La taquilla española llevaba unos meses triste y deprimida. Los estrenos que llegaban a pares se iban chocando contra los espectadores. Desde El gran verano de mi vida en plena época estival no había habido un pelotazo. Ha habido sorpresas, como El fotógrafo de Mauthausen, pero ninguna que arrasara como merecía.
Semejante panorama hizo hasta peligrar los 100 millones de recaudación que nuestro cine tiene como meta desde que se superaran hace cinco años. Todo iba viento en popa con el taquillazo de Campeones, que rozó los 19 millones de euros, pero se había atascado.
Ha tenido que llegar el superhéroe más cañí para solucionarlo. Superlópez llegaba como la producción más ambiciosa de Telecinco en 2018, y además lo hacía después de que el resto de sus propuestas no funcionaran. Ola de crímenes ha sido su peor estreno en años, y Yucatán se ha quedado a medio gas, así que había expectación. El resultado de la película de Javi Ruiz Caldera con Dani Rovira ha sido digno de un héroe.
Tras sólo diez días en taquilla el filme ya ha superado los 800.000 espectadores y los 4,7 millones de euros según datos de su distribuidora, y todavía tiene todo el puente y la navidad para caminar hacia los 10 millones que hace unos meses parecían complicados y ahora parecen una realidad.
Su estreno fue espectacular, con 2,4 millones de euros y el número uno de la taquilla, y en su segunda semana desciende en torno al 20% a pesar de tener en frente un rival como El Grinch, que ha conseguido su misma recaudación, 1,7 millones.
Con estas cifras ya es uno de los estrenos españolas más exitosos del año, y se espera que con las navidades se coloque como el segundo filme más taquillero, sólo detrás del fenómeno de Campeones, que acabará como uno de los pelotazos de este 2018 que ya termina.