El verano es la temporada en la que se estrenan las grandes producciones de los estudios estadounidenses pero esta vez la temporada estival ha golpeado sus salas con las peores cifras en 16 años. Por segunda semana consecutiva las salas norteamericanas se hunden hasta casi tocar el suelo.
La taquilla estadounidense se desmorona en el último fin de semana de agosto con las peores cifras de recaudación taquillera desde septiembre de 2001. Según los datos del portal Box Office Mojo las doce películas más exitosas ingresaron un total de 41 millones de euros, que sería la recaudación más baja desde los 36,5 millones registrados el fin de semana después de los atentados del 11S en el país americano.
Los malos números coinciden con el gran éxito de Juego de Tronos y el mejor día para HBO. El último capítulo de su séptima temporada batía récords y conseguía 16 millones de espectadores en la noche del domingo. Las expectativas con ‘El dragón y el lobo’ se cumplieron y superaron cualquier registro de audiencia previo. Aún no se han sumado los espectadores del capítulo a lo largo de la semana pero los primeros datos ya lo han convertido en el mejor estreno de la serie viral.
HBO se alza como vencedora
Las salas de cine llevan tiempo luchando contra el fenómeno de las plataformas de consumo online pero parece que siguen sin conseguir vencerlas. Los portales de pago se están imponiendo, el consumo de películas y series online ha aumentado un 13% desde 2001 mientras que el cine sólo alzanza los picos de asistentes con algunos de los grandes estrenos.
Este viernes debutaba en la gran pantalla Ballerina que se colgó la medalla de bronce en su primera semana en la gran pantalla al sumar 4,1 millones de euros. Y se confirmaba el éxito -no suficiente- de El otro guardaspaldas (Patrick Hughes) que por segunda semana consecutiva se impuso en la taquilla al lograr 8,3 millones.
Mientras el cine se retuerce entre la lucha y la búsqueda de una fórmula perfecta para volver a ser el soberano audiovisual, HBO y Netflix se adelantan hasta convertirse en la forma de consumo preferentes.
Las salas, cuesta abajo
Desde el estreno de Dunkerque (Christopher Nolan) las salas de Estados Unidos no han visto una buena cifra, el mes de agosto se ha coronado como la temporada baja de este año con pocos estrenos de renombre y sin ninguna atracción hacia los espectadores.
En HBO ni las filtraciones, ni el hackeo han conseguido acabar con el fenómeno que rodea a la adaptación de la saga literaria de George R.R. Martin. Una situación que se alarga en el tiempo y que choca con la crisis de la taquilla cinematográfica.