuesta arriba el repecho de una crisis de identidad tras la salida de uno de sus más valiosos activos.

['Los Cuatro Jinetes del Apocalipsis' de la caída de Vox: Buxadé, Hoces, Ariza, y Méndez-Monasterio]

La casa comenzó a arder, sin embargo, mucho antes de que el humo se viera desde fuera. Con la salida de Macarena Olona en julio de 2022 el partido cerró filas. El cese del anterior vicesecretario de Organización, Tomás Fernández, y la caída de Ortega Smith afloró el descontento de los territorios con Bambú, sede nacional del partido. Pero fue la confección de las listas lo que dinamitó la convivencia. 

Fue ese 16 de junio en que el teléfono de Espinosa no paró de sonar. Las listas para los comicios generales realizadas por un comité electoral del que nadie conoce a sus miembros, pero que a todas luces está presidido por Buxadé, dejaron en la estacada o fuera de los puestos de salida a muchos diputados que daban por segura su continuidad. 

Juan Luis Steegmann, Víctor Sánchez Real e Iván Espinosa de los Monteros en una comparecencia pública.

Juan Luis Steegmann, Víctor Sánchez Real e Iván Espinosa de los Monteros en una comparecencia pública. Europa Press

El exportavoz de Vox no sabía qué contestarles. Se había mantenido al margen de su confección y algunos se sintieron "abandonados" por él, que junto a Abascal había "confeccionado" la bancada de los 52 de Vox. La sensación es la misma en tres de los exdiputados consultados por este periódico. Todos disculpan esa dejación por su "importante" y "extraordinaria" labor en el Congreso.

"Él ha sido como nuestro entrenador", apunta una exdiputada incluida en el grupo mencionado sobre su portavoz durante los casi cuatro últimos años. "No sólo se ha preocupado por nuestro trabajo, también por cómo estábamos personalmente". 

El abandono de Espinosa supone vía libre (ahora total) para Buxadé en la organización del partido. En las redes sociales, exdiputados de Vox y exconcejales critican el camino tomado por el partido desde antes de la cita electoral de julio.

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Olona —sin invitación en el grupo— se suma vía Twitter y deja a las claras el fracaso de los nuevos mandamases: "Recordadlo cuando estéis descorchando la botella: 19". La diferencia entre los 52 diputados conseguidos en 2019, con una la lista confeccionada por Espinosa de los Monteros y Abascal, y los 33 logrados en 2023 con Buxadé al frente.

Relación resquebrajada

Cuenta Santiago Abascal en el libro No me rindo —escrito al alimón con el periodista Gonzalo Altozano— una anécdota de sus primeros encuentros con Iván Espinosa de los Monteros, que por entonces no era "de los suyos, pero lo sería". Ese capítulo comienza exponiendo: "Que te den de lado tus enemigos no duele; duele que sean los tuyos los que lo hagan".

Abascal tenía un juicio contra unos etarras por su etapa en el Ayuntamiento de Llodio. "Mi primer recuerdo de él es una cena de profesionales del sector público y privado, todos cualificados e inconformistas. Al despedirnos me dijo que estaría conmigo el día del juicio y cumplió". La relación entre ambos se fraguó tras aquellos apoyos.

Llegó posteriormente la oferta de Santiago a Iván: ser vicepresidente de DENAES [Fundación para la Defensa de la Nación Española, también creada por Abascal y germen de Vox]. Antes de que Abascal lo pronunciara, sin embargo, Espinosa de los Monteros ya había entregado un cheque en blanco a su nuevo amigo: "Santi, te voy a decir sí a todo lo que me digas".

Esto llevó a Abascal a descubrir en su nuevo amigo una serie de características: "Pronto descubrí en Iván ausencia de reparos para ponerse detrás de una pancarta, vastísima formación, capacidad para el trabajo en equipo, dotes de mando, don de gentes, mucho mundo y una gran imaginación".

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Desde entonces, la relación había sido estrechísima. Espinosa de los Monteros y Rocío Monasterio, su mujer y Ortega Smith fueron durante años los escuderos más fieles a Abascal. Y las cuatro principales figuras de Vox en su irrupción, el Monte Rushmore del populismo de derechas. Surcaron juntos miles de kilómetros y obtuvieron algunos logros, como la primera sorpresa en las andaluzas o haber conseguido 52 parlamentarios en la Cámara Baja en noviembre de 2019. 

La relación entre ambos no había dado muestras públicas de su debilidad, pero la influencia de Espinosa en el partido había ido en declive en los últimos tiempos. La lapidación del sector más liberal y cercano al ahora exportavoz ponía de relieve que algo pasaba en un partido hermético de cara al exterior. 

El hasta ahora portavoz de Vox en el Congreso de los Diputados, Iván Espinosa de los Monteros.

El hasta ahora portavoz de Vox en el Congreso de los Diputados, Iván Espinosa de los Monteros. E.P.

Iván decidió dar un paso al lado tras dos meses casi sin hablar con Santi. Lo comunicó a sus compañeros por Whatsapp a las 9.56 horas del pasado 8 de agosto. Espinosa escribió un mensaje en el que exponía su orgullo de haber trabajado con Santiago Abascal y agradecía a los 52 de Vox su servicio. 

Durante la despedida se deshizo en muestras públicas de cariño. Ningún cabo suelto, nada malinterpretable, ninguna pulla, pura elegancia. Espinosa de los Monteros abandonaba la cúpula de Vox pero no el partido. "Nada de adioses, hasta pronto", le dijo el presidente de Vox a Espinosa de los Monteros vía Twitter, a pesar de no participar en '52 amigos', un gesto que, en realidad, significa mucho. Él mismo lo dijo: "Que te den de lado tus enemigos no duele; duele que sean los tuyos los que lo hagan".