La Policía Nacional investiga la muerte de un hombre cuyo cadáver abandonaron a las puertas de un hospital de Sevilla con signos de haber sido víctima de un tiroteo. Según confirman fuentes de la investigación, fueron dos las personas que habrían arrojado el cuerpo en el centro sanitario.
Los hechos ocurrieron esta madrugada. Según adelanta Diario de Sevilla y confirma la Policía Nacional, dos hombres habrían arrojado el cuerpo sin vida de un tercero a las puertas de una clínica privada en Bellavista.
De ahí fue trasladado al Virgen del Rocío, donde solo se pudo certificar su muerte. El cuerpo, señalan fuentes de la investigación, fue arrojado desde un coche en marcha que algunos testigos describen como un todoterreno.
Los antecedentes policiales de la víctima, el hecho de que fuese tiroteado y las circunstancias del suceso hacen pensar a los investigadores que pudiera tratarse de un ajuste de cuentas por cuestiones de droga.
El hombre fallecido, confirman fuentes de la Policía Nacional, tenía "unos 40 años" y, según diversas fuentes, contabas con antecedes policiales por asuntos relacionados con drogas. Se le relaciona, además, con actividades en el entorno de las Tres Mil Viviendas.
Fuentes de la investigación confirman que el fallecido tenía relación con el tráfico de drogas en Sevilla. Viejo conocido de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, contaba con numerosos antecedentes.
Prisión provisional
El pasado 26 de abril, cabe recodar, el Juzgado de Instrucción número 4 de Sevilla ordenaba el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de cuatro de las cinco personas arrestadas entonces por la muerte de un hombre.
El caso era muy similar: el cuerpo de la víctima fue abandonado en el Hospital de Valme en septiembre de 2023, en una situación similar a la acontecida de nuevo ahora.
Estas personas, pertenecientes a clanes familiares de distinta nacionalidad, fueron detenidas por la Policía Nacional por su presunta implicación en el secuestro y homicidio de este varón, ocurrido a finales del mes de septiembre del pasado año 2023.
Entonces la víctima de los hechos fue secuestrada presuntamente por los encartados, que dejaron al afectado en parada cardiorrespiratoria en el aparcamiento del hospital de Valme.