En un control rutinario de tráfico de la Guardia Civil. Así ha caído un fugitivo, de nacionalidad rumana y española, que estaba buscado a nivel europeo por multitud de antecedentes penales relativos a tráfico de drogas, desórdenes públicos, incendios, altercados con agentes entre otros.
Este individuo, sobre el que pesaba una orden europea de detención, permanecía oculto en la localidad sevillana de Villamanrique de la Condesa gracias a la ayuda de familiares y conocidos.
Los hechos ocurrieron este pasado sábado durante los dispositivos operativos diseñados para la campaña de Navidad, cuando agentes del subsector de Tráfico de la Guardia Civil interceptaron un vehículo, procediendo a la identificación de su conductor y único ocupante.
Tras comprobar los datos, averiguaron que a esta persona le constaba una orden europea de detención. Por ello, inmovilizaron el vehículo y detuvieron a este hombre, según la información facilitada por el Instituto Armado en una nota de prensa.
El detenido pasará a disposición judicial en los próximos días y será la Audiencia Nacional quien resuelva si procede su extradición o no.
Según los indicios, el ya detenido intentaba evadir a los cuerpos policiales con "constantes traslados en vehículo entre los dos países". De esta forma, esta persona con doble nacionalidad se valía de esta circunstancia para refugiarse durante largas temporadas en uno de los dos países en función del lugar donde cometiera el delito.
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A raíz de una orden de emisión Europea de Detención (OED), por iniciación de las autoridades judiciales rumanas, este hombre se había refugiado en citada localidad donde contaba con multitud de conocidos y familiares que le facilitaban mantenerse oculto.