El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha escrito a la vicepresidenta de Netflix para Europa, África y Oriente Próximo, María Ferreras, para pedirle que "empatice con los sentimientos de las víctimas" del terrorismo y "comprenda los motivos de la polémica" que ha generado la nueva campaña publicitaria de la productora por los carteles de la película Fe de etarras.
El titular de Interior escribe a la ejecutiva en relación los carteles para promocionar la cinta y en los que se puede leer 'Yo soy español, español, español', con los tres gentilicios tachados por una línea roja. "El anuncio nos parece de muy mal gusto, y además lo han colocado en un sitio donde a 300 metros ETA asesinó a 5 personas", señaló el presidente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Alfonso Sánchez, tras conocer la campaña.
En la misiva, a la que ha tenido acceso Europa Press, el ministro manifiesta su respeto a la libertad de expresión pero le recuerda a Netflix que "los medios tienen una responsabilidad social" y deben asegurar "un tratamiento digno" a las víctimas del terrorismo, algo que aparece contemplado en la Ley de Reconocimiento y Protección Integral a las Víctimas.
Resulta una evidencia que esta campaña publicitaria, que es difundida incluso en calles junto a las que fueron asesinadas varias personas en atentados terroristas, ha herido la sensibilidad de las víctimas
"Resulta una evidencia que esta campaña publicitaria, que es difundida incluso en calles junto a las que fueron asesinadas varias personas en atentados terroristas, ha herido la sensibilidad de las víctimas", lamenta el Zoido, que subraya que los medios "no pueden limitarse a ser una herramienta de entretenimiento".
Además, señala que el riesgo de "banalizar el terrorismo" para "llamar la atención", aún cuando se trate de una campaña publicitaria, puede provocar la difusión de "una visión distorsionada y un relato equivocado del pasado". "Es necesario contar con una visión crítica del terrorismo y que se visibilice el daño que causa en una sociedad", argumenta.
En todo caso, hace hincapié en que su petición se circunscribe a la crítica de la campaña publicitaria y no de la película que anuncia, puesto que "no sería lógico" criticarla antes de haberla visto. Asimismo, señala que el objetivo de la carta no es "reclamar ninguna medida" acerca de la campaña publicitaria y cree que "no es él quien debe determinar" si es necesario adoptarla. "Ése es únicamente el objetivo de este escrito, apelar a su sensibilidad", asegura.