Fran Ortuño, la promesa del Valladolid que factura 60 M con sus 4 empresas: vende aceite a Emiratos
El prometedor defensa prefiere debutar en Primera División antes que una de sus empresas pegue un pelotazo como Amazon: "El fútbol es mi pasión".
6 julio, 2024 09:01Francisco Ortuño Ávalos sacó un 12,5 en la madre de todos los exámenes: la EBAU, siendo sus asignaturas favoritas las Matemáticas y la Física. Tal dato pone de manifiesto que este jiennense iba a tener proyección ya fuera en el mercado laboral o dentro de los terrenos de juego, para hacer valer la máxima que preside su perfil de Instagram: 'Que nada, ni nadie te detenga'. De hecho, con 21 años ya alterna los exigentes entrenamientos en el Real Valladolid Promesas, con sus estudios universitarios y la gestión de cuatro empresas con sede en Dubái con las que este prometedor defensa detalla que factura "entre 20 y 60 millones de euros" al año.
"Estoy ganando más que de futbolista, pero el fútbol es mi pasión: me encanta y por eso lo sigo haciendo. La gente se ríe, pero las empresas son mi hobbie: me sirven para desconectar del fútbol porque si estás pensando todo el día en el fútbol estás liquidado", tal y como advierte el zaguero, con el temple propio de un experimentado empresario, en una entrevista que concede a EL ESPAÑOL | Porfolio. "Las empresas me sirven para crear relaciones y tener muchos contactos".
PREGUNTA.– ¿Usted es muy maduro para tener solo 21 años?
RESPUESTA.– Al fin y al cabo, yo salí de casa con 17 años. O te acostumbras o vuelves temprano.
Ortuño en los terrenos de juego y Fran para los amigos, nunca ha dejado de formarse ni de estudiar ni ha perdido la ambición. Jamás ha caído en el error de relajarse en las mieles del fútbol, a pesar de que con solo 17 años ya había firmado su primer contrato profesional con el Marbella FC donde militaba una leyenda del balompié que vivía su ocaso: Esteban Granero, conocido como 'El Pirata', y que triunfó en la medular del Real Madrid, el Getafe o la Real Sociedad.
Así se anunciaba en Radio Marca, en el mes de agosto de 2020, el fichaje de este futbolista con edad de jugar en competiciones de categoría juvenil y por el que pagaron 12.000 euros: "El Marbella Fútbol Club ha llegado a un acuerdo con el Real Jaén para la incorporación en propiedad del jugador Francisco Ortuño, quien se compromete con la entidad marbellí hasta el 30 de junio de 2023".
"Ortuño (Jaén, 17 de julio de 2002) es lateral izquierdo y uno de los grandes talentos de la cantera del Jaén. Destaca por su capacidad física y exquisito golpeo de balón. La pasada temporada jugó con el club jiennense en Tercera División y fue titular en el play-off de ascenso a Segunda División B".
Cuatro años después de haberse marchado de casa, siendo solo un menor de edad, dejando atrás a su familia y a sus amigos, para cambiar Las Fuentezuelas, un barrio al oeste de Jaén, por la opulencia que suele proyectar Marbella a través de Puerto Banús, este joven zaguero sigue demostrando que tiene la cabeza tan bien amueblada como el mismo día que hizo la maleta para iniciar su carrera en el mundo del fútbol profesional. "Ahora mismo estoy estudiando Ingeniería Mecánica", según explica Fran Ortuño.
"En cuando terminé Bachiller, me metí en la carrera y comencé en la Universidad de Málaga porque coincidió con mi fichaje en el Marbella, pero al no poder compatibilizar los entrenamientos con las clases me cambié a la UNIR [Universidad Internacional de La Rioja] para hacerlo todo a distancia".
Esta no es la primera vez que Fran tiene que buscarse la vida para no perder comba con los libros mientras se deja la piel entrenando. "Cuando estudiaba segundo de Bachiller no iba a clase por las mañanas porque entrenaba con el Real Jaén y es verdad que en el Colegio Maristas me lo facilitaron mucho: iba a primera hora, luego me marchaba a entrenar, regresaba a última hora de la mañana a clase, estudiaba por las tardes…", tal y como recuerda este veinteañero. "Lo que me gusta son los números. Mis asignaturas preferidas en el instituto eran Matemáticas y Física".
P.– ¿Por qué motivo le gustaban las materias que suelen ser las más temidas entre los estudiantes de Secundaria?
R.– Las asignaturas que suelen ser de empollar, como Historia o Lengua, no me gustan porque básicamente consisten en estudiar de memoria.
P.– ¿Cómo lleva la carrera de Ingeniería Mecánica teniendo tanto entrenamiento entre semana, partidos de liga cada fin de semana y cuatro empresas que dirigir?
R.– Me quedan unas 20 asignaturas. Cada curso me suelo matricular de seis asignaturas. Estudio por la mañana un par de horas porque suelo madrugar, luego me voy al entrenamiento, y por las tardes me dedico a mis empresas.
P.– ¿Es cierto que a los 16 años ofrecía consejos sobre compras, ventas, inversiones y marketing digital?
R.– Sí. La primera empresa que tuve iba de marketing digital. Básicamente, cogía a futbolistas o a clubes de fútbol para llevarles la gestión de las redes sociales, los carteles para el día del partido, los vídeos de los mejores momentos del encuentro…
P.– ¿De dónde le viene ese instinto empresarial siendo tan joven?
R.– Nace de la curiosidad. Siempre he sido independiente y me ha gustado investigar. Con el tema del fútbol he podido conocer a mucha gente. En esa primera empresa, tenía otro socio que era el editor, se llamaba Míchel, llevaba las redes sociales del Real Jaén y le conocí en mi etapa de jugador en el club en el que me he formado desde niño.
Después de fichar por el Marbella, seguí manteniendo el contacto con Míchel porque yo le llevaba varios clientes al mes: a lo mejor alguien me preguntaba cómo hacer vídeos de los highlights; alguien tenía una partido importante y quería diseñar un cartel para subirlo a las redes sociales, o necesitaba asesoramiento para gestionar las redes… Entonces nació la oportunidad.
Lo analicé y pensé que podría ser una buena opción montar una empresa: yo gestionaría los clientes y Míchel editaría el contenido. Además, en ese momento, yo estaba en el Marbella donde había futbolistas que habían jugado en Segunda División y eso nos podía servir como un buen escaparate. Incluso a algunos de los jugadores no les cobrábamos porque tener su imagen en nuestra agencia nos permitía captar más clientes.
Aquella primera aventura empresarial fue rentable a todo los niveles porque vendió la firma "por cerca de 100.000 euros", hizo una buena agenda de contactos y adquirió experiencia para emprender nuevos proyectos empresariales. "Ahora tengo cuatro empresas y a Míchel lo sigo teniendo como director de marketing", tal y como subraya Francisco Ortuño Ávalos, en el mundo empresarial, o Fran Ortuño, para la prensa deportiva.
En la actualidad, este defensa del Real Valladolid Promesas, de 21 años, y con un valor en el mercado cifrado en 100.000 euros por el portal Transfermarkt, acapara titulares en los medios de comunicación tanto por lo que hace dentro como fuera de los terrenos de juego. De un lado, esta temporada, su presencia en la zaga ha sido clave para que el filial del equipo pucelano mantenga la categoría en Segunda RFEF, y por otro lado, tiene cuatro empresas que van como un tiro en sectores tan dispares como el comercio digital o los fondos de inversión.
Pocos futbolistas lucen en su perfil de Instagram un currículo empresarial como el de Ortuño: CEO en Ecommboost o CEO de Escala tu tienda, expertos en comercio de bienes y servicios en Internet que ayudan a otros emprendedores a crear sus negocios digitales o a hacerlos crecer.
Ver esta publicación en Instagram
P.– Hábleme de las cuatro empresas que ha montado...
R.– La primera nació del tema del sector del e-commerce y empecé a diversificar. De ahí surgió la idea de crear la academia de formación para enseñar a alumnos a crear sus propias tiendas on line y a diversificar sus ingresos. Luego comencé con la empresa de exportación de aceite en grandes cantidades y venta de botellas de aceite que son exclusivas para los Emiratos Árabes. El aceite, por supuesto, es de Jaén, de olivos del pueblo de Martos.
La otra empresa es de asesoramiento en inversiones en países emergentes en inmobiliarias, en start-ups, en fondos… Le hacemos un estudio al cliente, para conocer su capital disponible, los sectores que le interesan y en función de sus condiciones le aconsejamos dónde invertir.
P.– ¿Tiene entre sus clientes a algún crack del fútbol, algún actor, actriz, modelo o cantante famoso?
R.– Eso nunca se revela. Tengo clientes de todo tipo. Todo el mundo quiere invertir.
P.– ¿La sede de sus empresas está en Dubái por temas fiscales?
R.– Mis socios están allí. Tienen residencia física en el país durante 168 días y eso me permite estar en España y tener las empresas en Dubái. La gente habla sin saber.
P.– Fran Ortuño, jugador de fútbol por la mañana y empresario por la tarde. ¿Considera que rompe el arquetipo del futbolista que conduce un deportivo, tiene una novia modelo y se va de vacaciones a Ibiza?
R.– No. A todo el mundo le gusta ese tema y el que diga que 'no', te está mintiendo. No he venido a romper nada. Pero si a alguien le sirvo de inspiración... Eso de que al margen del mundo del fútbol no se puede hacer nada más, solo es un mito. Puedes jugar al fútbol, estudiar y montar tu empresa porque siempre hay tiempo para todo.
P.– Después de vender la primera empresa que montó. ¿Usted se ha formado de manera específica para emprender el resto de sus proyectos empresariales?
R.– He pagado por hacer mentorías con empresarios que tienen grupos empresariales que facturan muchos millones de euros. He pagado por formarme con ellos.
Uno de los mentores de Fran Ortuño es el tinerfeño Mani Thawani: creador de la empresa MundoCrypto, conocido como el 'rey español de las criptomonedas', y que se llevó su firma del país porque consideraba que la regulación estatal era "restrictiva". De modo que optó por instalarse en Dubái donde fue elegido Emprendedor Cripto del Año en los premios Leaders In Fintech Awards 2022.
P.– ¿Qué ha aprendido del rey español de las criptomonedas Mani Thawani?
R.– A día de hoy sigo con Mani. Me ha enseñado a tener una estructura empresarial estable y a saber gestionar un equipo, para que yo siga con el fútbol y la empresa siga funcionando sin la necesidad de estar presente el cien por cien del tiempo, para evitar los principales errores que se cometen y estancarme en la facturación.
P.– ¿El mundo del fútbol y el de la empresa tienen algo en común?
R.– La disciplina y el esfuerzo.
P.– ¿Otros futbolistas le piden consejo para invertir viendo el tino que tiene usted con sus cuatro empresas?
R.– Muchos de ellos son curiosos y preguntan. Hay otros que no les llama la atención salir de su zona de confort.
P.– ¿De dónde le viene su devoción por la pelota?
R.– Mi padre jugaba al fútbol en equipos de la provincia de Jaén. De ahí nace mi pasión y a los 5 años empecé a jugar. Comencé en el Real Jaén de benjamín y estuve hasta juveniles.
P.– ¿Siempre ha jugado de defensa central?
R.– No, yo era lateral izquierdo, pero por diferentes circunstancias, tanto en el Marbella como en el Linares he jugado de central. La verdad es que me gusta jugar en las dos posiciones.
Fran con tal de entrar en el once titular es capaz de sacrificarse en cualquier tarea defensiva porque se ha educado en la cultura del esfuerzo que le han inculcado sus padres, Francisco y Araceli, durante su infancia en Jaén, siguiendo la estela de sus dos hermanas mayores, las cuales estudiaron Derecho y Administración y Dirección de Empresas.
"Mi hermana mayor, Marta, de 32 años, me gestiona las cuentas en mis empresas y a mi hermana mediana, Patricia, de 29 años, la estoy intentando convencer, pero no es tarea fácil", apunta este emprendedor de éxito.
P.– ¿Qué le dicen sus padres sobre su precocidad empresarial o sus hermanas que han estudiado la carrera de Administración y Dirección de Empresas?
R.– Mis padres me dicen que tenga cuidado y que mire dónde invierto. Se preocupan cuando me ven muchas horas encerrado hablando con gente, pero eso es normal. Mis hermanas me aconsejan que esté seguro de cada decisión que tomo y que vaya despacio a la hora de crecer empresarialmente.
P.– ¿Fue muy duro hacer la maleta con 17 años para empezar a vivir sin su familia en Marbella?
R.– Sí porque estaba con mis padres y con mis amigos y los primeros años universitarios son los mejores, pero no los pude vivir. Fue duró dejar mi casa, aunque me adapté rápido. Siendo juvenil firmé un contrato profesional y el club me tenía preparado un piso compartido con un compañero: un jugador de Panamá de 22 años. La verdad es que nos complementamos muy bien.
En aquella temporada estaban vigentes las restricciones por la pandemia de coronavirus, de modo que Fran, con 17 años, tuvo que encadenar más de seis meses en los que solo tuvo contacto con sus padres a través de videollamadas. "Eso fue lo que más me costó", tal y como admite.
Pero ni la distancia de su familia ni su juventud le pasaron factura sobre el césped porque tuvo la suficiente fortaleza mental, como para terminar haciéndose en solo tres temporadas con el brazalete de capitán de un club histórico como el Marbella FC, con el que ascendió a Segunda RFEF, en su última temporada luciendo la elástica blanca. "Dentro del terreno de juego no conozco a nadie", según advierte. "Me caracterizo por mi genio, por hablar y comunicarme mucho con mis compañeros".
El capitán marbellí Ortuño tenía 20 años y el futbolista más veterano de aquella plantilla era Carlos de Lerma, apodado 'El Puma de Lerma', con 36 años y muchas batallas sobre el césped, defendiendo los colores del CD Leganés, Levante UD, Albacete, Nastic, FC Cartagena, Hércules de Alicante... En la actualidad, 'El Puma de Lerma' es el segundo entrenador del Marbella y mantiene un vínculo especial con Fran porque le ayudó a forjar su fuerte personalidad futbolística que también se refleja en el mundo empresarial. "Lo considero como si fuese mi padre, todos los días le llamo para hablar con él y en vacaciones voy a verle".
El defensa Ortuño, antes de aterrizar esta temporada a la zaga del Real Valladolid Promesas, tuvo la oportunidad de fichar por el Linares Deportivo, el enemigo histórico del Real Jaén, el club donde se ha criado futbolísticamente, y este veinteañero volvió a demostrar que tiene personalidad y la mentalidad fría de un empresario ante una buena oportunidad, ya que su pasado deportivo no le hizo temblar el pulso. Fran firmó con el club azulillo y subrayó que era "un gran proyecto" durante su presentación como nuevo jugador de la plantilla.
R.– ¿En Jaén le han perdonado ya que jugase en el Linares porque eso es como irse del Sevilla al Betis o viceversa?
R.– Algunos sí y otros no, pero imagino que con el paso del tiempo me irán perdonando poco a poco. Menos mal que no me tiré mucho tiempo.
- ¿Qué le dijeron cuando fichó por el Linares después de tres temporadas en el Marbella?
R.– De todo: 'chaquetero', 'rata'… Pero al fin y al cabo, en el fútbol tienes que acostumbrarte a estas cosas. El tema se disparó en las redes sociales donde es verdad que sacaron muchos memes. El fichaje dio mucho juego en Twitter porque recuerdo que cogieron una foto mía, besando el escudo del Jaén, siendo cadete de segundo año, en un partido en categoría autonómica que disputé contra el Granada y donde metí un gol.
Esa foto la tenía borrada y a los dos minutos de anunciar mi fichaje con el Linares Deportivo sacaron por redes sociales esa imagen mía, besando el escudo del Real Jaén. Eso lo tenían preparado: madre mía…
P.– ¿Qué consejo en su vida deportiva le ha marcado también para emprender negocios?
R.– Cuando llegué al Marbella, Esteban Granero 'El Pirata', me decía: 'Trabaja y sigue esforzándote que llegará la recompensa'. Era una persona muy cercana, se portó muy bien conmigo desde el primer día y todavía mantengo relación con Esteban.
P.– ¿Y qué consejo le daría usted a un emprendedor?
R.– Primero que se forme sobre el sector en el que quiera invertir y luego que sea valiente para tomar una decisión, tras haber estudiado bien la actividad que va a emprender. Cada negocio que arranques no te va a ir bien al mes o al año, a lo mejor necesitas dos años. No hay que rendirse a la primera.
Fran predica con el ejemplo porque este verano solo tendrá una semana de vacaciones antes de comenzar la pretemporada con el Real Valladolid Promesas el próximo 14 de julio. "Me gustaría estar de vacaciones hasta que empiece la pretemporada, pero tengo que mantener reuniones". A veces en Marbella, otras en Mallorca, o en Emiratos Árabes, y a cada rato, pegado al móvil 24-7. Cuando comience la competición liguera retomará el horario de siempre: "Por las mañanas, entrenamientos de 10 a 13.30 horas, y el trabajo empresarial, de tres de la tarde a diez de la noche".
P.– ¿Tiene previsto iniciar un nuevo proyecto: el quinto de su carrera como uno de los empresarios más jóvenes del país?
R.– Algo hay entre manos. Todavía no está definido, pero hay ideas. Falta mantener algunas reuniones. Es una cosa relacionada con el deporte a nivel internacional.
P.– ¿Cree que su juventud le lastra en los negocios porque otros empresarios o posibles inversores ven que solo tiene 21 años?
R.– A día de hoy no. Es verdad que al principio, cuando hablaba con alguien que tenía 50 o 60 años, le impactaba un poco mi edad, pero ya me conocen y saben cómo me muevo.
P.– ¿Qué prefiere: llegar a debutar en Primera División o dar un 'pelotazo' con alguna de sus empresas en plan Amazon?
R.– Prefiero el fútbol profesional porque al fin y al cabo, empresas como esa solo hay una. El que piense que abrirá una empresa como Amazon está muy equivocado. Elijo tener una larga carrera en el fútbol profesional porque una empresa la puedes tener aunque estés jugando la Champions League. Me encantaría debutar con el Real Valladolid.