Los tiempos cambian y cada vez es más frecuente encontrar a tu pareja por Internet o por cualquier tipo de red social o aplicación. Una cuestión que era impensable algo hace unos años, ya que no estaba socialmente aceptado como sí que lo está en la ahora. Aquellas personas que recurrían a aplicaciones para ligar con el objetivo de conocer gente se colocaban automáticamente en el punto de mira de los más críticos. Sin embargo, las cosas han cambiado. Y es que, según un estudio realizado por Statista, el negocio de las citas en Internet mueve más de 3.000 millones de euros al año.
Plataformas como 'Tinder' o 'Badoo' se han convertido en las más recurrentes. Aplicaciones que no son de extrañar si alguien se las encuentra instaladas en el móvil de un amigo. En España, dos de cada diez personas confiesan haber conocido a su pareja a través de Internet, según un estudio de Kaspersky. Y no solo eso. El 40% de los ciudadanos de nuestro país afirma usar o haber usado en alguna ocasión estas aplicaciones de citas 'online'.
Aunque normalmente están enfocadas a un público más joven, lo cierto es que estas aplicaciones están abiertas a cualquier persona. De hecho, con el paso de los años, han ido surgiendo nuevas plataformas que llegan, incluso, a enfocarse en un tipo de usuario concreto. Es el caso, por ejemplo, de la tercera edad. Aunque no estén familiarizados con las redes sociales, lo cierto es que hay un porcentaje de ancianos que sí las utilizan. Y es que, como dice el refrán, no hay edad para usar Internet. Ni tampoco para el amor. Y sino que se lo digan a Emilio y Liria, los protagonistas de esta historia.
Esta pareja de argentinos, de 90 y 83 años de edad respectivamente, se han viralizado en los últimos días tras haber confesado que se conocieron a través de Tinder. Los dos se vieron impulsados por sus familiares para hacer uso de estas plataformas con el objetivo de conocer gente nueva tras el fallecimiento de sus parejas. Sin embargo, nunca pensaron que a su edad pudieran llegar a encontrar al amor de su vida. Y no solo eso, sino que, además, al poco tiempo, llegarían incluso a contraer matrimonio.
La mujer de Emilio había fallecido hacía apenas un año. Una desgracia que provocó que este anciano de 90 años se fuese sintiendo cada vez más solo. Su nieta Sofía fue la encargada de animarle para que conociera gente nueva. Por ello, le ayudó a crearse un perfil en Tinder y poder encontrar así nueva compañía. "Le expliqué cómo funcionaba la aplicación y él más o menos lo manejaba cuando yo no estaba", explicó la nieta a un medio argentino.
[¿Cuánto dinero es correcto regalar si me invitan a una boda?]
Emilio tuvo dos hijos con su primera mujer y, tras separarse, se casó de nuevo con su segunda esposa, que falleció en 2022. Liria, por su parte, había tenido dos relaciones anteriormente. Con su primer marido tuvo cinco hijos y, con el tiempo, acabó divorciándose. El segundo falleció en el año 2014. Desde aquel trágico suceso, Liria se había cerrado al amor y no había querido conocer a nadie. A ella fue su hijo quien le animó a usar la aplicación. "Le propuse armar Tinder porque estaba sola y no salía tanto, entonces era una forma de suplir esas salidas", dijo él.
En la aplicación, Emilio encontró por sorpresa el perfil de Liria, una mujer de 83 años que impresionó a Emilio con sus fotografías. Ambos hicieron 'match' y fue así como empezaron a intercambiar mensajes y llamadas telefónicas que acabaron con una cita. Liria fue a ver a Emilio y este le invitó a un asado. "Yo creo que fue así como la conquisté" aseguró él mismo.
La relación poco a poco iba avanzando y la pareja se fue dando cada vez más cuenta de que estaban hechos el uno para el otro. Su atracción llegó hasta el punto de que Emilio le propuso a Liria irse a vivir juntos y esta aceptó. Tras varios meses, él acabó pidiéndole matrimonio a ella y, el pasado mes de julio, ambos celebraron su enlace en Villa Carlos Paz, en Córdoba.
"Ahora le tenemos que desinstalar la aplicación", comentó la nieta de Emilio entre risas. "Cuando apareció Liria con sus fotos en la nieve o en la playa, él dijo: ‘Ah, qué linda mujer’", aseguró la joven.
"Concordamos en muchas cosas. A los dos nos gusta salir, el baile y la música. Entonces, pensé que estaría bueno probar. A mí no me gusta estar solo. Mis hijos tienen su vida y no quiero interrumpir", aseguró Emilio. Misma opinión que la de Liria, que también confesó que lo que más le gusta de su relación con su ya marido es que ambos comparten los mismos gustos.
"En la vida me han pasado muchas cosas. Les digo a los chicos que las cosas pasan porque tienen que pasar. Hay que hacer el duelo y seguir porque queda la familia y la vida continúa", añadió a un medio local argentino. Ahora, la pareja tiene un objetivo claro. Y es que, tras haber demostrado que no hay edad para el amor, la pareja se encuentra ahora ahorrando para poder irse a disfrutar de su ansiada luna de miel.