La actriz catalana Monserrat Carulla ha fallecido este martes a los 90 años según han informado medios catalanes. Carulla era conocida como la gran dama del teatro catalán, aunque estaba retirada de los escenarios desde 2014, cuando dijo adiós desde el teatro Romea, el mismo lugar donde había debutado. Lo hizo con la obra La abuela, dirigida y escrita por su hijo Roger Peña, y junto su nieto, Aleix Peña.
Carulla también era la madre de la actriz Vicky Peña -que este año ha protagonizado el emotivo anuncio de la lotería de Navidad-, y su figura se popularizó gracias a las series de TV3. A pesar de retirarse del teatro, sí que siguió apareciendo en series como Nit i dia o Sé quién eres. Para el gran público también quedará en el recuerdo su pequeño papel en El orfanato, la ópera prima de Juan Antonio Bayona, donde tuvo un pequeño papel.
La actriz recibió muchísimos reconocimientos durante toda su carrera, y fue al recoger uno de los últimos galardones cuando dio un discurso que la colocaría en todas las portadas. Al recibir su Gaudí de Honor en 2013 comenzó su discurso diciendo: "Soy Montserrat Carulla, actriz, catalana e independentista. Mi independentismo no va contra nadie. Admiro la lengua y la cultura del pueblo español. La quiero al lado, como amiga, en libertad", añadió. En esa misma intervención confesó que su "sueño" era "ver mi tierra justa socialmente, próspera cultural y libre nacionalmente".
Montserrat Carulla nació en Barcelona el 19 de septiembre de 1930, y pronto encontró en la interpretación su forma de vida. Ya en los 40 empezó realizando teatro amateur, y a finales de la década empezó a formarse con varios cursos en el Instituto de Teatro de Barcelona. Pero fue en los 60 cuando su nombre empezó a hacerse un hueco en el mundo del teatro catalán gracias a obras como Soparem a casa, El fiscal Recasens y en la adaptación de Romeo i Julieta que realizó Josep Maria de Sagarra.
Aunque probó suerte un par de temporadas en Madrid, en 1964 volvió a Cataluña, donde se convirtiño en una de las grandes damas del teatro, un término que a ella no le gustaba. Aunque fue encima de un escenario donde ella forjó su nombre y su carácter como actriz, también participó en series como Hospital central o Crematorio, además de estudiar. También tuvo papeles como actriz de doblaje, donde dio voz a bastantes pesonajes tanto en catalán como en castellano.
En 1995 recibió la Cruz de Sant Jordi, en 1999 la Medalla de Oro al Mérito Artístico y en 2013 el Gaudí de Honor. Además, en 2009 dio junto a su hija Vicky Peña el pregón de las Fiestas de la Mercè, en un discurso en el que homenajearon al teatro catalán de posguerra.