Decenas de agricultores independientes han vuelto a las calles de Sevilla para reclamar una mejora de sus condiciones. Como la protesta que bloqueó el puerto de Sevilla el pasado 20 de marzo, estaba autorizada. Alrededor de una veintena de tractores han llegado hasta los alrededores del Palacio de San Telmo.
No obstante, la protesta no ha requerido cortes de tráfico totales, ya que en todas las vías estaban obligados a dejar un carril libre para facilitar la circulación, tal como confirmó Subdelegación del Gobierno.
La marcha ha pasado por zonas como República Argentina, el Parque de María Luisa y los alrededores del Palacio de San Telmo. El lema de la movilización era ‘La agricultura unida jamás será vencida'.
Esta manifestación no ha sido organizada por ninguna de las plataformas agrarias que cortaron las principales carreteras de Sevilla el 14 de febrero y bloquearon el puerto de Sevilla el 20 de marzo. En este caso, ha corrido a cargo de agricultores independientes.
Ha contado con la presencia de representantes políticos de Vox como Manuel Gavira, portavoz en el parlamento andaluz, y Javier Cortés, presidente de la formación en Andalucía.
La agenda 2030 era una de las principales preocupaciones de esta marcha. En ella se han podido leer carteles que la consideraban “esclavista”. “No es cambio climático, es manipulación climática” o “Regalan miedo para vendernos seguridad” rezaba en otras de las pancartas.
Casi dos meses de protestas
Aunque ya con menor afluencia, las movilizaciones agrícolas llevan sucediéndose durante casi dos meses. En un principio, eran convocadas por redes sociales y no estaban autorizadas. Así, a inicios del mes de febrero cortaron carreteras en la provincia de Sevilla durante una semana.
Luego se unieron organizaciones agrarias como ASAJA, COAG, UPA y Cooperativas Agro-Alimentarias. Con los permisos pertinentes, cortaron las principales arterias de Sevilla el pasado 14 de febrero, dejándola incomunicada por unas horas. Ya el 20 de marzo, en una protesta menos multitudinaria, bloquearon el Puerto de Sevilla.
Entre medias, el pasado 4 de marzo, la plataforma 6F convocó una manifestación en Sevilla, que no fue autorizada. Llegó hasta la Plaza de España, donde está la sede de Subdelegación del Gobierno.
En ella dos personas fueran detenidas. Quedaron en libertad por cargos. Intentaron romper el cordón policial para pasar por la avenida de María Luisa y mantener el corte de tráfico en lugar de seguir la marcha por el interior del Parque de María Luisa.
La simplificación de la PAC, la imposición de cláusulas espejo para que los productos de terceros países tengan las mismas condiciones que los españoles, así como una mejora de infraestructuras para garantizar el agua son algunas de las reivindicaciones principales de un colectivo que acumula casi dos meses en la calle.