El productor Harvey Weinstein, acusado por decenas de mujeres de violación, abuso y acoso sexual, se ha entregado en una comisaría de Nueva York para ponerse a disposición de la Justicia por los cargos de abusos sexuales levantados contra él. Weinstein llegó hacia las 7.27 hora local (11.27 GMT) a la comisaría número 1 del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) para cumplir con el procedimiento de registro y con el fin de que le tomen la foto y las huellas dactilares, según ha informado la agencia EFE.
La información había sido avanzada por The New York Times, que ayer ya daba por hecho que el productor se pondría en disposición de las autoridades judiciales a raíz de una causa abierta en su contra por la Fiscalía de Manhattan, una de las que han iniciado pesquisas sobre el tema. La Policía de Nueva York ha confirmado que Weinstein se enfrenta a cargos de violación y abusos sexuales, entre otros.
El productor de Hollywood, caído en desgracia por estas denuncias, quedó arrestado y después de que se cumpliera con el registro policial salió de la comisaría con las manos esposadas a la espalda y sonriendo ante los periodistas rumbo a la corte penal de Manhattan. Allí declaró ante el juez Kevin McGrath, quien lo dejó en libertad tras imponerle una fianza de 10 millones de dólares (8,5 millones de euros), de los que ha tenido que pagar uno en efectivo. La cifra es mucho más alta de los dos millones que se especulaba que había pactado con el fiscal Cyrus Vance. Además ha tenido que entregar su pasaporte y llevará un brazalete electrónico.
Benjamin Brafma, el abogado de Weinstein, ha insistido en una comparecencia a la salida del tribunal que su cliente se declarará no culpable de los cargos contra él cuando se conozca la acusación oficial. "Siempre ha mantenido que cualquier actividad sexual fue consensuada", ha señalado el letrado. Según Brafman, durante el proceso se demostrará que la Fiscalía no tiene "pruebas sólidas" que puedan llevar a su condena ya que las acusaciones contra él "no están apoyadas con hechos ni evidencias", por lo que está seguro de que "al final del proceso, será exonerado".
Origen del #MeToo
Desde que surgieron este jueves las primeras informaciones sobre la decisión de Weinstein de entregarse ante las autoridades se desconocía concretamente de qué sería acusado una vez quedara a disposición de la Justicia. El Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) confirmó que Weinstein quedó bajo arresto por los cargos de violación, delito sexual, abusos sexuales y mala conducta sexual por incidentes denunciados por dos mujeres por separado, según un comunicado.
Aunque en la nota no se da la identidad, puede tratarse de la actriz Paz de la Huerta, que denunció haber sido violada en 2010, y de la estudiante universitaria y aspirante a actriz Lucia Evans, que dijo haber sido obligada a practicarle sexo oral en 2004. La Policía de Nueva York "agradece a estas valientes supervivientes para presentarse públicamente y buscar justicia", agrega el comunicado. La nota fue difundida a la espera de que a lo largo del día Weinstein, de 66 años, comparezca ante el juez, aunque podría quedar en libertad bajo fianza.
Más de 70 mujeres han acusado al cofundador del estudio Miramax y Weinstein Co de abusos sexuales, incluyendo violaciones. Estas acusaciones se han transformado en el movimiento #MeToo a través del cual cientos de mujeres han denunciado publicamente haber sufrido abusos de hombres poderosos en los negocios, en las instituciones o en la industria del entretenimiento.
Weinstein ha negado haber mantenido relaciones sexuales no consentidas con alguna de estas mujeres. El productor se enfrentará a al menos una acusación, la de Lucia Evans, una aspirante a actriz que reveló a The New Yorker que Weinstein la forzó a mantener sexo oral en 2004, según informa el Daily News.