Leticia Dolera se encuentra en estos momentos rodando una seria para Movistar+, Déjate Llevar, una historia feminista que habla sobre tres mujeres que atraviesan una crisis vital con la que la intérprete y realizadora quería seguir apostando por la mirada feminista que había demostrado en libros como Morder la manzana y en su programa de radio, Tramas maestras.
Hace unos días este periódico explicaba que en aquel rodaje, una de las actrices, Aina Clotet, había sido despedida por estar embarazada, ya que esta tenía escenas de cama que según la responsable del proyecto no podía realizar una persona en estado de gestación. La noticia no fue desmentida por Aina Clotet, y en la visita de unos cuantos periodistas al rodaje de Déjate Llevar, Dolera explicaba que le dio “mucha pena que Aina no pueda estar aquí porque me pasé dos meses haciendo cásting y me costó encontrar a una actriz como ella que me gustara tanto. Y le dimos el papel, pero a los pocos días nos llamó para decirnos que estaba embarazada".
Contaba Dolera que esto ocurrió en junio y que ellos rodaban hasta el 30 de noviembre, "por lo que iba a estar muy embarazada en ciertas secuencias": "Eso imposibilitaba que interpretara este personaje en concreto estando embarazada. Si hubiera sido, por ejemplo, una monja y llevara el hábito, a lo mejor sí", comentaba.
Quería canalizar esta dura experiencia en buscar soluciones para evitar que las actrices embarazadas puedan sufrir la desprotección legal en la que yo me he encontrado
El problema, según la directora, es que el personaje que iba a interpretar Aina era Cristina, una mujer que "reconecta con su sexualidad" y que cuenta con "bastantes escenas de sexo": "Además, el diseño de vestuario va marcando más su figura y sus curvas a medida que avanza la serie. Ella no encajaba en este personaje concreto. Y quiero dejar claro que no tengo nada en contra de que trabajen mujeres embarazadas en la serie. ¡Al contrario! Ha habido dos actrices que está en el proyecto embarazadas. E incluso la directora de casting, que se ha puesto de parto a mitad de rodaje. Y una peluquera".
Ante estas explicaciones Aina Clotet, hasta ahora en silencio, ha salido al paso para explicar que ella ofreció varias posibilidades a Dolera para seguir con el rodaje, que además la pillaba en un estado no muy avanzada de gestación. Dobles de cuerpo, planos menos explícitos o justificar que el cuerpo de una mujer que ha sido madre no tiene por qué ser perfecto eran algunas de las ideas, pero las actriz no las aceptó y la sustituyó de la grabación esgrimiendo un problema con la póliza y la cadena que desde Movistar+ no conocían.
Clotet ha mandado un comunicado a la prensa en el que cuenta “que ha tardado en responder porque la situación me había causado mucho estrés y quería proteger mi estado gestacional”, también para que sus “declaraciones se percibiesen como un ataque a Leticia ni al proyecto” y en tercer lugar, “porque quería canalizar esta dura experiencia en buscar soluciones para evitar que las actrices embarazadas puedan sufrir la desprotección legal en la que yo me he encontrado”.
Si llegado el momento en que mi embarazo fuese visible, quedaran escenas pendientes de rodar, entendía que se podría recurrir a cualquiera de las técnicas que utilizamos de forma habitual en estas circunstancias
El rodaje estaba previsto para mediados de septiembre, y a mediados de julio la actriz comunica a Dolera que estaba embarazada “con la voluntad de ayudar a la producción y para que se puedan plantear la organización del rodaje teniendo en cuenta mi estado”. “Empezaba a rodar estando de poco más de 3 meses y medio (no entre 4 o 6 meses, como se ha publicado), por lo que entendí que, con una planificación adaptada, podría rodar la mayoría de mis escenas antes de que mi embarazo fuese perceptible. Si llegado el momento en que mi embarazo fuese visible, quedaran escenas pendientes de rodar, entendía que se podría recurrir a cualquiera de las técnicas que utilizamos de forma habitual en estas circunstancias, como adaptar el vestuario, ajustar planos de cámara, sugerir que el personaje, que ya es madre de dos niñas, no necesita tener un vientre completamente plano, usar dobles de desnudo puntuales, etc. Y así lo propuse”, dice Clotet.
“Entiendo que dicha adaptación suponía un esfuerzo para todo el equipo pero, como en el sector audiovisual es habitual adaptarse a todo tipo de imprevistos, asumí que la producción de una serie marcadamente feminista y que plantea la dificultad de ser mujer y madre en esta sociedad, consideraría todas las opciones para no excluirme solo por estar embarazada. Dos días después de comunicar la noticia, la directora me informa telefónicamente que no cree que puedan contar conmigo porque hay un problema con la póliza del seguro, que establece un coste altísimo para cubrir cualquier problema derivado del embarazo y que además ven complicado cambiar el plan de rodaje”, continúa en su comunicado.
La actriz se reúne con varias asociaciones que le confirman que los precios de las pólizas de seguro que cubren riesgos asociados al embarazo son elevados y que, ante estas situaciones, no existe un standard y depende de la voluntad de cada producción asumir la contratación de actrices embarazadas, como ya ha ocurrido en numerosas ocasiones, por lo que pidieron una reunión con Dolera y el productor en el que pidieron adaptar el rodaje y en el que hasta “puse a disposición mi salario para cubrir cualquier coste adicional que mi embarazo pudiese suponer a la producción. En esa misma reunión preguntamos si Movistar+, como plataforma que encargó el proyecto, estaba al corriente de la situación y nos responden que no. Solicitamos que se les informe y acordamos que así lo harían”. Dolera rechazó todas las opciones.
Movistar asegura desconocer la polémica, ya que, de haberlo sabido, hubieran volcado toda su voluntad para intentar evitar que esta situación ocurriera
Días más tarde, y a dos meses de empezar a rodar, se le comunica que, “definitivamente, es legal y artísticamente inasumible mi presencia en la serie”. Leticia, en compensación, “me planteó la posibilidad de interpretar un personaje capitular que decidí rechazar, no por el hecho de ser un personaje menor, como se ha dado a entender públicamente, sino por la gran sensación de desprotección que había sentido durante todo el proceso”.
Todavía quedaba otro asunto en el que Aina Clotet se sintió desprotegida, ya que Movistar+ nunca supo de la situación hasta ya haber sido apartada del proyecto como explica en su comunicado. “El equipo de Movistar+ nos trasladó que no tenían conocimiento alguno de la problemática existente con la póliza del seguro para embarazadas, ni de ninguno de los problemas económicos y de planificación esgrimidos por la productora para apartarme de la serie. Añadieron que, de haberlo sabido, hubieran volcado toda su voluntad para intentar evitar que esta situación ocurriera”, apunta la actriz.
“Creo que es necesario mostrar la otra cara de la moneda, la de la presión que tiene la mujer que se queda embarazada y tiene que decidir si esconde su embarazo para conservar el trabajo o lo explica para favorecer la organización del mismo, arriesgándose a perderlo. Yo opté por decirlo por lealtad al proyecto y perdí un trabajo importante para mi, así como otro trabajo que rechacé por formar parte de este. Creo, fervientemente, que ninguna mujer debería verse en la necesidad de ocultar algo así para proteger su carrera profesional y siento que es compromiso de todas y todos luchar por una sociedad justa y equitativa, que no reduzca las oportunidades de las mujeres en momentos tan cruciales como el embarazo o la maternidad”, zanja Aina Clotet, que una vez más se ha visto perjudicada por la decisión de ser madre.