Josefa Bravo ha perdido la vida a los 96 años por el ataque de dos perros potencialmente peligrosos. La noticia ha conmocionado a los cerca de 10.000 vecinos del pueblo murciano de Alguazas porque el Ayuntamiento ha informado de que los canes son una pareja de hembras y a pesar de ser un cruce de American Staffordshire Terrier y American Bully, carecían de microchip, no estaban censados en el Consistorio y no tenían al día sus vacunas. Además, su propietario tampoco contaba con licencia para perros potencialmente peligrosos ni seguro de responsabilidad civil.
Como guinda a este trágico despropósito, la anciana fue atacada por las dos perras cuando supuestamente estaban sueltas y sin bozal: algo que el Ayuntamiento también recuerda que está prohibido por la ley de Bienestar Animal y la ordenanza municipal. La pobre Josefa Bravo se encontraba este martes cerca de su casa, en la pedanía de El Paraje, donde se ubica la ermita de Alguazas, cuando estas dos hembras, de solo ocho meses cada una, presuntamente se escaparon de la vivienda de su dueño y mordieron a la mujer por todo el cuerpo, incluso por la cara.
"Las perras se escaparon de la casa de su amo y atacaron a la mujer por sorpresa, cuando estaba en la calle dándole de comer a unos gatos", tal y como confirman fuentes del Ayuntamiento de Alguazas. El dueño de las dos cachorras, J. M., un joven, de 24 años, no se encontraba en la vivienda cuando se produjo el ataque. De hecho, el padre del veinteañero y su pareja fueron los que se ocuparon de tranquilizar a las dos hembras porque al llegar al domicilio de J. M. se encontraron a los canes encarnizados con Josefa Bravo. "Ellos fueron los que lograron calmar a las perras para meterlas en la casa y que la ambulancia pudiese intervenir".
Josefa Bravo ingresó de urgencia en el Hospital Morales Meseguer de Murcia, pero este sábado falleció a causa de la gravedad de sus lesiones: "Le partieron el radio del brazo izquierdo, la cara la tenía deformada y llena de mordiscos". La muerte de esta anciana ha provocado una oleada de indignación entre los vecinos de Alguazas, no solo por las circunstancias en las que ha perdido la vida, sino porque además era una mujer muy querida en el pueblo: "En su juventud era conocida por ejercer de matrona en la pedanía de El Paraje y por leerles cuentos a los niños en la plaza".
Los comentarios de indignación bullen por las redes sociales. Valga como ejemplo lo que dice María Dolores en un grupo de Facebook de Alguazas: "Todos los perros atados por la calle, siempre, no es un deber, es una obligación, pero algunos dueños no lo han entendido todavía y se excusan diciendo 'que no hacen nada' hasta que lo hacen. Por favor, responsabilidad".
Lo mismo opina Adelaida, otra vecina de Alguazas: "Es muy lamentable y muy triste lo que ha sucedido, deberían endurecerse las sanciones y no dejar pasar ni una. Al igual que se sanciona a propietarios de perros y gatos que no llevan el microchip, deberían sancionar a los dueños de razas peligrosas por no ir sujetos con correa ni llevar bozal. Todos los días se ven perros pastor alemán, pit bull o dóberman que van sueltos con sus dueños".
El alcalde de Alguazas, José Gabriel García, ha asegurado que es "inadmisible" el ataque de las dos perras, con cruce de American Staffordshire Terrier y American Bully, que se ha cobrado la vida de Josefa Bravo. El regidor también ha lamentado que "la irresponsabilidad de unas personas en el cumplimiento de las normas sobre la tenencia de animales han provocado un daño que es irreparable".
Al margen de la investigación que ha abierto la Guardia Civil, el alcalde, José Gabriel García, explica a EL ESPAÑOL que ya "se han tomado medidas" contra J. M., de 24 años. Este joven es el dueño de las dos cachorras de ocho meses que supuestamente perpetraron el ataque mortal de Josefa y de otras dos hembras halladas en su casa en la misma situación irregular: "Carecían de microchip, no estaban censadas en el Consistorio, no tenían al día sus vacunas y tampoco contaban con licencia para perros potencialmente peligrosos ni seguro de responsabilidad civil".
El regidor detalla que "desde el Ayuntamiento se le ha abierto expediente sancionador porque se han cometido seis infracciones por cada una de las cuatro perras de raza potencialmente peligrosa que tenía en su casa. Con la nueva ley de Bienestar Animal, estamos hablando de multas que pueden llegar hasta los 200.000 euros por cada una de las cuatro hembras". Las dos crías de ocho meses que arrebataron la vida a bocados a Josefa Bravo ya se encuentran en un centro de zoonosis de Mazarrón, donde permanecerán como mínimo 21 días.
"También estamos investigando si el dueño de las perras se dedicaba por su cuenta a la crianza de este tipo de animales porque tenemos indicios de ello, al haberse encontrado otros dos ejemplares de la misma raza en su casa, por lo que de llegar a demostrarse sería otro hecho sancionable", según advierte el alcalde.
La Guardia Civil podría atribuirle un delito de homicidio por imprudencia al dueño de las perras, J. M., de 24 años, cuyas mascotas se escaparon de su casa de huerta en El Paraje, a pesar de contar con un vallado perimetral, arrebatándole la vida a Josefa: una mujer que a sus 96 años estaba muy bien de salud, incluso era habitual verla haciendo sola la compra, paseando o dándole de comer a los gastos de la zona.
La muerte de esta anciana se produce solo siete días después de que una joven, de 27 años, perdiese la vida tras ser atacada por varios canes de pastoreo en Zamora. Este domingo se llevó a cabo su entierro en el que se vivieron muestras de mucho dolor entre sus familiares, por tan injusta pérdida. Este lunes, a partir de las 12 horas, el Ayuntamiento de Alguazas ha convocado un minuto de silencio en la puerta del Consistorio en recuerdo de Josefa Bravo.