La Audiencia de Sevilla ha condenado a un año y medio de prisión a un varón por un delito de pornografía infantil. La condena llega después de encontrarse en su móvil hasta 159 archivos entre los que figuraban vídeos de "menores 16 años, incluso bebés, participando en conductas sexuales explícitas", según expone la sentencia.

El individuo, de 67 años y residente en Utrera, había sido incluso denunciado por Google ante las autoridades de Estados Unidos, que a su vez trasladaron el asunto a España.

Aquí ha llegado el fallo, que recoge Europa Press. En él, la Sección Séptima de la Audiencia de Sevilla declara probado, que el Centro Nacional para Menores Desaparecidos y Explotados de Estados Unidos emitió informes en los que exponía cómo Google había advertido de que el sujeto compartía estas imágenes a través de su perfil en el buscador.

Ello permitió rastrear la IP del condenado hasta su domicilio en Utrera, que fue registrado en agosto de 2017. En la diligencia los agentes incautaron un disco duro y un teléfono móvil en el que encontraron el material ya citado.

La pena alcanza, de conformidad entre la Fiscalía y el acusado, un año y medio de cárcel por un delito de pornografía infantil, así como tres años de inhabilitación especial para cualquier profesión, oficio o actividades, sea o no retribuido, que conlleve contacto regular y directo con menores de edad.