"Acabada Baron Noir", ha escrito Pablo Iglesias en su cuenta de Twitter. "No son tiempos quizá para hablar de series, pero esta es una obra maestra que me encantaría trabajar con estudiantes de políticas. Gracias por la recomendación, Pedro Sánchez". Revela así el vicepresidente la serie que le ha tenido enganchado en sus pocas horas libres en estos tiempos difíciles y de encierro, cuando muchos han aprovechado para refugiarse en la cultura para aliviar el confinamiento.
Baron Noir es un thriller francés de tres temporadas y 24 episodios que aborda la epopeya política y judicial de Philippe Rickwaert (Kad Merad), teniente de alcalde de Nord del Partido Socialista francés, "impulsado por una sed incontenible de revancha social", como puede consultarse en FilmAffinity.
La historia recorre el período comprendido entre las dos vueltas de las elecciones presidenciales: ahí Rickwaert ve su futuro político en peligro cuando su mentor, el candidato de la izquierda, lo sacrifica para salvar su elección -muchos de los adeptos de esta ficción han buscado similitudes entre la trama y el presidente y vicepresidente del Gobierno: ¿recuerdan aquel "no" no tan lejano de Iglesias a Sánchez que acabó provocando que fuésemos de nuevo a las urnas...?"-.
El protagonista no lo soportará y comenzará a tomar decisiones salvajes a fin de vengarse de los que le han traicionado. Entre otras cosas, estrechará lazos con el asesor más cercano a su enemigo para intentar hundirle. La trama retrata bien cómo es fundamental para el éxito cultivar amistades en todos los estratos de la sociedad -desde la policía al crimen organizado- y cómo las verdades y las mentiras se confunden más de lo que parecen.
Esta ficción de HBO, protagonizada por Anna Mouglalis, Astrid Whettnall, Hugo Becker y Kad Merad, escruta esa red sofisticada de falsedades, escándalos, venganzas, financiaciones ilegales y corrupciones que tan bien retratan el lado más oscuro de la política. ¿Qué conclusiones habrán sacado Iglesias y Sánchez al verla?
The Guardian la ha definido como "una mezcla perfecta de 'House of Cards' y 'The Sopranos' (...) En una época en la que las motivaciones de los políticos son más dudosas que nunca, 'Baron Noir' nos permite adentrarnos en sus cabezas".