La Guardia Civil acaba con un clan dirigido por una matriarca que vendía droga cerca de colegios en Sevilla
Se trata de la segunda fase de la operación 'Capoli', en la que se detuvieron a 23 personas.
2 julio, 2024 14:10La Guardia Civil ha detenido este martes a siete miembros de un clan familiar e investigan a otra persona por supuesto tráfico de drogas en Lora del Río, en la provincia de Sevilla. Además, la organización también vendía estupefacientes en Constantina, Peñaflor, La Campana y El Priorato.
Dos de los puntos donde se vendía la droga también se usaban como fumaderos fijos de heroína. Uno de ellos se encontraba en las inmediaciones de un colegio de Lora del Río.
Los detenidos amanezaban a sus colaboradores para mantener la disciplina y el cumplimiento de sus roles. La organización había causado reyertas y peleas con armas de fuego contra otros clanes. Estos altercados coindían, a veces, con la salida de los menores del colegio.
El clan se dedicaba a la venta de heroína, cocaína y hachís. Los agentes han denominado la operación 'Batalla 1571'. Esta desarticulación forma parte de la segunda fase del operativo 'Capoli', iniciado hace cinco meses y en el que se llevaron a cabo 23 detenciones.
La líder del clan era una mujer de la familia que tenía como colaboradores principales a personas encargadas de distribuir la droga, algunas incluso eran menores de edad. Los detenidos usaban el método conocido como 'telecoca'.
Este modus operandi consiste en concretar un lugar de encuentro para agilizar el intercambio y así evitar la intervención de la Policía.
Machetes y un arma de aire comprimido
Los agentes han incautado distintas drogas como cocaína y heroína, además de sustancia de corte. Esto son los elementos que los narcos utilizan para rebajar la carga de droga pura en sus dosis.
En los registros domiciliarios también se han encontrado algunos instrumentos destinados a la preparación y la elaboración de la droga, dinero en efectivo, cuchillos y machetes así como un arma corta de aire comprimido.
Por último, unos técnicos han acreditado que dos de las viviendas implicadas estaban conectadas de manera ilegal a la red eléctrica.