Era una de las favoritas. Por riesgo, por empaque y por resultado. El vientre del mar, de Agustí Villaronga, llegó como uno de los títulos más esperados de esta edición del Festival de Málaga, y no decepcionó. Una propuesta que adapta un texto de Alessandro Baricco y que une pasado y presente, con la historia del naufragio de una fragata en el siglo XIX, y sus paralelismos con los refugiados y las crisis migratorias en la actualidad. El jurado de la Sección Oficial no se lo ha pensado, y ha dado al filme de Villaronga -director de Pa Negre y filmes de culto como Tras el cristal- todos los premios posibles, entre ellos la Biznaga de Oro a la mejor película española.
Pero también se llevó el de Mejor dirección, mejor guion, mejor actor para Roger Casamajor -actor fetiche de Villaronga, Mejor banda sonora y Mejor fotografía. Casi pleno. Para el resto dejó las migajas. Un botín que resulta demasiado abultado. Sobre todo cuando había, al menos, otras dos películas que se merecían rascar algo más. Las dos revelaciones del Festival.
Ama, de Julia de Paz, se tuvo que conformar con el premio Feroz que otorgan los informadores cinematográficos, y el de Mejor actriz para ese torbellino llamado Tamara Casellas que pone alma a una madre nada idealizada. Por su parte, Destello Bravío ganó el premio especial del jurado y el de Mejor montaje. Sabe a poco para ese descubrimiento llamado Ainhoa Rodríguez, que puso el certamen patas arriba con su visión radical de la España vaciada y del deseo femenino a partir de los 50. Dos directoras que comienzan aquí su carrera, pero que no han podido repetir el éxito de directoras como Pilar Palomero, Elena Trapé o Carla Simón.
Otra que se fue injustamente de vacío es Judith Colell, la directora catalana que parecía convencer a la crítica con su retrato de los malos tratos en las clases altas de República Dominicana en 15 horas. Competía por la Biznaga de Oro entre las películas latinas, pero la ganadora fue la otra favorita, Karnawal, que también se llevó el premio al Mejor actor de reparto para Alfredo Castro. La mejor actriz de reparto fue María Romanillos, por Las consecuencias, título que también convenció al jurado de la crítica. El galardón que otorga el público fue para Chavalas.
Concluye así otra edición marcada por el coronavirus, aunque el director del certamen confía en que será la última y en 2022 se podrá volver a una de las señas de identidad del festival: la cercanía de la gente con sus estrellas.
Palmarés Completo
Biznaga de Oro: El vientre del mar
Biznaga de Oro a la Mejor película iberoamericana: Karnawal
Premio especial del jurado: Destello Bravío
Mejor dirección: Agustí Villaronga, por El vientre del mar
Mejor interpretación femenina: Tamara Casellas, por Ama
Mejor interpretación masculina: Roger Casamajor, por El vientre del mar
Mejor interpretación femenina de reparto: María Romanillos, por Las consecuencias
Mejor interpretación masculina de reparto: Alfredo Castro, por Karnawal
Mejor guion: El vientre del mar
Mejor música: El vientre del mar
Mejor fotografía: El vientre del mar
Mejor montaje: Destello Bravío
Jurado de la crítica: Las consecuencias
Premio Feroz Puerta Oscura: Ama
Premio del Público: Chavalas