Pirateó el correo electrónico de Gmail de su profesora y accedió a datos personales y de clase
El joven ha sido condenado a 55 horas de trabajo comunitario y sus padres, a pagar mil euros a la docente violentada
16 enero, 2024 13:47Entró en varias ocasiones en la cuenta de correo electrónico de su profesora. El adolescente, de 17 años, tuvo así acceso a información personal y profesional de la docente.
El joven reconoció los hechos ante el juez y por los que ha sido condenado a 55 horas de trabajo comunitario y sus padres al pago de mil euros de indemnización a la profesora víctima del pirateo.
Los hechos tuvieron lugar en un instituto de Gines, en la provincia de Sevilla. El joven aprovechó el descuido de su profesora para, con el teléfono de ella, entrar en su correo electróniconico de Gmail.
[Prisión permanente para el joven que asesinó, descuartizó y violó a su novia menor de edad]
Los hechos se juzgaron el año pasado. La sentencia se emitió el pasado 13 de noviembre pero se ha hecho pública ahora en enero. El menor, señala el escrito del juez, reconoció haber pirateado la cuenta de correo de su profesora.
"Sin consentimiento"
Y lo hizo "desde el 14 de febrero hasta el 5 de abril del año 2022, sin consentimiento y violando las medidas de seguridad pertinentes", indica el escrito judicial.
El joven "accedió desde su teléfono móvil en numerosas ocasiones a la cuenta drive/nube virtual vinculada a la cuenta de Google corporativa cuya titular es su profesora, donde ésta almacena información tanto de carácter personal como corporativa".
"Hechos graves"
En la vista, según la sentencia, el menor "manifestó ser el autor de los hechos y mostró su conformidad con la medida solicitada por el Ministerio Fiscal" para él, en este caso "la medida de 55 horas de prestación de servicios en beneficio de la comunidad".
Así, se busca "la finalidad de que comprenda que actuó de forma incorrecta, que merece el reproche de la sociedad, que los hechos cometidos son graves", recoge Europa Press.
El juez añade que "se han causado perjuicios a una persona de manera injustificada y que la prestación de servicios que se le exige en beneficio de la comunidad constituye un acto de reparación justa".
Por eso, el Juzgado de Menores número uno de Sevilla condena al adolescente a 55 horas de servicios en beneficio de la comunidad por un delito contra la intimidad, así como a una indemnización de mil euros en favor de la profesora, en concepto de daño moral, cuantía que habrán de pagar el menor y sus padres de forma conjunta y solidaria.
Identificar al autor
Fran Peláez, abogado del despacho sevillano PenalTech y profesional que ha defendido los intereses de la profesora en este caso, ha manifestado al respecto que "este tipo de delitos tecnológicos son extremadamente difíciles de perseguir por su complejidad a la hora de identificar al autor de los hechos".
En este caso concreto, "se dedujo que el intruso podía ser alguien del entorno de la educadora que estuviese interesado en el tipo de información que guarda aquella en la nube".
Por tanto, ante tal escenario confuso, "solo cabía la posibilidad de identificar al autor de los hechos a través de la dirección IP que podría identificar a un dispositivo en Internet o en una red local", según explica el letrado experto en delitos informáticos.