Exteriores de los juzgados de Sevilla.
La Audiencia obliga a indemnizar con 1.500 euros a la novia de su expareja tras insultarla: "gorda arrugada"
La condenada amenazó a la víctima con que había avisado a "jefes de Madrid" de que la había visto "tomando cervezas" en horario laboral.
12 diciembre, 2023 12:51La Audiencia Provincial de Sevilla ha confirmado una sentencia que condena a una mujer por haber "insultado, vejado y coaccionado" a la novia de su expareja. En concreto, la procesada deberá indemnizar a la víctima con 1.500 euros, y no podrá acercarse ni comunicarse con ella durante seis meses.
Entre las acciones que han justificado esta sentencia, emitida inicialmente por el Juzgado de Instrucción número diez, se encuentra la difusión de un vídeo en redes sociales en el que la condenada describe a la pareja de su exnovio como "mujer gorda con cara arrugada".
El vídeo se difundió en mayo de 2021, y, en él, la mujer condenada insultaba a la víctima mientras "hacía gestos despectivos". En un vídeo posterior, afirmaba haber "hablado con jefes de Madrid y Cataluña" para denunciar que "había visto a la denunciante en horario de trabajo con compañeras tomando cervezas", motivo por el que auguraba que "pronto iba a estar vendiendo verduritas con su padre".
Según recoge la sentencia, la víctima denunció que la acusada utilizaba llamadas y publicaciones en una red social para actuar contra ella, a pesar de que "ella la bloqueaba y le decía que no volviera a llamarla ni a molestarla".
Del mismo modo, la condenada mantenía conversaciones con su expareja en las que, bajo el pretexto de hablar de sus hijos en común, también insultaba a la víctima. En una de esas llamadas, que fue grabada, se refería a ella como "mierda española, sucia, hija de puta, asquerosa" o "perra".
El Juzgado de Instrucción declaró probado que la víctima mantuvo una relación con la expareja de la condenada entre finales de 2020 y agosto de 2021. El noviazgo llegó a su fin ante el acoso al que la tenía sometida la exnovia de su entonces pareja, y al creer la víctima que, de poner fin a la relación, cesaría este comportamiento. Según afirma el Juzgado, además, la mujer "llegó a temer incluso a ser despedida de su trabajo y a sufrir ansiedad".
